Mas pasaba por all¨ª
El ¡®president¡¯, heredero pol¨ªtico de Pujol, debe a los catalanes y a los espa?oles una explicaci¨®n
La juez barcelonesa encargada del caso Pujol-Ferrusolaha imputado al expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, a su esposa y a varios de sus hijos como presuntamente incursos en un doble delito de defraudaci¨®n a Hacienda y de blanqueo de capitales. De hecho, la defraudaci¨®n ya la confes¨® p¨²blicamente Jordi Pujol el pasado 25 de julio: est¨¢ por ver que, por su cuant¨ªa y por la correcci¨®n o incorrecci¨®n de su regularizaci¨®n, dicha conducta pueda configurarse como delito. M¨¢s grave ser¨ªa el de blanqueo de capitales si, como teme la jueza, ¡°no puede establecerse el origen¡± de los fondos situados en para¨ªsos fiscales, al no haberse documentado que procedieran de un supuesto legado del padre del pol¨ªtico.
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La imputaci¨®n no es una decisi¨®n judicial menor. El citado como imputado no pierde la universal protecci¨®n a la presunci¨®n de inocencia hasta que haya sentencia; pero certifica al tiempo la existencia de indicios que podr¨ªan configurar hechos delictivos. La reacci¨®n del portavoz del Gobierno de la Generalitat, Francesc Homs, minimizando otra vez el caso al recordar solo la primera de estas dos realidades, subraya la laxitud moral del pujolismo a la hora de aclarar los entuertos propios.
Un hilo conductor conecta ese comentario de enorme obviedad e ¨ªnfima calidad con la actuaci¨®n de su jefe y ahijado pol¨ªtico de Pujol, el presidente Artur Mas. Desde julio, Mas act¨²a en este asunto como si pasase casualmente por los desag¨¹es del nacionalismo, lo ignorase todo de su padrino, de su red familiar-clientelar y de los casos de corrupci¨®n que, como el vil saqueo del Palau de la M¨²sica, desembocaron en el embargo judicial de la sede del partido que ¨¦l mismo preside.
Y, sin embargo, Artur Mas, que en vergonzosa actitud cesarista reh¨²ye declarar ante la comisi¨®n parlamentaria de investigaci¨®n sobre el caso Pujol ¡ª?a la que hace convocar a Aznar y a Gonz¨¢lez!¡ª, debe a los catalanes, y a todos los espa?oles, alguna explicaci¨®n, en funci¨®n de su cargo.
Artur Mas debe informar a los contribuyentes que s¨ª pagan sus impuestos ¡ªsin solapar la din¨¢mica judicial¡ª, cu¨¢nto defraudaron, con o sin delito, Pujol y su familia, a las arcas de la Generalitat. Cu¨¢ntas acciones, avisos, llamadas o requerimientos hizo a los infractores la Agencia Tributaria catalana, por ¨¦l calificada de ¡°estructura de Estado¡±. Una calificaci¨®n pomposa y probablemente rid¨ªcula a tenor de su inacci¨®n (de haber actuado, deber¨ªa saberse), cuando tan ¨¢gil es su consejero Felip Puig en perseguir a compa?¨ªas no noticiables por fraude fiscal, como Desigual, por desobedecer ¡ªcomo por cierto suele hacer el Gobierno de Mas¡ª la ley, en este caso, la de horarios comerciales.
Mas debe entregar tambi¨¦n la lista de contratos p¨²blicos que beneficiaron a los Pujol-Ferrusola y allegados, o que intermediaron, como su exn¨²mero dos, Oriol. Mientras no lo haga no podr¨¢ desprenderse del estigma de heredero amical, albacea f¨¢ctico y beneficiario pol¨ªtico del pujolismo, como falazmente lo intenta destruyendo el partido que fund¨® su mentor.
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