La serie que se mofa de los documentales 'serios'

?Es el documental un g¨¦nero propicio para la parodia?, ?acaso goza de suficiente recorrido en el imaginario colectivo como para identificar un dibujo c¨®mico de este?, ?se pueden maniobrar sus c¨®digos, esquemas y rasgos para acercarlos a la comedia?, ?existen suficientes muestras ic¨®nicas a las que recurrir?

Estas preguntas sin respuesta tajante parecen resolverse en las cabezas de Fred Armisen, Bill Hader, y Seth Meyers, c¨®micos salidos de la cantera inagotable del Saturday Night Live e impulsores de Documentary Now. Una serie mockumentary que recoge en cada cap¨ªtulo algunas de las muestras m¨¢s emblem¨¢ticas del documental para darles la vuelta con su versi¨®n par¨®dica. Los trabajos m¨¢s representativos de los hermanos Maysles, Robert J. Flaherty, Errol Morris, o incluso los documentales de VICE, son reformulados a trav¨¦s de la vis c¨®mica afilada e ingeniosa de estos humoristas.

La temporada se compone en total de seis episodios de sketches de 30 minutos emitidos por el canal de cable IFC (propiedad de AMC), casa de otras perlas humor¨ªsticas como Portlandia y The Spoils Before Dying. En cada uno de los cap¨ªtulos Bill Hader y Fred Armisen se sumergen en la obra original ¨C imitando el tono, el estilo y los rasgos m¨¢s caracter¨ªsticos de la referencia ¨C desde donde extraen preciadas virutas de comicidad, las cuales parecen maceradas m¨¢s al estilo ingl¨¦s - el de Monty Phyton, Reece Shearsmith & Steve Pemberton, Little Britain, etc.-, que al de sus tierras.

Imitando la forma presentada por la serie documental de la que toman prestado el nombre, cada cap¨ªtulo arranca con la actriz Helen Mirren introduciendo de manera sobria las historias reales no acontecidas que protagonizan este par de c¨®micos norteamericanos.

El segundo, por ejemplo ¨C subido online antes del estreno del primero ¨C se abre con Jack Black en versi¨®n hipster emulando a Shane Smith, el jefazo de VICE (Dronez en la serie), quien, con una copa de whisky en la mano, y desde sus molonas oficinas de Brooklyn, introduce un hilarante reportaje en zona de guerra ¨C alrededor de un famoso capo del narcotr¨¢fico en Ciudad Ju¨¢rez - propio de los que suelen avivar la l¨ªnea editorial del popular medio.

Humor par¨®dico, con cierta bilis, que no deja de ser un homenaje a sus referentes, y que desde el pasado 20 de agosto impacta a nichos de la audiencia norteamericana mientras que por estos lares pasa, injustamente, desapercibido. Por el momento ya tiene ganada una segunda temporada, se?alando de nuevo el digno papel desempe?ado por IFC apostando por la comedia m¨¢s disparatada, original y alejada de esquemas prefijados, la que no guarda demasiadas consideraciones con los rating que la acompa?an.