Margarita de Dinamarca no abdicar¨¢

Margarita de Dinamarca, que el? jueves cumple 75 a?os y 43 en el trono, reiter¨® en una entrevista concedida este lunes que no tiene pensado abdicar, algo infrecuente en los pa¨ªses n¨®rdicos, y que su edad no supone "ning¨²n problema", aunque lament¨® que ya no pueda bailar ballet o participar en carreras sobre esqu¨ªs.

"Creo que lo m¨¢s importante para m¨ª siempre ha sido que lo que he hecho pudiera beneficiar a mi pa¨ªs y mis ciudadanos. Y espero que se acuerden de que siempre me esforc¨¦", dijo sobre c¨®mo quiere ser recordada en un futuro la reina, quien no cont¨® a su lado con el pr¨ªncipe consorte Enrique, con gripe.

Una pregunta sobre el deseo de recibir el trato de rey que su marido Enrique ha expresado de forma reiterada durante a?os en p¨²blico, fue una de las pocas cosas que hicieron fruncir el ce?o a una risue?a y bromista Margarita. Enrique es un pr¨ªncipe peculiar y descarado. Famoso es aquel posado familiar en el que ante cientos de c¨¢maras hizo un gesto de burla a los periodistas sacando la lengua y tir¨¢ndose de las orejas. Le vali¨® una bronca en p¨²blico de la reina. Enrique proclama que es ¡°muy feliz¡± junto a su esposa, al mismo tiempo que confiesa no soportar las intrigas palaciegas. Esas que intentan anular su papel de marido-consejero-c¨®mplice de la soberana. Se niega a ser un pr¨ªncipe florero. Condici¨®n que siente a¨²n m¨¢s desde que ha sido relegado por la irrupci¨®n de su hijo Federico como heredero en pr¨¢cticas con una agenda para su promoci¨®n y lucimiento.

A Margarita tampoco le gust¨® que un joven periodista no se dirigiese a ella de usted, un trato reservado pr¨¢cticamente en Dinamarca a la realeza. "No creo que hayamos ido a la escuela juntos, as¨ª que no creo que debamos tutearnos", le dijo.

La reina celebrar¨¢ este mi¨¦rcoles una cena de gala para festejar su 75 cumplea?os a la que asistir¨¢n representantes de otras casas reales europeas, como los reyes de Espa?a.

Margarita tambi¨¦n habl¨® de otras cuestiones, Inst¨® este lunes a los inmigrantes a esforzarse para adaptarse a la sociedad danesa durante una rueda de prensa convocada con motivo de los actos de su 75 cumplea?os, que reunir¨¢n a la realeza europea esta semana. "No tienen que cambiar de religi¨®n o comer otras cosas, no se trata de las alb¨®ndigas (aludiendo a una pol¨¦mica anterior en Dinamarca), sino de adaptarse al pa¨ªs al que han venido", dijo en el palacio de Fredensborg, al norte de Copenhague.

La monarca, que como el resto de la familia real no suele abordar temas pol¨ªticos, caus¨® pol¨¦mica en una entrevista publicada el domingo por el diario Berlingske, en la que defend¨ªa que la sociedad danesa tiene derecho a plantear exigencias a los inmigrantes. La mayor¨ªa de los inmigrantes "son conscientes de a qu¨¦ tipo de cosas tienen que renunciar cuando llegan a un pa¨ªs extranjero", dijo sin m¨¢s detalles Margarita II, quien se?al¨® que la situaci¨®n ha cambiado mucho desde que en 1984 critic¨® a sus compatriotas en un c¨¦lebre discurso de A?o Nuevo por recelar de los extranjeros.

"Hay muchos j¨®venes inmigrantes que se las apa?an muy bien, pero mientras llame la atenci¨®n que haya muchos otros que no, hay un problema", dijo Margarita, a?adiendo que la integraci¨®n ha sido "m¨¢s complicada" de lo que se hab¨ªa pensado.

A pesar del peso relativo de la poblaci¨®n extranjera -ronda el ocho por ciento-, la inmigraci¨®n ha sido el tema central de los comicios en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas en Dinamarca, que tiene una de las pol¨ªticas m¨¢s f¨¦rreas de Europa en ese ¨¢rea.

Margarita de Dinamarca, junto con Isabel II, es la otra mujer que lleva corona en las casas reales europeas y no parece decidida a desprenderse de ella pese a que su hijo Federico se ha consolidado como un heredero muy s¨®lido y popular. Casado con una de las princesas m¨¢s glamurosas de Europa, la abogada Mary Donaldson, tienen cuatro hijos.