"Me sorprende que se diferencie lo superficial de lo intelectual"

Lo primero que veo al entrar en la suite donde voy a entrevistar a Mario Testino (Lima, 1954), quiz¨¢s el fot¨®grafo de moda vivo m¨¢s famoso del mundo ¨Cincluso m¨¢s que muchos de sus retratados¨C, es al propio Testino, alto y en alerta, rodeado de su equipo, formado por m¨¢s de media docena de caballeros. Hoy se encuentran en Barcelona trabajando en una campa?a publicitaria y la suntuosa habitaci¨®n que ocupan en el Mandarin Oriental se ha transformado en un despacho a medio camino entre Matrix y Funny face.

Testino me parece un pont¨ªfice rodeado de una Guardia Suiza de m¨²ltiples nacionalidades, seleccionada con el mismo criterio que el c¨¦lebre cuerpo militar del Papa. Como Inocencio X, retratado por Vel¨¢zquez, ¨¦l tambi¨¦n parece saber leer mi mente, y me conduce hasta el sal¨®n. Prefiere hacer la entrevista descalzo, ense?ando unos magn¨ªficos calcetines largos de hilo. ¡°Abramos la ventana porque descalzo siempre hay que estar ventilado¡±, desliza, sin resistirse a una carcajada. Flamboyante pero al mismo tiempo viril, su tama?o, su voz, sus manos te hacen sentir protegido. Y su verbo comparte continuamente informaci¨®n. ¡°Odio a la gente que se guarda datos. Toda sabidur¨ªa debe ser compartida¡±, aclara mientras arregla los cojines del sof¨¢. Cuando te mira descubres que bajo sus pupilas hay dos maquinarias en acci¨®n. Una, la que observa la foto y seduce paulatinamente al observado. Otra, la que est¨¢ pensando en cien cosas a la vez, disfrutando al mezclarlas y agitarlas, pero sin olvidar por un segundo d¨®nde est¨¢ cada una.

Odio a la gente que se guarda datos. Toda sabidur¨ªa debe ser compartida¡± Mario Testino

Mario Testino: Mi cosa rara es que soy muchas cosas. Me gusta la moda, pero me gusta tambi¨¦n su parte period¨ªstica. Porque la moda es historia. Soy al mismo tiempo fot¨®grafo y cronista. Me gusta la tradici¨®n, pero tambi¨¦n me gusta lo nuevo. Soy como un perrito al que le dicen ¡°haz una pose¡± y despu¨¦s le dan una galletita. Y todos los d¨ªas quiero mi premio, mi galletita.

Boris Izaguirre: Su relaci¨®n con Espa?a parece una historia de amor mutuo.

M.T.: Cuando decid¨ª hacer un n¨²mero de la edici¨®n espa?ola de Vogue dedicado a Espa?a, oiga, era el peor a?o de la crisis. Me pareci¨® el momento perfecto para devolver una sonrisa, un poco de luz. Fue un trabajo enorme, pero la respuesta de todos los que participaron, los decoradores, los fotografiados, era tan vital¡­, seguramente porque ellos tambi¨¦n ve¨ªan que en medio de la crisis hab¨ªa que despertar ese ¨¢nimo de positividad. La supervivencia es eso, mantenerte positivo mientras todo oscurece.

B.I.: ?Qu¨¦ le parecen nuestros Reyes?

M.T.: Ped¨ª hacerle una foto a la entonces princesa Letizia, pero el protocolo s¨®lo concedi¨® que fuera a un acto donde ella acudir¨ªa para parapetarme entre los fot¨®grafos autorizados. No era el retrato que quer¨ªa hacer de ella y declin¨¦. Pero creo que ahora, la pareja, como reyes, est¨¢ creando un discurso m¨¢s propio. Quiz¨¢ podamos pensar ahora en una foto que refleje ese cambio.

El hombre se lo puede permitir todo, hacer y ser lo que sea. Para m¨ª eso se concentra en David Bowie, que hac¨ªa todo lo que hac¨ªa una mujer pero tambi¨¦n le gustaban las mujeres" Mario Testino

Viste camisa, pantal¨®n y calcetines en distintos tonos de antracita, destilando una masculina sofisticaci¨®n. ¡°?Pero al principio, en el 76, no me bajaba de una plataforma!¡±, sentencia con una carcajada. ¡°Me gritaban en la calle. Me gritaban porque me vest¨ªa de flores. Me gritaban en todas partes. Qu¨¦ antip¨¢ticos, yo no estaba haciendo ning¨²n da?o. Mis vestuarios eran tan elaborados que en el peri¨®dico en Lima pr¨¢cticamente ten¨ªan una secci¨®n dedicada a lo que me pon¨ªa. En Per¨² el vestuario es muy importante. En todas las clases sociales y en nuestra historia. Uno de mis ¨²ltimos trabajos ha sido precisamente fotografiar todos los vestuarios del folclore peruano. Han estado all¨ª por siglos y de repente los fotografi¨¦ y todo el mundo en el pa¨ªs se siente orgullosos de ellos. Es la historia de siempre, no puedes entender algo que es tuyo hasta que te alejas de ello. Y regresas y lo mejoras¡±.

Testino se march¨® muy joven de Per¨². ¡°Haciendo dedo conoc¨ª a un chico surfista que estudiaba filosof¨ªa y que me dej¨® en mi casa un ejemplar de Demian, de Hermann Hesse¡±, acentuando todos los elementos de sexo, iniciaci¨®n y liberaci¨®n que encierra la propia an¨¦cdota. ¡°Yo era diferente y ten¨ªa que ir a donde estuvieran los otros diferentes. Y ese lugar era Londres. Porque all¨ª s¨®lo hay libertad. ?Creo tanto en la libertad! Por eso en mi nuevo libro, SIR, editado por Taschen, quiero devolverle a los hombres, al var¨®n, una libertad que ha ido perdiendo por los prejuicios. La masculinidad tambi¨¦n puede ser un espect¨¢culo¡±, afirma. ¡°El hombre se lo puede permitir todo, hacer y ser lo que sea. Para m¨ª eso se concentra en David Bowie, que hac¨ªa todo lo que hac¨ªa una mujer pero tambi¨¦n le gustaban las mujeres. Y le importaba un pimiento lo que pensara la gente. Yo recib¨ªa esa vena Bowie a trav¨¦s de un grupo brasile?o llamado Secos & Molhados, su l¨ªder Ney Matogrosso era lo m¨¢ximo. Plumas, lentejuelas y fantas¨ªa tropical en un macho. Todo eso lo quer¨ªa volcar en SIR¡±.

De Bowie pasamos a Enrique VIII, quien por una necesidad personal ¨Cpoder divorciarse de una esposa para casarse con otra¨C cre¨® una religi¨®n. Ese tipo de cosas le maravillan. ¡°Vivimos regidos por decisiones que han hecho otras personas y yo creo que el verdadero cambio es cuando t¨² impones tus decisiones, tus criterios. Aunque no me vea casado, defiendo el matrimonio igualitario. He peleado toda la vida por mi libertad, y dentro de esa libertad he entendido que no voy a tener hijos. Dicho esto, todo lo que son gustos y colores tiene que poder cambiar. Los valores son las ¨²nicas cosas que permanecen. Ser honesto, respetuoso, bondadoso. Pero los gustos, mientras m¨¢s, mejor¡±.

Y de seguidas, se declara defensor de Margaret Thatcher. ¡°Porque esa mujer cambi¨® completamente el pa¨ªs que m¨¢s admiro, Inglaterra. Es un ejemplo de tolerancia reconocer que un gobierno conservador puede enderezar un pa¨ªs. Y punto¡±.

Siempre he tenido muy buena nariz. Para saber con qui¨¦n tengo que ir, a qui¨¦n tengo que ver, d¨®nde tengo que pararme, qu¨¦ ciudad...¡± Mario Testino

Ese criterio conservador no se manifiesta en su haber como coleccionista. ¡°Durante 36 a?os me levantaba todos los d¨ªas a comprar algo hasta hacer una colecci¨®n de m¨¢s de dos mil piezas. Pero ya no quiero coleccionar m¨¢s. Ahora esa energ¨ªa est¨¢ enfocada en mi museo, MATE, en Per¨². La gente me dice que estoy cambiando Lima, que no es una ciudad linda pero s¨ª con un alma por descubrir. Ojala sea as¨ª¡±. En efecto, la inauguraci¨®n de este centro cultural que fund¨® en el distrito lime?o de Barranco, en 2012, coincide con un momento esplendido para Per¨². ¡°Siempre he tenido muy buena nariz. Para saber con qui¨¦n tengo que ir, a qui¨¦n tengo que ver, d¨®nde tengo que pararme, qu¨¦ ciudad...¡±.

Con ese don podr¨ªa haber sido cualquier cosa, diplom¨¢tico, pol¨ªtico. ¡°Yo no sab¨ªa ni lo que era la fotograf¨ªa¡±, expone. ¡°Estudiaba econom¨ªa y derecho. No pod¨ªa estar m¨¢s aburrido, aunque luego eso me ayudara mucho en hacer de mi talento una empresa. ?Por qu¨¦ los creadores no podemos ser tambi¨¦n empresarios? El caso es que llegu¨¦ a Londres y trabaj¨¦ de camarero. No era un buen camarero, me fastidiaba al instante, pero mis compa?eros, actores y escritores, me ped¨ªan que los fotografiara para sus books y sus documentos de inmigraci¨®n. As¨ª me di cuenta que, aunque fracasara como camarero, ten¨ªa mucho don para fotografiar y ayudar.¡±

Cualquiera que sea el motivo de sus im¨¢genes, lo primero que recibes es vitalidad, color, nitidez. SIR est¨¢ plagado de ejemplos, como la instant¨¢nea de tres ba?istas cariocas vestidos con estrech¨ªsimos ba?adores en colores primarios. O su Instagram, que supera el mill¨®n de seguidores. El d¨ªa de nuestra entrevista su cuenta era la m¨¢s visitada gracias a las im¨¢genes que hab¨ªa tomado en la celeb¨¦rrima Met Gala de Nueva York. La alfombra roja m¨¢s delirante, retratada con el ojo de Mario Testino al ritmo de la red social. ¡°Hay muchos fot¨®grafos que hacen lo mismo que yo¡±, concede, saboreando su propio sarcasmo, ¡°pero ninguno con mi acceso. Ese es mi don: he nacido con acceso total pegado en mi frente. ?Claro que me acerco a Beyonc¨¦ y le digo, ¡®Beyonce, no me pongas cara de orto¡¯, o le digo a Jennifer Lopez que se quede tranquila! Y el resultado es esa foto incre¨ªble en la que est¨¢n sentadas en la misma mesa Jennifer, Donatella Versace, Lady Gaga y, como guinda, Uma Thurman¡±. Testino no lo puede evitar y otra vez se parte de risa.

Pero tambi¨¦n hay momentos comprometidos. John Galliano vistiendo a la nueva se?ora de George Clooney ante la presencia de la directora de Vogue USA, Anna Wintour. ¡°John ha pedido perd¨®n, se ha rehabilitado. Y su talento sigue intacto. Y Anna esta all¨ª para defenderlo. Yo quer¨ªa esa foto. La necesitamos¡±, zanja.

B.I.: El Instituto de Fotograf¨ªa de Nueva York se ha rendido por una vez a la moda concedi¨¦ndole un premio.

M.T.: S¨ª, y me acompa?¨® a recogerlo Carolina Herrera. Los premiados que me preced¨ªan eran trabajos muy serios, la desigualdad del hombre negro, el peligro de los drones.... Y de repente salgo yo, todo color, todo fiestas, diciendo ¡°?amo la vida!¡±, y me qued¨¦ pensando, ¡°parezco tan superficial...¡±.

B.I.: ?Le molesta?

M.T.: No. Siempre le digo a mi equipo: uno nunca es de una sola manera. Tienes una parte masculina y otra femenina, una parte seria y una parte divertida. Ninguna molesta a la otra, ambas siempre se necesitan. Pertenezco a un club privilegiado de caballeros, el de los latinoamericanos sofisticados. Hemos tenido una educaci¨®n con lo mejor de todos los mundos. No lo olvide.

B.I.: ?Fue eso lo que quebr¨® el hielo que envolv¨ªa a Diana de Gales cuando la fotografi¨®?

M.T.: Para m¨ª, lo hermoso de esa fotograf¨ªa es que hizo que, a?os despu¨¦s, su hijo Guillermo solicitara que yo hiciera la foto de su compromiso con Kate. La manera en que una foto homenajea a la otra, es, por encima de todo, muy emocionante.

B.I.: ?Es cierto que la sesi¨®n con Diana cambi¨® en el momento en el que usted se solt¨® la melena y se puso a petardear delante de ella?

M.T.: En esa ¨¦poca yo estaba fascinado con las pasarelas. Porque en los noventa las modelos ten¨ªan cada una su propia personalidad. Y s¨ª, empec¨¦ a hacer como que desfilaba delante de la Princesa, para que ella entendiera que tambi¨¦n pod¨ªa ser otra mujer aparte de princesa. ?Claro que se relaj¨®!

B.I.: La sensaci¨®n es que esa sesi¨®n transform¨® su vida, le cre¨® un sello.

M.T.: Los Rolling Stones siempre tienen que cantar Satisfaction, yo siempre tengo que contar la sesi¨®n con Diana de Gales.

Testino reconoce cu¨¢les son sus principales influencias. Cecil Beaton (¡°que lo anotaba todo, ?eso s¨ª hubiera sido un Instagram!¡±) y Madame Yevonde, una fot¨®grafa de los a?os treinta que ya anunciaba hasta d¨®nde llegar¨ªa la digitalizaci¨®n. ¡°Cuando empec¨¦, me peleaba todos los d¨ªas con Kodak porque me enamoraba de un tipo de pel¨ªcula y ellos dejaban de fabricarlo. Eso es lo que me gusta de lo digital, que no dependes de nadie, s¨®lo de lo que se te ocurra.¡± ?Retocar es arte? ¡°Todo el mundo cree que retocar es quitar arrugas y cambiar cuerpos. No, retocar es eliminar lo que te distraiga. Cuando ves un error en una foto, te das cuenta de que no es el personaje, no es el maquillaje, tampoco es el pelo. ?Es el techo! Resulta demasiado bajo. Entonces me siento a retocar y alargo el techo seis metros¡±.

En las paginas de SIR aparecen David Bowie y David Beckham encantados de estar unidos delante de su ojo. Testino sonr¨ªe. ¡°No hay nada como el acceso¡±, murmura, llevando la entrevista a su fin con una frase: ¡°Me llama la atenci¨®n que la gente insista en diferenciar lo superficial de lo intelectual. Por m¨¢s que lo pienso, no encuentro la posibilidad de que una cosa pueda sobrevivir sin la otra¡±, dice, devolvi¨¦ndome a la realidad con esa mirada que transmite su peculiar forma de retocar el mundo.