El millonario Chen Guangbiao pone mil pobres en su mesa

El millonario chino Chen Guangbiao es tan conocido en su pa¨ªs por su fortuna y sus actos filantr¨®picos como por su af¨¢n de autopromoci¨®n. El hombre que se describe en su tarjeta de visita como ¡°La persona m¨¢s influyente de China¡± vuelve a acaparar titulares al prometer que invitar¨¢ a comer este mi¨¦rcoles en el Central Park de Nueva York a mil pobres estadounidenses, a cada uno de los cuales tambi¨¦n dar¨¢ 300 d¨®lares en met¨¢lico.

Chen public¨® su oferta en un un anuncio en ingl¨¦s y mandar¨ªn, dise?ado por ¨¦l mismo, en los diarios The Wall Street Journal y The New York Times. Precisamente, a comienzos de este a?o asegur¨® que intentar¨ªa comprar este ¨²ltimo peri¨®dico, pese a la tajante negativa de sus propietarios, la familia Ochs-Sulzberger.

El primer almuerzo, para 250 personas, tendr¨¢ lugar este mi¨¦rcoles en el restaurante Loeb Boathouse de Central Park. Un almuerzo que Chen amenizar¨¢ con su versi¨®n de la canci¨®n We Are The World, de Michael Jackson. Luego le seguir¨¢n otras tres comidas. Seg¨²n asegur¨® Chen en una entrevista para South China Morning Post, se trata de ¡°difundir la idea en EE UU de que hay buenos fil¨¢ntropos en China y no todos gastan a lo loco en productos de lujo¡±. Tambi¨¦n, asegura, quiere contribuir a las buenas relaciones entre los dos pa¨ªses. ¡°Fil¨¢ntropos estadounidenses donaron dinero en desastres naturales en China. ?Por qu¨¦ no podemos ayudar nosotros a los pobres en EE UU?¡±, reflexiona.

El empresario calcula que la iniciativa le costar¨¢ cerca de un mill¨®n de d¨®lares, y espera que quienes reciban el dinero en met¨¢lico lo empleen en cursos de formaci¨®n. Un presupuesto que parece asequible: la consultora china Hurun Report le calcula una fortuna de m¨¢s de 600 millones de euros. Muy lejos de la pobreza de sus primeros a?os. Nacido en 1968, en plena Revoluci¨®n Cultural, en una familia de granjeros en la provincia de Jiangsu, vio morir de hambre a dos de sus hermanos durante la infancia, una ¨¦poca en la que solo consegu¨ªa probar la carne una vez al a?o: en la fiesta de A?o Nuevo.

Se gradu¨® en Medicina tradicional china y se inici¨® en el mundo de los negocios trabajando en empresas de equipamiento m¨¦dico, desde donde dio el salto para fundar la compa?¨ªa que le ha hecho millonario, Huangpu Renewable Resources Limited, especializada en el reciclaje de desechos dom¨¦sticos y material de construcci¨®n.

Salt¨® a la fama como fil¨¢ntropo durante el terremoto de Sichuan de 2008, en el que se calcula que fallecieron casi 70.000 personas. Chen se person¨® en la zona afectada y extrajo cerca de 200 cad¨¢veres, seg¨²n afirma. Don¨® tambi¨¦n maquinaria para la reconstrucci¨®n y dinero en efectivo a las v¨ªctimas. Sus esfuerzos le valieron el que la revista Forbes le incluyera en su lista de los fil¨¢ntropos m¨¢s destacados de Asia ese a?o y en 2009. En 2011 prometi¨® que a su muerte sus hijos no le heredar¨ªan y en su lugar su fortuna se destinar¨ªa a programas caritativos.

Pero desde entonces sus actos filantr¨®picos de este millonario se han hecho cada vez m¨¢s extravagantes y cada vez m¨¢s medi¨¢ticos. Desde el reparto de veh¨ªculos de fabricaci¨®n nacional a los propietarios que vieron destrozados sus autom¨®viles japoneses durante las protestas antiniponas de hace dos a?os en China hasta la distribuci¨®n de decenas de miles de d¨®lares en met¨¢lico entre los ciudadanos taiwaneses, sus actos de caridad suelen llamar la atenci¨®n por su naturaleza ins¨®lita -y por la cantidad de prensa que convocan-.

Hace dos a?os quiso llamar la atenci¨®n sobre la grave contaminaci¨®n medioambiental que padece China mediante la venta de aire puro enlatado. Por 5 yuanes (unos 0,65 euros), los compradores pod¨ªan disfrutar de una r¨¢faga de aire puro del ¡°pr¨ªstino T¨ªbet¡± o del ¡°Taiw¨¢n post-industrial¡±. El diario taiwan¨¦s Want Times asegur¨® en su momento que Chen vendi¨® m¨¢s de ocho millones de latas en diez d¨ªas.

Es lo que a ¨¦l le gusta describir como ¡°filantrop¨ªa llamativa¡±, y otros consideran vulgares actos de autopromoci¨®n, aunque siempre controlada por ¨¦l: Chen no respondi¨® a ninguno de los repetidos intentos de este diario por hablar con ¨¦l. Que le gusta la publicidad, est¨¢ claro. Y que la modestia no es uno de sus fuertes, tambi¨¦n. En la tarjeta que suele entregar a la prensa occidental figuran, adem¨¢s de su foto y sus datos de contacto, t¨ªtulos como ¡°Persona m¨¢s influyente de China¡±, ¡°Fil¨¢ntropo m¨¢s prominente de China¡±, ¡°L¨ªder Moral de China¡± y ¡°Modelo a imitar m¨¢s conocido y amado de China¡±.