Por un nuevo pacto social europeo
La creaci¨®n de empleo debe ser la prioridad en la pol¨ªtica econ¨®mica de la UE
Merkel y Rajoy celebran este fin de semana un encuentro para hablar del futuro de Espa?a y de Europa, aunque, con una tasa de paro de casi el 25%, un nivel de endeudamiento hist¨®rico y cuando se anuncian nuevos recortes, hay muy poco que celebrar y mucho que rectificar.
En estas reuniones suele ocurrir que los silencios tienen la fuerza de verdaderas declaraciones. Probablemente, les escucharemos hablar mucho de la confianza de los mercados y muy poco de la confianza ciudadana. Sin duda, les oiremos decir que lo peor se aleja, pero callar¨¢n que la desigualdad se queda con nosotros. Insistir¨¢n en que hay que perseverar en los esfuerzos, pero silenciar¨¢n que estos los seguir¨¢n soportando los de siempre.
Creo que, a estas alturas, los espa?oles no estamos para juegos de palabras, y no me preocupa la denominaci¨®n o los calificativos ¡ªcrisis, desaceleraci¨®n, crecimiento moderado, franca recuperaci¨®n¡ª que elijan para el momento que vivimos. Hay muchos espa?oles de 30 a?os que nunca han tenido empleo, y muchos otros de mi generaci¨®n, mayores de 45, que no volver¨¢n a trabajar, si no cambiamos dr¨¢sticamente las cosas. Lo que me preocupa es una pol¨ªtica que solo les promete menos oportunidades, menos salarios y menos derechos: ning¨²n futuro.
Uno de cada cuatro contratos temporales firmados en Espa?a durante el ¨²ltimo mes dur¨® menos de una semana, y, tras a?os de sacrificios, los ¨²ltimos datos de la eurozona amenazan con devolvernos a la casilla de salida. Lo que me preocupa es que el recetario econ¨®mico conservador sacrifica a las rentas medias y bajas, a la clase media y trabajadora.
No hay mayor ceguera que la de quien no quiere ver, ni mayor error que esperar obtener resultados diferentes repitiendo los mismos errores. En los ¨²ltimos dos a?os y medio, la econom¨ªa europea ha ca¨ªdo un 0,4%, y el PIB espa?ol, algo m¨¢s del 1%, mientras que EE?UU crec¨ªa un 5,2%. Es evidente que en la zona euro no se han hecho bien las cosas. Perdimos la oportunidad de hacer frente a la crisis con pol¨ªticas modernizadoras y podemos perder la salida de la crisis si no hacemos algo diferente. El Informe del Grupo de Reflexi¨®n sobre el futuro de la UE dirigido por Felipe Gonz¨¢lez lo se?alaba certeramente en 2010, la crisis y la globalizaci¨®n sit¨²an a la Uni¨®n ante un dilema: reformarse o decaer, ser un agente del cambio o soportarlo pasivamente. Conocemos nuestros problemas, sabemos que hay respuestas, lo que no hay es liderazgo pol¨ªtico.
Por eso creo que necesitamos un cambio radical en la pol¨ªtica econ¨®mica europea. Y cambiar las cosas yendo a la ra¨ªz de los problemas fue el sentido de una Uni¨®n levantada sobre las cenizas de la confrontaci¨®n; ¡°Que nadie pueda decir que hemos pecado de falta de audacia¡±, ped¨ªa entonces Paul Henri Spaak. Hoy, ser fieles a esa Europa nos exige corregir todo aquello que no funciona para poder preservar lo que funciona. No es suficiente creer en Europa, hay que transformar Europa.
Conocemos nuestros problemas, sabemos que hay respuestas, lo que no hay es liderazgo pol¨ªtico
Los socialistas proponemos forjar un nuevo pacto social europeo por la competitividad, el trabajo y la cohesi¨®n social. Un pacto que convoque a la sociedad y la pol¨ªtica en su conjunto, semejante al construido tras la II Guerra Mundial y que sirvi¨® para levantar una econom¨ªa social de mercado que permiti¨® el mayor periodo de prosperidad de Europa. El pacto que proponemos aspira a construir una Europa competitiva por la preparaci¨®n de sus trabajadores y la innovaci¨®n de sus empresas, no por el recorte de salarios y derechos. Una Europa que sea un referente de sostenibilidad social y ambiental, que ponga las instituciones, empezando por el Banco Central, al servicio de los ciudadanos y que d¨¦ prioridad a la creaci¨®n de empleo. Europa no se construir¨¢ a costa de los europeos.
Eso es lo que creo que habr¨ªa que decirle a la canciller Merkel. Lamentablemente, parece que nada de esto preocupa a un presidente que, en lugar de preguntarse c¨®mo se pueden ganar la vida Espa?a y Europa, ha decidido concentrar su esfuerzo en otro dif¨ªcil reto: colocar a dos hombres y ninguna mujer en las instituciones comunitarias, Guindos y Ca?ete.
Los socialistas vamos a entregar al se?or Rajoy un dec¨¢logo de medidas inscritas en el pacto social europeo que activen la pol¨ªtica monetaria, cambiaria, fiscal, energ¨¦tica, financiera, industrial y laboral para impulsar a corto plazo el crecimiento.
Una bater¨ªa de iniciativas concretas entre las que se incluye un plan europeo de empleo juvenil para los menores de 30 a?os; a¨²n estamos a tiempo de evitar una generaci¨®n perdida. Tambi¨¦n la puesta en marcha de una pol¨ªtica de reindustrializaci¨®n que nos permita recuperar tejido productivo y competir globalmente. Medidas para avanzar hacia un verdadero mercado de trabajo europeo garantizando los derechos de los trabajadores e impulsando una concertaci¨®n social de alcance comunitario. Y una pol¨ªtica energ¨¦tica europea, porque no podemos seguir manteniendo una dependencia que lastra nuestro crecimiento, empe?a nuestro futuro y no afronta el desaf¨ªo global del cambio clim¨¢tico.
Son solo algunas de las propuestas que hoy presentamos, y s¨¦ que hay quien dir¨¢ que no es tiempo de ideales y m¨¢s vale ser pragm¨¢ticos. Yo lo soy, y creo que ser pragm¨¢tico hoy es defender la Europa de los valores frente a la Europa de los acreedores. Creo que no podemos escribir el futuro con f¨®rmulas que han fracasado. Que la resignaci¨®n nunca ha construido hospitales ni escuelas. Creo que el modelo social europeo es el mayor ejemplo de progreso que ha conocido la humanidad y que no podemos renunciar a ¨¦l sin renunciar a nosotros mismos.
Esa es la Europa por la que vale la pena que luchemos. Esa es la Europa y la Espa?a a las que dedicar¨¦ todo mi esfuerzo.
Pedro S¨¢nchez es secretario general del PSOE.
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