La moda se sacude los colores

El uso del color en la moda se ha examinado en multitud de ocasiones en los ¨²ltimos a?os: desde el clasicismo de Coco Channel hasta el famoso discurso sobre el azul cer¨²leo de Meryl Streep en El diablo viste de Prada, cada tonalidad ha sido sometida a un intenso escrutinio. Sin embargo, la influencia de la moda en el color ha pasado m¨¢s desapercibida y a eso trata de poner remedio Pantone in fashion, que repasa un siglo de energ¨¦tica retroalimentaci¨®n.

¡°El negro, antes funerario, empez¨® a ser conocido como chic, cl¨¢sico, sexy y ¨Cahora- existencial, gracias a Gabrielle Coco Chanel, Hubert de Givenchy, Azzedine Ala?a y Yohji Yamamoto¡±, dicen Leatrise Eiseman y E.P. Cutler (autores del volumen) en la introducci¨®n del libro, que trae adem¨¢s a colaci¨®n el esfuerzo del mundo de la moda por crear nuevas denominaciones para nuevos colores.

Cutler y Eiseman se acuerdan de Colin McDowell (cuya obra, Fashion today, es un referente para el sector) a la hora de asegurar que a pesar de que parezca lo contrario el mundo de la moda cambia muy lentamente: ¡°Es posible decir que en el siglo XX la moda s¨®lo ha producido dos cambios permanentes. El primero es el cambio de la falda larga a la corta y el segundo la popularizaci¨®n del pantal¨®n como prenda femenina¡±. Este paso de dinosaurio, provoca que los cambios en el uso de los distintos colores sean mucho m¨¢s leves de lo que el p¨²blico percibe.

Pero lo m¨¢s interesante de Pantone in fashion (Pantone es una empresa estadounidense que cre¨® ¨Cen 1963- un sistema de control de color ¨Cemparejamiento crom¨¢tico- que serv¨ªa de gu¨ªa a las artes gr¨¢ficas) es el repaso a las tonalidades popularizadas por el mundo de la moda y la influencia de distintos eventos en el uso y abuso de estos colores: ¡°Es clara, por ejemplo lo que representaron para el sector las guerras del golfo e incluso las de Irak y Afganist¨¢n¡±, afirman Cutler y Eiseman, que tratan de probar que en la aldea global lo del color tambi¨¦n es un asunto de estado: la sustituci¨®n del caqui por los camuflajes oscuros y el paso de estos a una gama crom¨¢tica m¨¢s clara o la introducci¨®n de cierto calzado militar en el ¨¢mbito urbano, son tambi¨¦n materia de estudio.

Nicolas Ghesqui¨¨re, Hussein Chalayan, Veronique Branquinho, Olivier Theyskens, Arnold Scaasi, Erdem Moralioglu¡ãlu, Haider Ackermann, Damir Doma, las hermanas Callot Soeurs, C¨¦dric Charlier, Phillip Lim o Karen Walker aparecen citados en Pantone, as¨ª como dise?adores que han ligado su firma a un color concreto (Valentino y su rojo o el rosa de Elsa Schiaparelli) y que han sido claves para la popularizaci¨®n del mismo.

Pero adem¨¢s, el libro es una clara muestra de la influencia de la propia empresa, Pantone, en el devenir del sector. Sus ejecutivos est¨¢n considerados como uno de los agentes m¨¢s influyentes del sector, junto a nombres propios como la todopoderosa Anna Wintour (editora de Vogue) o Bernard Arnault, presidente del grupo Louis Vuitton Mo?t Hennessy. Su famosa gu¨ªa de colores es ahora algo imprescindible y les rinden pleites¨ªa creadores del tama?o de Marc Jacobs, Anna Sui o Raf Simons. Los autores insisten adem¨¢s en que al contrario de lo que sucede en otros sectores, donde todos insisten en ponerse de acuerdo para promocionar un determinado producto, en el sector de la moda ¡°no hay acuerdo que valga¡± y que es el mercado el que decide: ¡°En 1950, la redactora jefe de Harper¡¯s Bazaar recibi¨® una llamada de un anunciante para que promocionara el sunset pink ya que ten¨ªa un tren de ese color. ¡®Fue uno de los peores errores de mi vida¡¯ contaba a posteriori Snow, que perdi¨® a algunos de sus mejores periodistas en protesta por lo sucedido¡±, cuentan los autores.

Pantone in fashion, se sumerge adem¨¢s en algunos de los colores que ha popularizado la moda el superlemon, el shocking pink o el festival fucsia: casi 50 tonalidades que al ne¨®fito le resultar¨¢n francamente marcianas.