Manzanares: "La gente dice que odiamos a los animales. Para nada"

Jos¨¦ Mari Manzanares se est¨¢ desprendiendo del fino jersey que le cubre la parte de arriba del cuerpo. Estamos en el vestidor de un estudio fotogr¨¢fico madrile?o. Solo tres personas: ¨¦l, su representante y este cronista. ¡°Mira, mira, esto me lo hice hace un mes¡±, se?ala en su piel desnuda. No es la cicatriz desgarrada de una cornada traicionera en un tarde donde vienen mal dadas. Es un tatuaje. Una rosa, grande, roja, imponente, en la parte izquierda de su espalda. Es su ¨²nico tatuaje. ¡°Simbolizo la rosa con la vida: bonita pero dura, ya que tambi¨¦n tiene espinas¡±, explica. Ese tatuaje, aunque oculto a la vista p¨²blica, es una pista m¨¢s de la personalidad contempor¨¢nea de un torero a la contra en un mundo que se caracteriza por las puertas con los pestillos echados.

Jos¨¦ Mari Manzanares (Alicante, 33 a?os, casado y con dos hijos, un ni?o de tres y una ni?a de dos) se presta a sesiones de moda, anuncia relojes elegantes (es embajador de IWC Schaffhausen), protagoniza campa?as de publicidad (como la de Dolce & Gabbana de esta temporada), ha visto c¨®mo Kate Moss se desnudaba a su lado¡­ Al mismo tiempo, cita al morlaco con el rostro tenso y las mand¨ªbulas apretadas dibuj¨¢ndose en su bello rostro. Y sale por la puerta grande de La Maestranza despu¨¦s de una faena memorable. O se juega la ingle en cada natural ejecutado con una mano izquierda que ha sufrido 13 operaciones quir¨²rgicas. Un tipo moderno en un mundo muchas veces apolillado. Un hombre con el fuerte atractivo de la vulnerabilidad.

F¨ªjese lo que dice un cr¨ªtico de toros: ¡°El negocio taurino es una cueva trasnochada y tenebrosa en la que todo est¨¢ oculto, rec¨®ndito y secreto¡±.Hay muchas cosas que son as¨ª, ocultas. Hay intereses y contaminaci¨®n. Y eso no es sano. Yo no oculto nada. Tiene un poco de raz¨®n ese comentario. Pero yo soy todo lo contrario. Me intento mantener al margen. De hecho, cuando no toreo no leo nada.

Yo no soy gay, y aun as¨ª he tenido much¨ªsimos detractores. Y atacan, y atacan¡­ Porque hago sesiones de moda, tengo Twitter y soy abierto"

Igual soy un caso extra?o, pero en mi entorno, tanto en el trabajo como en la vida personal, no conozco a ning¨²n aficionado a los toros.Bueno¡­ De unos a?os para ac¨¢ est¨¢ empezando a crecer la afici¨®n. El mundo de los toros ha tenido un problema: no se ha sabido o no se ha querido contar. Los propios toreros somos muy nuestros. Muchas veces no nos gusta hablar de nuestra vida. Y, claro, a las nuevas generaciones les cuesta aficionarse a algo si no tienen informaci¨®n. Hace unos a?os ya detect¨¦ ese problema. Por eso desde el principio de mi carrera he intentado acercar el mundo del toro al p¨²blico. O por lo menos que conocieran c¨®mo es mi vida, la de un torero, sin necesidad de meterse en cuestiones privadas. Y lo he notado en las plazas. Antes la media de edad era muy alta, pero ahora veo mucha gente joven. Y eso me alegra.

?Usted cree que el mundo del toro va acompasado con la sociedad?No. Es conservador. Pero yo esa mentalidad no la tengo. Y f¨ªjese que mi padre ha sido un torero que ha marcado ¨¦poca. Lo que me ha transmitido es brutal: respeto al mundo del toro, hacia los compa?eros, hacia la profesi¨®n. Y me ha inculcado unos valores muy importantes: sacrificio, esfuerzo, perseverancia. He asimilado todo eso y siento lo mismo que mi padre, pero vivo en otra ¨¦poca, soy de otra generaci¨®n. ?l empez¨® a ser torero a los nueve a?os. Yo empec¨¦ con 19, viv¨ª la adolescencia, fui a la universidad [empez¨® Veterinaria, pero lo dej¨®]... Viv¨ª como un adolescente m¨¢s. Eso te ayuda a abrir la mente. No ofendo a nadie con las cosas que hago y siempre intento la m¨¢xima difusi¨®n del mundo del toro.

Una hip¨®tesis. Yo soy gay y torero. Lo digo p¨²blicamente y me dejo fotografiar con mi novio. ?Voy a sobrevivir laboralmente?Uf. No lo s¨¦. Eso depende de la fuerza de cada uno. Si t¨² eres capaz de soportar lo que venga, sobrevivir¨¢s. Seguro que habr¨¢ gente a la que no le guste. Yo no soy gay, y aun as¨ª he tenido much¨ªsimos detractores. Y atacan, y atacan¡­ Porque hago sesiones de moda, tengo Twitter y soy abierto. Ah¨ª entra la capacidad que tenga cada persona de saber aguantar.

?Son raros los toreros?El mundo del toro, en general, es una filosof¨ªa de vida en la que nos cuesta exteriorizar lo que sentimos. Tenemos unas sensaciones y unos sentimientos fuertes. Muchas veces no es f¨¢cil exteriorizarlos. Pero yo hago un esfuerzo. Hay gente que me critica por eso, pero¡­

Supongo que eso es dif¨ªcil de gestionar.Yo soy t¨ªmido cuando estoy con gente. Pero llego a la plaza y no lo pienso. Si me pongo a pensar que hay miles de personas juzg¨¢ndome¡­ Eso me pasaba al principio. Pensaba: ¡°Ya me est¨¢n comparando con mi padre¡±. Me atenazaba y solo daba un 50%. Pero aprend¨ª.

El mundo del toro, en general, es una filosof¨ªa de vida en la que nos cuesta exteriorizar lo que sentimos. Tenemos unas sensaciones y sentimientos fuertes. No es f¨¢cil exteriorizarlos. Pero yo hago un esfuerzo. Hay gente que me critica por eso"

?Recurri¨® a psic¨®logos?Mire, yo tengo una an¨¦cdota: conoc¨ª a un psiquiatra que hoy es padrino de mi ni?a. La verdad es que doy gracias a Dios por haberlo encontrado. Fue hace unos cinco a?os. Los toreros tenemos much¨ªsimos altibajos y cambios de estado an¨ªmico. Fue un invierno duro¡­ por mis pensamientos. Empec¨¦ a crearme cosas que no eran reales. Entras en ese c¨ªrculo vicioso, y va a peor. Y es un desastre. El psiquiatra me ha ayudado a entender lo que realmente importa, a gestionar bien mis emociones. A veces las emociones son bonitas, pero juegan malas pasadas.

?Sigue acudiendo a ¨¦l?S¨ª. Ayer mismo estaba en mi casa. Somos amigos. Jam¨¢s me ha cobrado. Desde el primer d¨ªa nunca me habl¨® de dinero. Fue una conexi¨®n.

?Cu¨¢l era su problema? ?Por qu¨¦ se bloqueaba?Lo de la comparaci¨®n con mi padre fue m¨¢s al principio. Indalecio, que as¨ª se llama el psiquiatra, entra despu¨¦s. Ten¨ªa un problema para gestionar mis emociones. Cre¨ªa cosas que no exist¨ªan. Ante una tarde importante, me preguntaba: ¡°?C¨®mo estar¨¢ la gente?, ?soplar¨¢ el viento?¡±. Luego empezaban las dudas emocionales: no me encuentro bien¡­ Es una vida complicada.

Si usted ha discutido con su mujer, ?lo nota toreando?S¨ª, claro. La vida personal del torero influye mucho. Estamos plenos cuando nuestra vida personal es feliz.

Eso es una gran responsabilidad para su pareja. Ella es la que tiene m¨¦rito.Totalmente. Yo me pongo delante del toro, pero la que me salva es ella. La responsabilidad de la mujer de un torero es brutal, y la gente no lo sabe. Ellas son las que nos mantienen. Deben quererte much¨ªsimo y ser lo suficientemente inteligentes como para saber entenderte y llevarte. Cuando est¨¢s arriba tienen que saber ser fr¨ªas. Y cuando est¨¢s abajo te dan cari?o, amor, fuerza, comprensi¨®n. Mi mujer me mantiene en un punto medio y me da tranquilidad. La verdad es que he tenido la suerte de encontrar a Roc¨ªo [Escalona, su esposa desde 2010].

Es que no puede [verle torear su mujer]. Su reacci¨®n es de terror. Sufre por m¨ª. Y yo le entiendo, porque a m¨ª me pasaba igual con mi padre"

?C¨®mo le compensa usted a ella?Bueno, intento compensarle con mi amor. Con muy pocas cosas m¨¢s. No le puedo compensar con tiempo, porque estoy mucho fuera; tampoco llev¨¢ndola de viaje, porque estoy siempre de plaza en plaza, y cuando descanso me apetece estar tranquilo en casa. Y ella dice que estando a mi lado ya tiene suficiente.

Con esta vida itinerante, el fracaso en la pareja es una posibilidad muy real.La pareja que tiene fuerza aguanta. Llevamos juntos desde los 16 a?os. Hombre, toda pareja tiene sus ¨¦pocas buenas y malas, pero nunca ha peligrado la relaci¨®n.

Creo que su mujer nunca le ha visto torear.Es que no puede. Sufre mucho.

Entonces, ella no ha vivido ninguno de sus triunfos.Ha ido a verme a alg¨²n festival y su reacci¨®n es de terror. Sufre por m¨ª. Y yo le entiendo, porque a m¨ª me pasaba igual con mi padre. Sientes miedo por una persona a la que amas. Es un peligro que t¨² no puedes manejar. Esa incertidumbre es horrorosa.

Oiga, ?y c¨®mo convencer¨ªa a un antitaurino?Tienen que ir a una corrida y que alguien le explique todas las dudas que surjan. Es necesario que sea sensible y que tenga la mentalidad abierta para recibir las emociones. La gente dice que odiamos a los animales. Para nada. Yo amo al toro. Mi casa esta llena de perros, hasta tengo un guacamayo. Mi perra M¨ªa duerme muchas veces conmigo, y mi mujer se enfada por ello.

El diestro ha vivido estos ¨²ltimos meses oculto entre las grietas. Penando. Se ha quedado sin l¨¢grimas. El pasado 28 de octubre falleci¨® su padre, el gran Jos¨¦ Mari Manzanares, diestro de ¨¦poca, fuerte personalidad. Un derrame cerebral se lo llev¨® a los 61 a?os mientras estaba en su finca. Hace a?os que viv¨ªa solo, despu¨¦s de divorciarse de su mujer, la madre de Jos¨¦ Mari, con la que estuvo casado 17 a?os. Cuando habla de su progenitor le embiste una oleada de tristeza.

?Qui¨¦n tiene las cosas de su padre: sus trajes de luces, sus capotes...?Est¨¢n en su finca de Extremadura [cerca de Trujillo] y son de los cuatro hermanos [tiene dos hermanas, y un var¨®n, que es rejoneador]. Est¨¢ todo tal cual lo dejo ¨¦l. La finca para mi padre era el sue?o de su vida. Era feliz all¨ª. Trabaj¨® toda su vida para vivir as¨ª, tranquilo en su campo, con sus animales, disfrutando de la vida¡­

Hay una imagen muy emotiva de su padre y usted. El d¨ªa de su alternativa (en 2003), cuando le abraza y hablan durante largo rato. ?Qu¨¦ se est¨¢n diciendo ah¨ª?Recuerdo todo lo que me dijo [se emociona, y le cuesta hablar]. Me dijo lo que significa ser torero, que es la profesi¨®n m¨¢s dura del mundo, pero la m¨¢s bonita. Que para ¨¦l hab¨ªa sido algo m¨¢gico entregarle toda la vida al toro. Y que esperaba que yo tuviera el valor, la perseverancia y el sacrificio de poder sentir lo que ¨¦l hab¨ªa sentido durante toda su vida. Luego ya me dijo cosas m¨¢s personales, entre padre e hijo. Ah¨ª ya entra el amor y las emociones que ¨¦l y yo nos ten¨ªamos. Fue una persona superespecial, con un car¨¢cter fuerte y atractivo. Yo tard¨¦ tanto en decidirme a ser torero por miedo a¡­ No pod¨ªa decirle a mi padre que quer¨ªa ser torero y luego arrepentirme a los dos a?os. No pod¨ªa. Lo llevaba pensando desde los 15, pero la primera vez que tore¨¦ en p¨²blico fue con 19. Es tanto el respeto que ¨¦l me infundi¨® que tard¨¦ cuatro a?os en decidirme [se vuelve a emocionar; le cuesta hablar].

Perdone que hable de su padre, pero es inevitable.Es que estoy muy sensible. Todos los recuerdos que tengo de ¨¦l son bonitos. Hemos chocado algunas veces. Es lo t¨ªpico: cuando el hijo se rebela y no quiere hacer caso a un padre que ten¨ªa toda la raz¨®n. Porque lo sab¨ªa todo y quer¨ªa ayudarme, pero el hijo quiere hacerlo a su manera. Pero lo que m¨¢s hab¨ªa entre mi padre y yo era amor.

?Le afect¨® mucho el divorcio de sus padres?S¨ª. Me pill¨® con 14 a?os. Fue duro. M¨¢s cuando tus padres son personajes p¨²blicos. Pero la verdad es que tanto ¨¦l como ella siempre han antepuesto el amor a sus hijos. Esa ¨¦poca fue triste, pero pas¨®.

Otra de las pasiones que ha heredado de su padre es el gusto por los relojes.S¨ª. Una de las marcas que utilizaba mi padre era IWC Schaffhausen. Le encantaban. ?staba orgulloso de que yo fuera la imagen de la marca. Creo que lo hacen todo con una calidad extraordinaria. He ido cuatro ocasiones a Ginebra a ver las colecciones, y son fant¨¢sticas. En concreto, una que hicieron de Top Gun. Todo lo que elaboran es cuidado, perfeccionista, con calidad y precisi¨®n en las piezas. Con una elegancia que me encanta. Es la que m¨¢s se parece a mi personalidad. Siento que llevo en la mu?eca una aut¨¦ntica obra de arte.

Fue un invierno duro¡­ por mis pensamientos. Empec¨¦ a crearme cosas que no eran reales. Entras en ese c¨ªrculo vicioso, y va a peor. Y es un desastre"

Usted es aficionado a Twitter. ?Qu¨¦ tuit pondr¨ªa mientras est¨¢ toreando?Uf. Lo he pensando muchas veces, pero me resulta dif¨ªcil explicar la sensaci¨®n que tengo. Creo que lo que m¨¢s puede transmitir es una foto, un gesto de tu cara. Eso refleja los nervios, el miedo¡­

El torero fuma mientras habla. Afirma que lo dejar¨¢ cuando perciba que le afecta f¨ªsicamente. Desde que le fotografiara el prestigioso Peter Lindbergh en 2007 ha realizado varias sesiones de moda. Una de las m¨¢s comentadas fue junto a la modelo Kate Moss, para Mario Testino. ?l, vestido de torero, con una camisa abierta, y ella, desnuda, tumbada en un sof¨¢. La idea del para¨ªso para muchos hombres y mujeres.

?C¨®mo se concentra uno teniendo desnuda al lado a una de las mujeres m¨¢s bellas del mundo?No se me pasaron por la cabeza pensamientos que no tuvieran que ver con la sesi¨®n de fotos. Para nada. Yo siempre que estoy vestido de luces me cambia la mentalidad.

Entonces, si no llega usted a estar vestido de luces...Claro. Kate Moss es guapa¡­ Y tiene una forma de ser que tambi¨¦n me gusta. Es cari?osa y muy agradable. Me hizo la sesi¨®n muy f¨¢cil.

?Se depila usted el cuerpo?Es que no tengo apenas pelos. Mi padre era igual. Los de las piernas s¨ª que me los quito. Pero por comodidad, por los leotardos que me tengo que poner para torear.

?Se echa colonia para torear?No. Eso lo aprend¨ª de mi padre. El toro lo huele, y es peligroso. El otro d¨ªa que toreamos en Valencia, llegu¨¦ a la furgoneta y ol¨ª a perfume. Pregunt¨¦: ¡°?Qui¨¦n se ha echado colonia?¡±. Un banderillero dijo que ¨¦l. Y le record¨¦ eso, que no, porque el toro pasa muy cerca, lo huele, y es peligroso. Yo me pongo desodorante, uno neutro que apenas huele.

Hablando de la est¨¦tica, una pregunta que se hace mucha gente y pocos se atreven a comentar: ?c¨®mo gestionan los toreros una posible erecci¨®n cuando est¨¢n embutidos en los trajes de luces?[Risas] En el momento que uno est¨¢ centrado en el toro piensa en todo menos en eso: el miedo no te deja.