Una boda real poco usual

Carlos Felipe de Suecia y Sofia Hellqvist ya son marido y mujer. La pareja contrajo matrimonio el s¨¢bado en una ceremonia celebrada en la capilla del Palacio Real de Estocolmo ante representantes de las monarqu¨ªas europeas entre ellos las reinas Margarita de Dinamarca, M¨¢xima de Holanda, Matilde de B¨¦lgica y Sonia de Noruega. Espa?a declin¨® la invitaci¨®n. Fue una boda real, la tercera en cinco a?os que se celebra en el pa¨ªs, pero poco usual por los antecedentes de la novia que ha pasado de ser una stripper, modelo y participantes del reality show Paradise Hotel a princesa. Para ello han tenido que transcurrir cinco a?os. Ese fue el tiempo que impuso Carlos Gustavo de Suecia a su hijo para aceptar la relaci¨®n.

?Carlos Felipe, de 36 a?os, naci¨® para ser el heredero de la Corona pero una reforma de la ley de sucesi¨®n, que iguala los derechos entre hombres y mujeres, le desplaz¨® en favor de su hermana Victoria. Los tres hijos de los Reyes de Suecia son el fiel reflejo de que las monarqu¨ªas se tienen que adaptar a los nuevos tiempos. Si Carlos Felipe se ha casado con una modelo, Victoria lo hizo con su preparador f¨ªsico y Magdalena, despu¨¦s de ser plantada pocos meses antes de su boda, finalmente lo hizo con un empresario con el que pasa poco tiempo pese a que est¨¢ esperando su segundo hijo.

La boda de Carlos Felipe fue por amor,?de eso no hay duda, de ah¨ª la emoci¨®n en el rostro de joven pr¨ªncipe. La pareja llevaba ya conviviendo cuatro a?os y desde hace uno Sof¨ªa participa en la vida p¨²blica del pa¨ªs como parte de su formaci¨®n para ser miembro de la familia real. En los d¨ªas previos al enlace el pr¨ªncipe y su prometida ofrecieron dos entrevistas a la televisi¨®n para contar su historia. ?l proclam¨® su amor por ella y ella asegur¨® que no se arrepent¨ªa de su pasado, ya que de todo ¡°se aprend¨ªa¡±.

El formato de la ceremonia, a la que asistieron 350 invitados, fue similar al de las bodas de las princesa Victoria y Magdalena, aunque algo m¨¢s sencillo y moderno. Incluy¨® hasta una versi¨®n en sueco del Umbrella de Rihanna y un cierre final a ritmo de gospel con el que los novios abandonaron la iglesia. Carlos Felipe fue un novio nervioso que tuvo problemas para poner el anillo a la novia.

Una vez finalizada la boda, los novios recorrieron en carroza descubierta el centro de Estocolmo antes de regresar a palacio, en cuyo sal¨®n Vita havet (Mar blanco) se celebrar¨¢ el banquete, con el posterior baile en la galer¨ªa de Carlos XI.

Hasta Estocolomo acudieron varios representantes de los miembros m¨¢s j¨®venes de las casas reales como Federico y Mary de Dinamarca y Haakon y Mette-Marit de Noruega; los pr¨ªncipes Nicolas y Tatiana de Grecia; la princesa Takamado de Jap¨®n y los condes de Wessex, Eduardo y Sof¨ªa de Inglaterra,

La novia luci¨® un vestido de seda en tres tonos de blanco, obra de la dise?adora sueca Ida Sj?stedt y con encaje elaborado por el espa?ol Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz.