El papa Francisco

Francisco est¨¢ haciendo lo que Benedicto no pudo. Limpiar la curia romana de malos elementos, sanear y transparentar los dineros del Vaticano, investigar los casos de sacerdotes pederastas con tolerancia cero, incluir a los marginados en el seno de la Iglesia, dejar a un lado la pompa y boato que hasta ahora caracterizaba a los ocupantes de la silla de Pedro, vivir frugalmente, enviando un mensaje de apertura, contenci¨®n, modestia, igualdad y esperanza para los que sufren. Hasta en Estados Unidos, poco propensos a l¨ªderes espirituales, tiene una magn¨ªfica prensa. ?ltimamente ha estado revolucionando Corea del Sur e incluso el ¨ªnclito vecino del norte lo recibe disparando una sarta de misiles a modo de explosiva celebraci¨®n. Quiere mandar un mensaje a todos los vecinos asi¨¢ticos, incluido China, de que la Iglesia es tolerante, no subversiva, y que incluso pudiera florecer en reg¨ªmenes no liberales dictatoriales, tan s¨®lo si, como dice la canci¨®n, nos dejan.¡ª Luis Peraza Parga.