Petr¨®leo en Canarias: ?qu¨¦ hacer?

Tras la autorizaci¨®n para realizar prospecciones petrol¨ªferas frente a las costas de Lanzarote y Fuerteventura se ha generado un debate pol¨ªtico, medioambiental y social desmesurado. Mientras el Gobierno central apuesta por la explotaci¨®n de estos yacimientos ¡ªde haberlos¡ª, el de Canarias y los Cabildos de Lanzarote y Fuerteventura se muestran en contra.

A favor de las prospecciones y la extracci¨®n de hidrocarburos en la zona se argumenta que Canarias tiene un elevado ¨ªndice de desempleo (superior al 30%), y la necesidad de diversificar la econom¨ªa: dos realidades objetivas. Repsol asegura que en los tres primeros a?os de explotaci¨®n se generar¨¢n entre 4.000 y 5.000 puestos de trabajo. En contra de esta actividad se hace alusi¨®n a los numerosos riesgos que implicar¨ªa para el medio ambiente, la biodiversidad, la poblaci¨®n, y concretamente para la actividad tur¨ªstica como actual motor econ¨®mico de la regi¨®n. Se destaca, adem¨¢s, la preocupaci¨®n al tratarse de perforaciones en aguas profundas. Por su parte, Repsol y otros expertos aseguran que la compa?¨ªa tiene mucha experiencia en este tipo de extracciones, que en Brasil han llegado a los 7.000 metros de profundidad, y que la normativa europea en esta materia es muy estricta, por lo que el proceso va a ser muy seguro.

Existe a¨²n gran incertidumbre acerca de los beneficios econ¨®micos que la extracci¨®n de hidrocarburos aportar¨¢ a Espa?a y a Canarias. El ¨²nico beneficio fiscal establecido sobre este tipo de yacimientos, hasta el momento, vendr¨ªa aportado por el impuesto sobre sociedades. La legislaci¨®n vigente no establece canon alguno sobre el hidrocarburo que se extraiga; no obstante, se prev¨¦ desde Industria la posibilidad de crear un tributo especial sobre los ingresos que perciba el Estado de esta explotaci¨®n para beneficiar a Canarias.

Algunos aspectos legales est¨¢n resueltos, como la competencia sobre la extracci¨®n de hidrocarburos, que es estatal; para el l¨ªmite que separa las aguas espa?olas de las marroqu¨ªes, el Gobierno ha empleado la l¨ªnea mediana entre ambos pa¨ªses.

Canarias tiene como meta la reducci¨®n de la utilizaci¨®n de fuel en la producci¨®n energ¨¦tica y el aumento del uso de energ¨ªas renovables. Sin embargo, hemos de recordar a los canarios que el 27% del petr¨®leo que se consume en las islas es para producir electricidad. En este 27% es donde est¨¢ el espacio para utilizar las renovables. El 73% del consumo restante es de fuel para barcos, queroseno para la aviaci¨®n y gasolina o gasoil para el transporte interno, que seguir¨¢ necesitando el petr¨®leo. Pero la extracci¨®n de petr¨®leo no tiene por qu¨¦ implicar que este se vaya a consumir en las islas, por lo que no es necesariamente incompatible con la utilizaci¨®n de renovables.

En este sentido, varios operadores tur¨ªsticos han asegurado que esta actividad va a da?ar la imagen de Canarias como destino tur¨ªstico que apuesta por la sostenibilidad y el aumento de las energ¨ªas renovables. Repsol argumenta que hay pa¨ªses, como Brasil y Noruega, donde petr¨®leo y turismo coexisten en armon¨ªa.

Si llega la fase de explotaci¨®n, ya veremos los riesgos y c¨®mo solucionarlos

El proyecto consiste en la realizaci¨®n de dos sondeos; y un tercero contingente a los resultados de los dos primeros, localizados en la cuenca atl¨¢ntica de Canarias (Canal Canario) y, hasta el momento, inexplorada de esta forma. Su objeto es investigar la existencia de hidrocarburos en la cuenca. El objetivo principal consiste en los dep¨®sitos arenosos turbid¨ªticos del Terciario y Cret¨¢cico. La profundidad promedio de los dos primeros ser¨ªa de unos 3.000 metros con una l¨¢mina de agua del orden de 1.000 metros. La profundidad del tercer sondeo (contingente) ser¨ªa de 6.900 metros, con una l¨¢mina de agua tambi¨¦n de 1.000 metros. La unidad de perforaci¨®n es un barco de ¨²ltima generaci¨®n con capacidad de perforar sondeos de hasta 12.000 metros, en profundidades de l¨¢mina de agua de m¨¢s de 3.500 metros.

En cuanto a los riesgos generales, existen normas muy estrictas, las mismas que en Noruega, Reino Unido y Holanda, donde nunca ha pasado nada. ?Por qu¨¦ va a ocurrir algo aqu¨ª? El riesgo m¨¢s alto que tiene Canarias es que el oeste africano produce cinco millones de barriles de petr¨®leo al d¨ªa y no consume ni 500.000. El resto va a parar a Europa, pasando entre Lanzarote y Fuerteventura a trav¨¦s del Canal Canario. A ello hay que sumar el transporte naval de otros minerales y mercanc¨ªas peligrosas por esta zona. Ante esta realidad de muchos a?os, los canarios permanecen impasibles... y despreocupados.

Por lo que se refiere a riesgos de seguridad, rutinarios en este tipo de sondeos exploratorios, se han tomado todas las normas europeas al respecto. Asimismo, los coeficientes m¨ªnimos de seguridad, calculados para el an¨¢lisis del dise?o de tuber¨ªas de los pozos, han sido comparados con los est¨¢ndares NORSOK (sector noruego) y cumplen con los mismos. Tambi¨¦n los dise?os de abandono de cada pozo son conformes con los est¨¢ndares NORSOK D-010, para ajustarse plenamente a la filosof¨ªa de la doble barrera.

Sobre la monitorizaci¨®n y seguimiento de la sismicidad inducida por las perforaciones, se considera necesaria la instalaci¨®n de al menos un aceler¨®metro en Lanzarote y otro en Fuerteventura (ser¨ªan id¨®neas las instalaciones de las sedes insulares de la Subdelegaci¨®n del Gobierno), e igualmente necesaria la instalaci¨®n de OBS (sism¨®metros de fondo oce¨¢nico) antes de la ejecuci¨®n del proyecto, para garantizar la calidad de la se?al emitida.

Pues bien: despu¨¦s de estas consideraciones t¨¦cnicas y de seguridad, no cabe retrotraerse a posiciones decimon¨®nicas y catastrofistas, descartadas en la actualidad por la experiencia y el avance tecnol¨®gico. La reacci¨®n medioambiental carece hoy de justificaci¨®n objetiva real: de lo que se trata es de intentar investigar y explorar mejor, antes que proceder a una explotaci¨®n. Cuando llegue la fase de explotaci¨®n (si llega), ya hablaremos de los riesgos que comporta y de c¨®mo solucionarlos.

En cuanto al Gobierno de Canarias, exigente al m¨¢ximo con el Gobierno espa?ol para que se cumplan todas las medidas de seguridad, hay que sugerirle que cuando su presidente, Paulino Rivero, vaya a hacer visitas a Marruecos, se preocupe de hablar con el rey Mohamed para exigirle las mismas condiciones de seguridad a sus prospecciones.

Rafael D. Gonz¨¢lez P¨¦rez es doctor en Ciencias Geol¨®gicas. Ex t¨¦cnico superior de Protecci¨®n Civil, Delegaci¨®n del Gobierno en Canarias.