?Ser¨¢ Andreja Pejic tan rentable como Andrej Pejic?
Tras su operaci¨®n de cambio de sexo, la modelo busca su nuevo sitio
Tumbado en una cama de hospital, Andrej Pejic bromea con un amigo al tel¨¦fono. ¡°Me han llamado para un desfile de Donna Karan, quiz¨¢ deber¨ªa llevar el cat¨¦ter como complemento¡±. Acaba de someterse a una operaci¨®n de cambio de sexo. Ya no es Andrej, el modelo de rasgos andr¨®ginos. Desde el pasado julio, es Andreja, psicol¨®gica, legal y biol¨®gicamente una mujer. Su aspecto apenas ha cambiado, pero su decisi¨®n puede tener consecuencias profesionales.
La escena pertenece al documental Andrej(a). La modelo ha decidido grabar el proceso para dar cuenta, precisamente, de las razones por las que ha puesto lo personal por encima de lo profesional. ¡°Ten¨ªa dos posibilidades: esconderlo y vivir con miedo. O estar orgullosa de ello y compartir mi historia con el mundo¡±, cuenta en el tr¨¢iler de la cinta. Puede resultar contradictorio, pero dentro del discurso que maneja la moda, parecer una mujer no tiene nada que ver con ser una mujer. En un ¨¢mbito que encumbra la perfecci¨®n est¨¦tica, pero tambi¨¦n sus peculiaridades y excepciones, Andrej, el andr¨®gino, le gana la batalla a Andreja.
En 2011, The New York Magazine retrataba en portada a Pejic bajo el t¨ªtulo ¡°El chico m¨¢s guapo del mundo¡±. El modelo se encontraba entonces en el c¨¦nit de su carrera. Su belleza t¨ªpicamente femenina y su g¨¦nero masculino le hab¨ªan convertido en la nueva sensaci¨®n de la industria. Desfilaba con trajes de hombre para Paul Smith, vestido de novia en Jean Paul Gaultier o jugaba al cambio de roles con la modelo Saskia de Braw.
Desde que Carine Roitfeld, entonces directora de Vogue Par¨ªs, decidi¨® vestirle con un traje de mujer de Fendi en uno de sus editoriales, Pejic encontr¨® en la confusi¨®n de g¨¦neros el modo de labrarse un nombre. Cuando se le preguntaba si se sent¨ªa m¨¢s hombre o m¨¢s mujer, siempre daba respuestas esquivas. Dec¨ªa que la androginia le permit¨ªa explorar su sexualidad de un modo art¨ªstico y se regodeaba en la controversia que generaba su personaje.
Pero Pejic ya no es el ¡°chico m¨¢s guapo del mundo¡±. Se cans¨® de dar declaraciones efectistas y jugar a las medias verdades. La persona ha vencido al personaje. ¡°La androginia se hab¨ªa convertido en un modo de expresar mi feminidad sin dar explicaciones¡±, confesaba en Style.com. ¡°pero siempre tuve en mente que, al final, mi gran sue?o era ser una chica¡±.
Si bien existen varios modelos transexuales de ¨¦xito (la pasada primavera, Barney¡¯s se ali¨® con Bruce Weber para narrar la historia de algunos de ellos), Pejic ha sido la primera en cambiar de sexo cuando ya era una figura p¨²blica. Hoy quiere ser una modelo, desfilar y protagonizar campa?as como cualquiera de sus compa?eras, y dejar atr¨¢s aquellos editoriales titulados ¡°Los chicos se encuentran con las chicas¡± (Vogue Brasil) o ¡°Mr. Unisex¡± (Viva Magazine). Para lograrlo, nada mejor que narrar visualmente los motivos de esta transici¨®n, personal y profesional.
Dirigido por su amigo Eric Miclette (que tambi¨¦n rueda un documental sobre Laverne Cox, la transexual nominada al Emmy por su papel en Orange is the new black), la cinta hace un breve recorrido biogr¨¢fico, desde su infancia en un campo de refugiados a su ascenso como top model, y se centra en el proceso de cambio de sexo. Pejic y Miclette quieren seguir filmando durante los seis meses que siguen a la operaci¨®n, y para ello han lanzado una campa?a de crowdfunding para recaudar dinero. Con el hashtag #andrejadoc, rostros conocidos como el del actor Jared Leto o el m¨²sico Adam Lambert ya han apoyado la iniciativa.
¡°Lo que importa es saber qu¨¦ viene ahora¡±, afirma en el v¨ªdeo promocional. Probablemente, no se refiere s¨®lo a los cambios personales, tambi¨¦n a los profesionales: apareci¨® en el desfile de DKNY de este oto?o, pero no en el de la pr¨®xima primavera, que se celebr¨® la semana pasada y en el que s¨ª aparece Stav Strashko, el nuevo modelo andr¨®gino favorito de la industria.
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