La llamada del Papa
Francisco demuestra autoridad y sensibilidad al intervenir en el caso de pederastia de Granada
Hay lacras contra las que ning¨²n esfuerzo es peque?o ni ninguna exigencia de responsabilidades es excesiva. El reciente caso conocido de abusos a menores por parte de un grupo de personas ¡ªentre ellos al menos tres sacerdotes¡ª en una parroquia de Granada muestra hasta qu¨¦ punto las palabras no sirven de nada si no van acompa?adas por hechos concretos. Y a la vez indica lo importante que es evitar todo resquicio de disculpa o encubrimiento.
Editoriales anteriores
Los abusos sufridos por un adolescente hubieran podido caer en la desgraciadamente larga lista de casos sin resolver de no ser por una intervenci¨®n inesperada, que va a resultar decisiva a la hora de aclarar el caso m¨¢s grave de pederastia en la Iglesia espa?ola conocido hasta el momento. Informado por la propia v¨ªctima ¡ªun cat¨®lico practicante¡ª, el Papa tom¨® personalmente las riendas del caso y le llam¨® para pedirle perd¨®n y ofrecerle consuelo espiritual. Y no solo eso: Francisco le asegur¨® su respaldo ante todo lo que pudiera venir en el proceso que se abr¨ªa y, lo m¨¢s importante, le anim¨® a que pusiera el caso en manos de la justicia espa?ola.
Ha sido la intervenci¨®n del Papa lo que ha llevado a la Iglesia local a tomar medidas, a colaborar con las investigaciones y, finalmente, a presentar un escrito propio de denuncia ante la fiscal¨ªa provincial. No es detalle menor que desde que el joven puso estos hechos en conocimiento del arzobispo de Granada hasta que present¨® la denuncia pas¨® mes y medio. Y despu¨¦s el arzobispado a¨²n tard¨® otros cuatro d¨ªas en presentar su propia denuncia.
Uno de los hechos que m¨¢s ha da?ado a la Iglesia cat¨®lica en las ¨²ltimas d¨¦cadas ha sido tanto el descubrimiento de los casos de abusos a menores como la actitud general de encubrimiento de dichos delitos. Benedicto XVI prohibi¨® expresamente cualquier ambig¨¹edad y su sucesor, Jorge Bergoglio, est¨¢ demostrando no pararse en medias tintas y descender al detalle para combatir a estos aut¨¦nticos depredadores que han actuado con casi total impunidad durante demasiado tiempo.
El Papa ha telefoneado una segunda vez a la v¨ªctima para invitarle a participar en reuniones de la comisi¨®n de expertos que el Vaticano ha constituido sobre los casos de pederastia en la Iglesia, y adem¨¢s le ha pedido perd¨®n de nuevo. Esta vez por c¨®mo hab¨ªa sido interrogado por las autoridades locales de la Iglesia. Queda esperar que el castigo caiga sobre quienes han cometido el delito: los culpables y sus encubridores.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.