Necesitamos una Carta Magna para Internet

Hace 25 a?os, Internet llevaba ya 20 a?os funcionando y exist¨ªa la posibilidad de enviar mensajes de correo electr¨®nico, recibir noticias y entrar en las oficinas desde fuera, pero lo que no exist¨ªa era la Red. No hab¨ªa p¨¢ginas web, ni portales web, ni enlaces. De modo que invent¨¦ la World Wide Web. A medida que el proyecto crec¨ªa, vi que necesitaba colaboradores. Y para conseguirlos acud¨ª a la comunidad de los t¨¦cnicos de Internet.

En concreto, fund¨¦ el Consorcio World Wide Web (W3C), una organizaci¨®n con m¨²ltiples miembros que elabora est¨¢ndares abiertos para garantizar el desarrollo de la Red a largo plazo. W3C trabaja en distintos aspectos de la tecnolog¨ªa de Internet en colaboraci¨®n con numerosas organizaciones, entre ellas el Grupo de Trabajo de Ingenier¨ªa de Internet (IETF en sus siglas en ingl¨¦s), ECMA/TC39, IANA e ICANN.

Creo que hemos hecho una labor sensata, y espero que est¨¦n de acuerdo conmigo. La Red y su infraestructura de Internet han sido enormes motores de crecimiento y conocimiento para la sociedad. Y lo que lo ha permitido ha sido la colaboraci¨®n entre estas organizaciones y todas sus partes interesadas.

Las infraestructuras de Internet han sido enormes motores de crecimiento y conocimiento para la sociedad

La contribuci¨®n de nuestra comunidad t¨¦cnica ha estado poco supervisada por los Gobiernos. De hecho, nuestra concepci¨®n, seg¨²n los criterios de OpenStand, es que la manera m¨¢s apropiada de construir una infraestructura t¨¦cnica para la sociedad consiste en unir a grupos t¨¦cnicos de m¨²ltiples miembros en los que las decisiones se tomen en funci¨®n del inter¨¦s p¨²blico y bas¨¢ndose en los m¨¦ritos t¨¦cnicos. Las discusiones son abiertas. Los documentos se pueden consultar gratis en Internet. En W3C, en concreto, las empresas se comprometen a que, a medida que se desarrollen los est¨¢ndares, no van a cobrar derechos de propiedad intelectual a quienes los apliquen.

La Red debe ser siempre un sistema que no tenga en cuenta las fronteras nacionales. Hoy en d¨ªa, la mayor parte del trabajo ya se lleva a cabo en la comunidad t¨¦cnica de Internet por encima de las diferencias nacionales. Me he alegrado de saber que ICANN est¨¢ iniciando un di¨¢logo para crear un proceso de revisi¨®n de m¨²ltiples interesados en lugar del proceso a cargo del Gobierno de Estados Unidos. Es lo l¨®gico, puesto que ICANN tiene en cuenta el inter¨¦s p¨²blico en todo el mundo.

Para m¨ª, eso significa que, cuando se tome una decisi¨®n sobre un posible dominio nuevo de primera categor¨ªa, la tarea de ICANN ser¨¢ decidir, de manera transparente y responsable, si de verdad interesa a todo el mundo en general, y no s¨®lo a quienes quieran lanzar ese nuevo dominio.

La Red ha florecido gracias al poder colectivo de personas capaces y conscientes del inter¨¦s p¨²blico

Tambi¨¦n significa que ICANN debe hacer un uso ben¨¦fico de sus fondos, por ejemplo para sufragar la aplicaci¨®n de est¨¢ndares en la tecnolog¨ªa, reforzar su seguridad e internacionalizarla, mejorar la accesibilidad y cerrar la brecha digital.

Internet ha florecido gracias al poder colectivo de personas capaces y conscientes del inter¨¦s p¨²blico: al principio, de la comunidad t¨¦cnica y el mundo acad¨¦mico, acompa?ados despu¨¦s del sector privado en general, la sociedad civil y los Gobiernos. Necesitamos un sistema de gobernanza de Internet que permita a cada comunidad aportar lo mejor de s¨ª misma al esfuerzo com¨²n pero impida que cualquiera de ellas ponga sus propios intereses por delante del bien p¨²blico.

Hace cinco a?os cre¨¦ una organizaci¨®n llamada Fundaci¨®n World Wide Web para garantizar que la Red siga siendo la Red que deseamos y que todo el mundo pueda conectarse a ella y utilizarla con libertad.

Los principios de los derechos humanos en Internet son nuevos y no todos los aceptan

La Red se ha convertido en un servicio p¨²blico esencial. Por supuesto, muchas de nuestras ideas tradicionales sobre los derechos humanos sirven para todo lo que ocurre en Internet. Pero tambi¨¦n hay algunas cosas nuevas que son importantes:

¡ªLa neutralidad en la Red significa mantenerla limpia de discriminaci¨®n, ya sea comercial o pol¨ªtica. La explosi¨®n innovadora producida en Internet en los ¨²ltimos 25 a?os s¨®lo ha sido posible gracias a su neutralidad. El revolucionario sentimiento social de que es posible entendernos entre nosotros y vivir en paz depende de que sea una Red abierta.

¡ªLa libertad de expresi¨®n es un derecho crucial, pero debe ir unido al derecho a la privacidad. La vigilancia masiva es tal vez la amenaza m¨¢s inmediata e insidiosa contra los derechos humanos en Internet.

Estamos celebrando el hecho de que el Senado brasile?o haya aprobado la ley denominada Marco Civil da Internet, un gran ejemplo del papel positivo que pueden desempe?ar los Gobiernos para promover los derechos en la Red y mantenerla como un instrumento abierto. En Europa tambi¨¦n est¨¢n celebrando que el Parlamento Europeo haya aprobado una ley que protege los derechos de los internautas, incluida una forma de neutralidad de la Red.

Estos dos hechos demuestran que estamos avanzando. Pero todav¨ªa tenemos mucho trecho que recorrer.

Los principios de los derechos humanos en Internet son nuevos y no todos los aceptan. La Red es cada vez m¨¢s apasionante gracias a los avances tecnol¨®gicos, pero el 60% de la poblaci¨®n sigue sin poder utilizarla. Al mismo tiempo que Internet da a la gente cada vez m¨¢s poder, tanto individual como colectivo, hay numerosas fuerzas que hacen una mala utilizaci¨®n o amenazan con hacerla y que abusan de los internautas.

La Red que tendremos dentro de 25 a?os no est¨¢ clara, en absoluto, pero somos nosotros quienes debemos decidir qu¨¦ queremos que sea, qu¨¦ queremos que sea ese mundo. Por eso pido a los usuarios de la Red en todo el mundo que definan una Carta Magna para Internet. Por eso pido a todos los pa¨ªses que sigan el ejemplo de Brasil y elaboren leyes positivas que protejan y ampl¨ªen los derechos de los usuarios a una Red abierta, libre y universal.

Tim Berners-Lee invent¨® la World Wide Web y es fundador de la World Wide Web Foundation. (Texto adaptado de unas palabras pronunciadas en la Conferencia Mundial sobre Internet celebrada la semana pasada en Brasil).

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Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.