Siete razones por las que la reforma del aborto era una p¨¦sima idea
No daban cr¨¦dito. Mostraban una indignaci¨®n al mismo tiempo profunda e instant¨¢nea, como si les acabasen de dar un bofet¨®n. Peinaban canas muchas de las mujeres que llegaron desde todos los puntos de Espa?a para manifestarse en febrero pasado contra esa ley del aborto, la m¨¢s restrictiva de la democracia, que acababa de lanzar el PP. "Nunca pens¨¦ que tendr¨ªa que volver a salir a la calle por esto", repet¨ªan una a una, la sombra del miedo, de la clandestinidad, ante sus ojos. Las m¨¢s j¨®venes declaraban incredulidad, no conocen otra cosa que la ley de plazos vigente o la de 1985, con sus supuestos. Todas ellas so?aban precisamente con la marcha atr¨¢s, algo que ha ocurrido oficialmente este martes, el primer d¨ªa del oto?o de 2014. Sin entrar en los causas reales para guardar la nueva ley en un caj¨®n (sospechamos que poco tiene que ver con las creencias de aquellas mujeres) y que han causado la ca¨ªda del ministro de Justicia, ?lberto Ruiz-Gallard¨®n, aqu¨ª siguen siete razones por que la reforma del aborto del Gobierno del PP era una p¨¦sima idea:
1. Nos quitaban un derecho. El derecho a decidir de las mujeres sobre si deseamos tener un hijo o no, reconquistado en 2010, m¨¢s de 50 a?os despu¨¦s de que se otorgase en la Rep¨²blica, se acababa con la reforma de Gallard¨®n. Con la norma actual, se puede interrumpir el embarazo sin dar explicaciones hasta la semana 14 de la gestaci¨®n (y hasta la 22 en algunos supuestos).
2. Las mujeres no necesitamos tutela. La reforma propugnada por el Ejecutivo del PP obligaba a la mujer que deseaba abortar a someterse al dictamen de no uno, sino ?dos m¨¦dicos! que determinaban si pod¨ªa interrumpir el embarazo.
3. No puedes imponer tu moral a la mayor¨ªa de los ciudadanos. Nadie obliga a nadie a ejercer un derecho garantizado por ley. Si tus creeencias o religi¨®n te impiden interrumpir la gestaci¨®n o casarte si eres homosexual, no lo hagas. Pero de ah¨ª a imponer tu visi¨®n a tus conciudadanos con grave menoscabo de sus libertades va un mundo. La mayor¨ªa de los espa?oles est¨¢ de acuerdo con la actual ley de plazos (un 60%, seg¨²n una encuesta de Metroscopia para EL PA?S). Incluso un tercio de los votantes del PP y de los que se declaran cat¨®licos cre¨ªan que no se deb¨ªa modificar la norma por la que se permite abortar libremente hasta la semana 14.
4. Si quieres que haya menos abortos, no debes restringir el derecho. Cuanto m¨¢s permisiva es la ley, menos interrupciones de gestaciones se producen, seg¨²n esta revisi¨®n de la prestigiosa revista The Lancet de 2012 que abundaba en un ejemplo: Sud¨¢frica es el pa¨ªs africano con menor n¨²mero de abortos y el ¨²nico con una norma despenalizadora. Si se desea disminuir el n¨²mero de interrupciones voluntarias de embarazos, el objetivo es que estos, si son indeseados, no se produzcan.
5. Significaba volver a los d¨ªas del franquismo. En 1985, los socialistas aprobaron la despenalizaci¨®n parcial del aborto en tres supuestos. Hasta entonces, la clandestinidad, los viajes a Europa y las graves secuelas para la salud de las mujeres eran un hecho en la Espa?a posfranquista. La reforma Gallard¨®n ni siquiera contemplaba el supuesto de abortar por grave malformaci¨®n del feto, algo que la ley de 1985 observaba, y obligaba a obtener la acreditaci¨®n de dos m¨¦dicos que no fuesen los de la cl¨ªnica en la que se iba a abortar. Con la primera reforma socialista bastaba con la aprobaci¨®n de un facultativo, normalmente del centro en el que se iba a producir la interrupci¨®n del embarazo.
6. Pas¨¢bamos a ser una excepci¨®n en el panorama europeo, en vez de la regla. La reforma gubernamental incurr¨ªa en algo ins¨®lito: volv¨ªamos a alinearnos con casos singulares como Malta (prohibido) o Irlanda (permitido en el supuesto de enfermedad grave de la madre) despu¨¦s de pertenecer desde 2010 al abrumador pelot¨®n de pa¨ªses con ley de plazos.
7. El argumento de "defender el derecho reproductivo de las mujeres" para sostener la reforma era un insulto. ?Proteges el derecho a ser madre negando otro derecho? ?Necesitamos las mujeres un tutor, o mejor, dos, para que podamos tomar una decisi¨®n que puede cambiarnos la vida? Lo que necesitamos es protecci¨®n del Estado para contar con guarder¨ªas gratuitas, bajas de maternidad y paternidad m¨¢s extensas o formas de trabajar realmente compatibles con tener hijos.
La fotograf¨ªa que abre la entrada de este blog es de la manifestaci¨®n de febrero contra la reforma de la ley del aborto y fue tomada por SAMUEL S?NCHEZ
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