Debates en torno a la maternidad

No tener hijos por decisi¨®n propia se ha convertido en una opci¨®n cada vez m¨¢s extendida en Occidente. Muchas mujeres prefieren centrarse en su vida personal y profesional que afrontar lo que acarrea ser madre. En Estados Unidos, uno de los pa¨ªses en los que m¨¢s ha crecido esta tendencia, una de cada cinco mujeres supera la edad f¨¦rtil sin haber tenido descendencia (en los a?os setenta eran una de cada diez), ya sea por motivos socioecon¨®micos, circunstanciales (no haber encontrado la pareja id¨®nea) o problemas de fertilidad. En Europa, donde la tendencia sigue el mismo camino, destaca Alemania, con uno de los mayores porcentajes de no madres del mundo. Los defensores de una vida sin hijos reivindican con orgullo su elecci¨®n. Pero la presi¨®n de la sociedad para que los tengan se mantiene.

Melanie Notkin lidia con ello a diario. Su libro The Otherhood, el t¨¦rmino que la autora norteamericana ha acu?ado para referirse a ¡°las otras mujeres¡±, es un grito que describe la realidad de miles de treinta?eras que, como ella, se enfrentan a la misma pregunta de amigos, familiares, compa?eros de trabajo y hasta extra?os: ?cu¨¢ndo van a ser madres? Notkin decidi¨® narrar la verdad de las mujeres sin hijos hace tres a?os, cuando empez¨® a colaborar con The Huffington Post. ¡°Muchas personas te dicen que puedes tenerlos sola¡±, explica desde Nueva York, ¡°que eres demasiado exigente¡­ pero la soluci¨®n no es tan f¨¢cil¡±. Las mujeres que deciden no ser madres son m¨¢s de las que parece, no se sienten representadas y, como Notkin, han decidido alzar la voz en libros, en documentales, en Internet.

Los defensores de una vida sin hijos reivindican con orgullo su elecci¨®n. Pero la presi¨®n de la sociedad para que los tengan se mantiene

En Estados Unidos este debate se ha hecho m¨¢s p¨²blico que en Europa. ¡°Si tuviera hijos, me odiar¨ªan¡±, ha declarado la presentadora estadounidense Oprah Winfrey, de 60 a?os. ¡°No tengo hijos, pero mi vida ha sido satisfactoria. Tambi¨¦n lo habr¨ªa sido con hijos¡±, ha dicho Condoleezza Rice, exsecretaria de Estado con George W. Bush, tambi¨¦n de 60 a?os. En el ensayo No quiero hijos. ?Estoy loca? ?Por qu¨¦ nadie me deja en paz?, la bloguera norteamericana Gala Darling defendi¨® que ¡°hay otras cosas que quiere hacer con su vida¡± y que la ¨²nica parte inc¨®moda es cuando aquellos que escuchan su respuesta act¨²an como si la conocieran mejor que ella misma. Darling apunta a las dos claves de este asunto: ¡°La sociedad espera que las mujeres tengan hijos (¡­). Pero tambi¨¦n es una cuesti¨®n de respeto; cuando dices que no quieres tenerlos, ese deber¨ªa ser el fin de la conversaci¨®n¡±.

La realidad es que rara vez acaba ah¨ª. Afecta a las mujeres que saben que nunca ser¨¢n madres y a las que esperan serlo un d¨ªa que a¨²n no ha llegado. Tabitha, autora del blog Geektastic, denunci¨®, como muchas otras blogueras, la intromisi¨®n que siente cuando le preguntan por qu¨¦ no tiene hijos. ¡°Cuando seas madre lo entender¨¢s¡± o ¡°Seguro que cambias de opini¨®n¡± son algunas de las respuestas habituales. ¡°Puede que no sea su intenci¨®n, pero cuando contestan que cambiar¨¦ de idea, me est¨¢n diciendo que mi elecci¨®n no es v¨¢lida, y ese no es el caso¡±. Otras veces los comentarios llegan sin invitaci¨®n. Beth Lapides se encontraba en el fisioterapeuta cuando, al hacer un gesto de dolor, le contest¨®: ¡°No aguantas nada, mejor que nunca tengas hijos¡±. En su ensayo, recopilado en el libro No es broma, escritoras que se saltan la maternidad, Lapides se pregunta incluso si tal afirmaci¨®n es legal.

Notkin explica que, a trav¨¦s de su propia experiencia y de los datos recabados para el libro, entendi¨® que cada vez m¨¢s mujeres mayores de 35 a?os no tienen hijos no solo por decisi¨®n propia, sino por circunstancias. ¡°Quieren hacer lo que sea correcto para ellas¡±, comenta. ¡°Son modernas, libres, independientes y tambi¨¦n quieren tener hijos, pero son una mayor¨ªa silenciosa¡±. Una investigaci¨®n dirigida por Catherine Hakim, una cient¨ªfica social brit¨¢nica, realizada en 25 pa¨ªses concluye que la decisi¨®n de no tener hijos de forma voluntaria suele ser mayor entre los hombres que entre las mujeres. Sumando los dos g¨¦neros, asegura que menos del 10% de las personas que descartan ser padres lo han hecho por decisi¨®n propia.

Entre las mujeres estadounidenses de 40 a 44 a?os, un 18% no han sido madres, frente al 10% de 1976 (1,9 millones de mujeres frente a 580.000), seg¨²n el Centro Pew de Investigaciones. Esta tendencia es similar en Espa?a (un 18,1% de las mujeres entre 40 y 44 no tienen hijos), Francia (20,6%), Finlandia (28,8%) y Alemania (tiene el r¨¦cord: 33,6%), seg¨²n los datos de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE). Es muy dif¨ªcil distinguir en las estad¨ªsticas qui¨¦nes no son madres por elecci¨®n. ¡°La ausencia de hijos parece estar relacionada con la formaci¨®n¡±, seg¨²n la OCDE. Por ejemplo, en Suiza, cerca del 21% de las mujeres de 40 a?os no tienen hijos, pero esta proporci¨®n se incrementa hasta el 40% en el caso de las que han cursado estudios superiores. En su libro Las mujeres sin sombra o la deuda imposible. La decisi¨®n de no ser madre, la psiquiatra francesa Genevi¨¨ve Serre ha identificado el perfil de quien se inclina por esta opci¨®n con el de una licenciada, ejecutiva y urbana.

Para las mujeres que temen arrepentirse, o que simplemente quieren aplazar su embarazo, la ciencia ha puesto a su disposici¨®n la congelaci¨®n de ¨®vulos. Las firmas de abogados fueron las primeras en ofrecer esta t¨¦cnica en su cartera de beneficios salariales, junto a los cheques restaurante y el seguro m¨¦dico. Cuando recientemente sali¨® a la luz que tambi¨¦n lo hab¨ªan hecho las compa?¨ªas Apple y Facebook, el tema gener¨® una gran pol¨¦mica. Los defensores de esta iniciativa consideran que cubre una necesidad cada vez m¨¢s extendida entre la plantilla femenina por decisi¨®n propia. Para sus cr¨ªticos, se trata de una forma indirecta de presionar a las empleadas para que no tengan hijos en lugar de facilitar medidas de conciliaci¨®n que faciliten compatibilizar carrera y maternidad.

¡°Todav¨ªa se asume que las personas van a ser m¨¢s felices si tienen hijos. Ahora mismo los ni?os son un lujo, una elecci¨®n¡±, afirma Laura Scott

¡°Necesitamos redefinir el concepto de familia y reconocer que las mujeres tienen valor m¨¢s all¨¢ de su capacidad para traer ni?os al mundo¡±, denuncia Laura Scott, que cre¨® en 2003 Childless by Choice, un proyecto para investigar por qu¨¦ aumentaba el n¨²mero de mujeres que como ella, decidieron no ser madres. Ella y Notkin coinciden en que la mayor¨ªa de las mujeres esperan ser madres entre los 25 y 35 a?os, pero por circunstancias se ven obligadas a aplazarlo y cuando llegan a los 45 a?os ya no quieren. ¡°Otras, por el contrario, lo habr¨¢n decidido deliberadamente desde mucho antes¡±, dice Scott.

¡°La educaci¨®n es un factor determinante, pero tambi¨¦n la econom¨ªa¡±, asegura, en referencia a la deuda que contraen muchas universitarias para sufragar sus estudios. Notkin coincide en que la situaci¨®n actual es el resultado de que las mujeres est¨¢n utilizando opciones variadas y no solo las que se esperaba de ellas. Asegura que en la conversaci¨®n actual que miles de mujeres mantienen a trav¨¦s de blogs, foros o libros, puede parecer ¡°m¨¢s feminista¡± decir que no tienes ni?os, como si fuera la decisi¨®n m¨¢s aut¨¦ntica, cuando en realidad se trata de un proceso m¨¢s complejo.

Tener o no tener hijos est¨¢ menos asociado con la identidad femenina ahora que hace 50 a?os, se entiende que no es el destino de las mujeres, sino una combinaci¨®n de factores, pero eso no significa que la sociedad en general y la estadounidense en particular, profundamente arraigada en valores tradicionales, hayan evolucionado al mismo ritmo que millones de mujeres. ¡°Todav¨ªa se asume que las personas van a ser m¨¢s felices si tienen hijos¡±, lamenta Scott. ¡°Debemos deshacernos de la noci¨®n de que los ni?os son inversiones econ¨®micas de futuro, ahora mismo son un lujo, una elecci¨®n¡±.