Un minuto de silencio
Esta carta pretende ser el minuto de silencio que Occidente no se ha tomado por los estudiantes acribillados en Kenia. El recordatorio de todos los minutos robados a tragedias que no llevan grabado el nombre de un hombre blanco. El reconocimiento de los m¨¢rtires que aqu¨ª o all¨¢ mueren luchando contra los dogmas.
Porque los verdaderos brotes verdes est¨¢n naciendo lejos de nuestras fronteras y el fanatismo religioso y la indiferencia occidental se los est¨¢n llevando por delante. Hoy m¨¢s que nunca todos deber¨ªamos ser Kenia. Porque si hay algo a lo que debamos temer no es al acto terrorista que tiene lugar en una sociedad democratizada, sino al que sucede en una que lucha por democratizarse, porque es ah¨ª donde el miedo juega su mejor baza.
Soy Charlie Hebdo porque defiendo la libertad de expresi¨®n; y soy estudiante de Garissa porque la defiendo est¨¦ donde est¨¦.¡ª Elena San Jos¨¦ Alonso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.