Zegna te quiere financiar

Tiene que haber vivido en una caja durante las ¨²ltimas 24 horas si todav¨ªa no se ha enterado de que ayer se fall¨® el primer premio de moda LVMH. Sobre todo por la cuant¨ªa: el ganador, Richard Tait, se lleva 300.000 euros y un a?o de coaching empresarial por parte de los ejecutivos del primer conglomerado de lujo del mundo. A muchos les sorprender¨¢ que la moda no siempre gire sobre s¨ª misma y sus talentos m¨¢s establecidos, pero la industria de la moda siempre ha estado atenta a lo que suced¨ªa en las aulas. Fue un concurso ¨Cel del Secretariado de la Lana franc¨¦s¨C el que permiti¨® que dos j¨®venes llamados Yves Saint Laurent y Karl Lagerfeld pisaran Par¨ªs por primera vez, y para quedarse, en 1947. Tambi¨¦n surgi¨® de un evento acad¨¦mico ¨Cel desfile de graduaci¨®n de Central Saint Martins¨C uno de los encuentros m¨¢s decisivos de la moda contempor¨¢nea: el momento en que una exc¨¦ntrica estilista llamada Isabella Blow compr¨® la totalidad de la colecci¨®n de graduaci¨®n de un estudiante d¨ªscolo que respond¨ªa al nombre de Alexander McQueen.

Parece una estrategia l¨®gica y un ejemplo perfecto de win/win: sirve para captar nuevos talentos, para premiar a los alumnos aventajados y para asegurar el futuro de la industria. Sin embargo, ?se imagina que las firmas de moda no s¨®lo premiaran a los talentos del sector, sino tambi¨¦n a cient¨ªficos, ingenieros, fil¨®logos o periodistas?

Este es el planteamiento que ha llevado al Grupo Ermenegildo Zegna a presentar un programa de becas que lleva el nombre del fundador de la empresa ¨Cy del nombre de la misma¨C, y que aspira a hacer patria financiando a j¨®venes italianos el coste de sus estudios de m¨¢ster o doctorado en prestigiosas universidades y centros de investigaci¨®n extranjeros. La beca del Fundador Ermenegildo Zegna se conceder¨¢ cada a?o a alrededor de diez candidatos, que ser¨¢n seleccionados en base al m¨¦rito y "a su deseo y capacidad de contribuir a Italia". Recibir¨¢n hasta 50.000 € anuales en ayuda financiera por un m¨¢ximo de tres a?os. Lo bueno es que no hablamos de una maniobra de relaciones p¨²blicas, sino de un proyecto a lo grande: su presupuesto anual es de un mill¨®n de euros, y aspira a funcionar durante 25 a?os. 25 millones de euros durante un cuarto de siglo.

Lo m¨¢s llamativo es que no hay ning¨²n tipo de restricci¨®n en cuanto al ¨¢mbito de especializaci¨®n; parece claro que el mundo textil estar¨¢ representado, pero tambi¨¦n la ciencia, las humanidades, las ciencias sociales, la comunicaci¨®n o la ingenier¨ªa tendr¨¢n su hueco en un programa cuyo objetivo es ayudar a los destinatarios de las becas a encontrar trabajo cuando regresen a Italia, despu¨¦s de formarse y especializarse en el extranjero. Se trata, seg¨²n Gildo Zegna, CEO de la casa, de ofrecer "una soluci¨®n real, aunque parcial, a la llamada fuga de cerebros. Asumimos en parte la responsabilidad por el futuro de nuestro pa¨ªs. Crear las condiciones para una recuperaci¨®n no solo depende de la econom¨ªa, sino del conjunto de la sociedad italiana, de nuestra capacidad para ofrecer a los j¨®venes con talento un futuro aqu¨ª y ahora, para que sus habilidades puedan crear valor".

El programa de Zegna tambi¨¦n es un soplo de aire fresco en el mundo de la subvenciones estudiantiles, porque introduce una filosof¨ªa corporativa algo diferente a la de las instituciones financieras que, desde hace d¨¦cadas, son las principales concesionarias de becas de posgrado. Como las becas del Fundador de Ermenegildo Zegna son solo para italianos, en Espa?a solo nos queda pedir, por ejemplo, las de La Caixa, que son las m¨¢s similares en cuanto a amplitud y dotaci¨®n. O esperar a que alg¨²n empresario textil espa?ol decida seguir el ejemplo de Zegna. ?Se imaginan?

Mientras esperamos, Zegna ha grabado unos v¨ªdeos con los divulgan su idea de vestir bien. Que hemos de decir que es bastante acertada: