Sobre informaci¨®n local, isobaras y el Ibex 35

El nuevo dise?o de EL PA?S ha provocado una reacci¨®n sin precedentes en los lectores y suscriptores de la edici¨®n impresa. No tanto por los cambios formales, como por los cambios de contenido que introduce. A la queja por la reducci¨®n del espacio para cartas de los lectores, y a la protesta masiva por la pr¨¢ctica ausencia de la programaci¨®n de televisi¨®n, que el director atendi¨® de inmediato, -el mi¨¦rcoles se recuper¨® buena parte de la misma, y muchos lectores me han escrito para agradecer esta decisi¨®n- le han seguido, en d¨ªas posteriores, otras cr¨ªticas que quiero recoger aqu¨ª.

El d¨ªa 17 de mayo dediqu¨¦ mi art¨ªculo de la edici¨®n impresa a recoger las protestas arriba mencionadas. Esta semana he seguido recibiendo mensajes sobre el nuevo formato, centrados en otros aspectos del mismo. La queja m¨¢s frecuente ha sido la relacionada con la desaparici¨®n de las p¨¢ginas de informaci¨®n local. Muchos lectores de Andaluc¨ªa, Pa¨ªs Vasco, Comunidad Valenciana y Galicia se han dirigido a m¨ª para preguntar qu¨¦ ha ocurrido con estas p¨¢ginas ya que ahora s¨®lo pueden acceder a la edici¨®n nacional. Se queja de ello, Luciano Rona, que ech¨® en falta de inmediato la informaci¨®n de su comunidad: Galicia. Informaci¨®n que es del mismo inter¨¦s que el resto, me escribe. Como considero que la opini¨®n de los lectores puede y debe ser de inter¨¦s para la direcci¨®n del peri¨®dico, aporto este granito de arena, esperando puedan si as¨ª lo creen conveniente, reconducir en algunos puntos las modificaciones realizadas.

  Abunda en lo mismo Mar¨ªa Luz Uranga: Soy suscriptora vasca desde hace varios a?os y he recibido el nuevo dise?o de EL PA?S con una gran sorpresa: han sido eliminadas las p¨¢ginas de informaci¨®n del Pa¨ªs Vasco. Hace unos a?os este peri¨®dico ofrec¨ªa un suplemento central para esta comunidad; fue suprimido. Y ahora nos dejan sin informaci¨®n local. Creo que es un gran error que, incluso podr¨ªa inducir al descenso de ventas o, incluso, perder suscriptores, como podr¨ªa ser mi caso, pues me lo estoy planteando. Desde esa misma comunidad aut¨®noma, Beatriz Gomedio se?ala: No entiendo la desaparici¨®n de esta informaci¨®n pues cada comunidad tiene noticias propias que creo es imprescindible incluir.

Alberto Men¨¦ndez, en el otro extremo de la geograf¨ªa espa?ola, se lamenta de lo mismo: Este lunes 11 de mayo qued¨¦ sorprendido por el cambio profundo realizado en el dise?o del peri¨®dico y, aunque en parte empiezo a readaptarme, echo de menos bastantes cosas. La principal: han desaparecido las varias hojas que se ven¨ªan dedicando a noticias y pol¨ªtica de Andaluc¨ªa. Como no estoy dispuesto a comprar dos peri¨®dicos al d¨ªa, con gran pena empiezo a considerar la idea de dejar de comprar EL PA?S. ?Tendr¨¢ esto soluci¨®n?

Otro lector que firma su mensaje pero me pide anonimato, se queja tambi¨¦n de la reducci¨®n gradual de las p¨¢ginas dedicadas a Andaluc¨ªa, hasta su actual desaparici¨®n. Sin embargo, escribe, ustedes mantuvieron y mantienen una magnifica gu¨ªa del ocio para Madrid, no s¨¦ si tambi¨¦n para otras capitales, y negaron y lo siguen haciendo una m¨ªnima informaci¨®n cultural para los que somos de provincias, s¨ª, as¨ª se dec¨ªa antes: de provincias. Como si hubiera lectores de primera y de tercera. Pens¨¦ entonces en dejar de comprar su peri¨®dico del que hoy soy suscriptor y siempre lector desde hace treinta y nueve a?os, cuando estando en Madrid estuve toda una ma?ana esperando un peri¨®dico que no terminaba de salir y del que apenas en tanto tiempo habr¨¦ dejado de adquirir m¨¢s de cien d¨ªas en total. Si no lo he hecho ha sido, como comprender¨¢, por sentimentalismo.

   Carlos Miranda, se expresa as¨ª en su correo: Como lector habitual desde hace muchos a?os, y como suscriptor desde hace menos, no puedo por menos que lamentar la desaparici¨®n de la p¨¢gina o p¨¢ginas que recog¨ªan la informaci¨®n de mi comunidad (Galicia). A trav¨¦s de EL PA?S pod¨ªamos enterarnos de las corruptelas que en esta autonom¨ªa -como en tantas otras- practicaban y siguen haci¨¦ndolo los pol¨ªticos y sus partidos. Es com¨²nmente conocido el clientelismo que funciona por estas tierras (antes, y en denominaci¨®n que no ha perdido vigencia, caciquismo) y que hallaba en las denuncias de EL PA?S el correspondiente eco, mucho m¨¢s que en otras cabeceras, habitualmente subvencionadas con generosidad por los gobiernos de turno, y que solo reflejaban estos casos una vez que EL PA?S los sacaba a luz p¨²blica. Ahora, la carencia de esta edici¨®n nos deja hu¨¦rfanos de esta informaci¨®n y, hay que decirlo, el peri¨®dico pierde capacidad de compromiso con el lector.

Y Salvador Contell: Mi queja como lector, ya que sigo comprando y leyendo EL PA?S, es que llevo comprobando que los peri¨®dicos que se venden en Valencia son la edici¨®n nacional y no la de la Comunidad Valenciana como hasta ahora. Pude entender que hace un a?o con motivo de la crisis pasaran de tener un cuadernillo sobre la Comunitat Valenciana a, simplemente, dos p¨¢ginas, pero que no tener absolutamente nada y no saber lo que pasa en mi ciudad y en mi comunidad aut¨®noma no es de recibo.

   EL PA?S seguir¨¢ informando de los hechos relevantes que ocurran en estas comunidades, pero comprendo que para muchos lectores acostumbrados a un par de p¨¢ginas de noticias locales la p¨¦rdida es sensible.

    He recibido tambi¨¦n mensajes de lectores descontentos con los cambios en la secci¨®n de Econom¨ªa: ?Por qu¨¦ en la p¨¢gina de econom¨ªa, antes se informaba del Ibex 35, as¨ª como del resto de valores, divisas, tipos oficiales etc. y la informaci¨®n actual es mucho m¨¢s reducida? Si para conocer la cotizaci¨®n de Aena o Elecnor por ejemplo, tengo que acudir a otras fuentes de informaci¨®n, no necesito EL PAIS, escribe Vicente ?lvarez.

Y Carlos Hoyos abunda en los mismo: La informaci¨®n burs¨¢til ha continuado su empeque?ecimiento, en este caso de manera notable ya que adem¨¢s de ser muy pobre la informaci¨®n, solo el Ibex, el tama?o de la letra del ¨ªndice parece que se ha hecho a mala idea.

Respecto a los nuevos mapas del tiempo, una lectora, Pilar Sanz Bah¨®n, se?ala: Los mapas del pron¨®stico meteorol¨®gico carecen de las isobaras y su presi¨®n atmosf¨¦rica correspondiente. Esto ¨²ltimo me parece lo m¨¢s importante ya que nos permite hacernos una idea (ligera) de lo que puede ocurrir en los pr¨®ximos d¨ªas. No es la ¨²nica que echa en falta las isobaras. ?lvaro S¨¢enz de Valicourt, escribe: La informaci¨®n meteorol¨®gica ha quedado banalizada al m¨¢ximo con la supresi¨®n de la foto del sat¨¦lite y el mapa de isobaras. Ahora todo se f¨ªa a esos simplones iconos de solecitos, nubecillas y huevos fritos que no explican de por s¨ª los motivos de lo que se prev¨¦ que suceder¨¢.

    Varios lectores opinan que la secci¨®n de Deportes prima demasiado el f¨²tbol. Y s¨®lo determinados equipos. M¨¢s de una p¨¢gina sobre si va a seguir un entrenador o se va de un club, olvid¨¢ndose por completo, o apenas informando, de tenis, o Giro de Italia, por poner alg¨²n ejemplo, escribe Carlos Mart¨ªn. Y a?ade: Anteriormente, los lunes, en una sola p¨¢gina, ven¨ªa absolutamente toda la informaci¨®n de la 1? divisi¨®n, en la que pod¨ªas ver todos los resultados habidos hasta el momento, cu¨¢ndo y con qui¨¦n quedaba por jugar cada equipo, goleadores, tarjetas, faltas, etc. Es decir, una informaci¨®n complet¨ªsima en una sola hoja que llevada en el bolsillo, dilucidaba muchas discusiones en muchas tertulias. Han eliminado los grupos de 2?. B, y para colmo ayer d¨ªa 19, se jugaron partidos de 2? y no publican hoy sus resultados.

.Otro lector, Teodoro Gonzalo apunta: No me gusta la nueva informaci¨®n deportiva, donde han quitado los cuadros estad¨ªsticos de los lunes de la liga de f¨²tbol, as¨ª como la reducci¨®n a m¨ªnimos en otros deportes como automovilismo, motorismo etc¨¦tera.

Tengo que precisar que tambi¨¦n me han llegado algunas cartas de lectores que aplauden el nuevo dise?o. A¨²n as¨ª, son elogios te?idos de cr¨ªticas, como los que hace Le¨®n Caballero, suscriptor y lector de este peri¨®dico desde el primer n¨²mero. El nuevo formato, me parece mejor que el anterior", escribe, pero no deja de lamentar que el cambio haya tenido costes, como ver reducida la secci¨®n de Cartas al Director, que le interesa enormemente.