El casting

En medio de la desmoralizada sociedad espa?ola ha brotado un ideal de regeneraci¨®n social espoleado por la c¨®lera difusa de unos j¨®venes, que amenaza con llevarse por delante las viejas formas anquilosadas de los partidos pol¨ªticos junto con el c¨²mulo de palabras gastadas. En su incipiente formaci¨®n, Podemos se ha constituido en baluarte frente a una corrupci¨®n masiva, que ha terminado por pudrir las ra¨ªces de la democracia. Pronto le llegar¨¢ la hora de medir su entusiasmo y sus promesas, no solo con la casta pol¨ªtica, sino con una realidad m¨¢s honda y cutre del costumbrismo salvaje de la Espa?a negra cuyas secuelas todav¨ªa perduran. La regeneraci¨®n debe comenzar por la base, por la caspa, no por la casta. A los futuros votantes de Podemos, gente de todas clases, con coleta o con abrigos de pantera de Somalia, ofendidos y humillados, unidos por el mismo cabreo, les gustar¨ªa saber qu¨¦ actitud ecol¨®gica adopta esa formaci¨®n frente a la crueldad con los animales cuyo degradante paradigma es el Toro de la Vega. Las ideas pol¨ªticas sint¨¦ticas a priori se mantienen puras mientras vuelan por el espacio sideral de Plat¨®n, pero esas ideas incontaminadas, que transportan sue?os de igualdad, de justicia y solidaridad, tarde o temprano tienen que bajar de las esferas plat¨®nicas para encarnarse en los rostros de unos pol¨ªticos determinados. Casta significa linaje, ascendencia o familia. Contra la vieja casta pol¨ªtica y tambi¨¦n contra el casticismo de algunas costumbres b¨¢rbaras, Podemos deber¨¢ realizar su propio casting,un proceso de selecci¨®n de actores o modelos. El problema llegar¨¢ cuando aquellos ideales tan puros se encarnen en el linaje, la ascendencia o familia de los candidatos de Podemos, cada uno de su padre y de su madre, con un pasado y una ambici¨®n, de forma que Plat¨®n se vea obligado a mancharse las manos de grasa.

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