Cainismo
Cuando hay unidad, antes o despu¨¦s de las elecciones, la izquierda gobierna o puede gobernar
Cuando hay unidad, antes o despu¨¦s de las elecciones, la izquierda gobierna o puede gobernar. Ser de centro, en Espa?a, significa para una mayor¨ªa social ser de centro izquierda. La derecha es poco el¨¢stica, en gran parte porque renunci¨® al imprescindible ritual de exorcizar el franquismo. Un dem¨®crata cristiano, al estilo Ruiz- G¨ªmenez, ser¨ªa hoy capell¨¢n en Podemos. La derecha espa?ola avanza cuando se modera, pero luego padece el complejo de Pol¨ªcrates: no disfruta el acierto, desconf¨ªa del avance propiciado por esa moderaci¨®n. Reacciona con hiperestesia ante cambios que ya forman parte del paisaje social. Nadie ha explicado la pol¨ªtica de ¡°histerismo masculino¡± que enciza?¨® el pa¨ªs por el aborto o desbarat¨® los espacios de investigaci¨®n y el ecosistema cultural. Rajoy y su tripulaci¨®n recuerdan a veces a aquel autob¨²s de turistas que, asustados, hicieron volver el veh¨ªculo porque confundieron la puesta de sol con un incendio. ?El gozo de la marcha atr¨¢s! Y ese placer de volver a ser ¡°martillo de herejes¡±, ahora griegos, que no aceptan a D¨¦ficit como Dios Ol¨ªmpico. Pero la izquierda tambi¨¦n comparte el complejo de Pol¨ªcrates. Se dice que es el esp¨ªritu critico el que causa la desuni¨®n, mientras la derecha hace pi?a, llegado el momento, pera defender sus intereses. Es una visi¨®n idealizada. No es la cr¨ªtica la que produce la fragmentaci¨®n. Vean lo ocurrido en la sede socialista madrile?a. A cambio de l¨ªder, cambio de cerradura. Es la lucha por la llave, por el poder, por la propiedad. Bertolt Brecht, con muchas abolladuras, algunas causadas por el adversario, escribi¨® en uno de sus poemas del exilio: ¡°Desgraciadamente, nosotros, que quer¨ªamos preparar el camino para la amabilidad, no pudimos ser amables. Pero vosotros, cuando lleguen los tiempos en que el hombre sea amigo del hombre, pensad en nosotros con indulgencia¡±. Am¨¦n.
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