C¨®mic, revoluci¨®n en femenino

Amor a primera vista. Eso fue lo que ocurri¨® cuando Emma R¨ªos y Kelly Sue DeConnick se conocieron por fin en persona. Fue en octubre de 2011, en el Sal¨®n del C¨®mic de Nueva York, despu¨¦s de haber trabajado dos a?os mano a mano, pero a distancia, para la oficina de Marvel donde se fabrican los tebeos de Spiderman. La gallega era dibujante; la estadounidense, guionista. Las dos fueron contratadas en 2009 para sacar adelante Osborn, un n¨²mero que giraba en torno al Duende, archienemigo del Hombre Ara?a. El personaje estaba muy quemado y no ten¨ªan claro qu¨¦ tal iba a funcionar. Pero algo hizo clic entre ellas desde el primer momento; as¨ª lo certific¨® la buena acogida de la cr¨ªtica. El encuentro sirvi¨® para fraguar una amistad que en 2014 deriv¨® en un violento western: la novela gr¨¢fica Bella Muerte, escrita con un oc¨¦ano de por medio (R¨ªos est¨¢ afincada en A Coru?a y su colega vive en Portland). Tras vender 60.000 copias, la obra recibi¨® la nominaci¨®n a cuatro premios Eisner, los m¨¢s prestigiosos de una industria que mueve 836 millones de euros al a?o en EE UU. El libro est¨¢ plagado de personajes femeninos complejos y fuertes, una tendencia al alza en el mundo del c¨®mic.

¡°Encontraremos la amenaza. La erradicaremos. Sabremos al fin, para bien o para mal, qu¨¦ serpientes han entrado en nuestro jard¨ªn¡±. She-Hulk tiene una expresi¨®n desafiante: sabe que no puede fallar. El futuro de toda Arcadia, ¨²ltimo reducto de libertad de su mundo, depende de ella. En su vida normal era una abogada llamada Jennifer Walters. Gravemente herida, recibi¨® una transfusi¨®n de su primo Bruce Banner y adquiri¨® su portentosa musculatura y su color verde, aunque ella no pierde la cabeza cuando entra en modo bestia. Eso fue hace 35 a?os; su primera aparici¨®n se dio en el c¨®mic Savage She-Hulk #1, de Marvel (1980), y la historia del origen es similar a la de tantas protagonistas de c¨®mic, nacidas como franquicias de los h¨¦roes de verdad, los chicos: Supergirl, Spiderwoman, Batgirl, Miss America¡­ Pero desde el pasado mes de mayo She-Hulk ha subvertido el clich¨¦ de Eva y lidera su propio equipo, solo de mujeres: la A-Force, que puede traducirse como Fuerza A. ?Estamos ante un cambio de paradigma del panorama de la historieta?

Alrededor del 70% de los personajes de DC y el 75% de los de Marvel son hombres, aunque la proporci¨®n de mujeres ha aumentado de forma m¨¢s o menos estable desde los a?os sesenta, seg¨²n los c¨¢lculos de la p¨¢gina web FiveThirtyEight, perteneciente al canal deportivo ESPN. Tambi¨¦n han aparecido varias decenas de personajes homosexuales nuevos desde el a?o 2000. Y She-Hulk no es la ¨²nica rompedora. La nueva Ms. Marvel est¨¢ encarnada por una adolescente musulmana de origen paquistan¨ª. La Capitana Marvel posee su propio t¨ªtulo en papel desde hace tres a?os y protagonizar¨¢ una pel¨ªcula prevista para 2018. Mientras, desde el universo DC, el otro gigante del tebeo, la cinta de la amazona Wonder Woman por fin ha obtenido el visto bueno de Warner Bros para comenzar a rodarse este oto?o. En cuanto a las protagonistas de las historias, el vuelco parece claro. Pero ellas no han salido de la nada: detr¨¢s tienen a una nueva generaci¨®n de autoras que revolucionan el g¨¦nero desde dentro de la industria.

Para escribir la adaptaci¨®n cinematogr¨¢fica de La Capitana Marvel, la factor¨ªa ha fichado a Nicole Perlman, coautora del filme Guardianes de la Galaxia (2014), que lleva recaudados casi 700 millones de euros a nivel mundial, y a Meg LeFauve, de la aclamada Del rev¨¦s, de Pixar (2015). Pero quien llev¨® a la Capitana al estrellato en sus vi?etas fue precisamente la pelirroja Kelly Sue DeConnick, quien sentenciaba en 2012: ¡°Si puedes reemplazar a tus personajes femeninos con una l¨¢mpara sexy y la historia b¨¢sicamente funciona, igual necesitas otro borrador. Tienen que ser protagonistas, no recursos¡±.

Desde que la estadounidense DeConnick y la espa?ola R¨ªos comenzaran a darle vueltas al hit Bella Muerte, tuvieron claro que quer¨ªan hacer un c¨®mic de ¨¦poca. Se inspiraron en los planos surrealistas de los westerns de Sergio Leone. Para la gallega, Bella Muerte se ha convertido en el primer trabajo que le permite dedicarse en exclusiva a lo que le gusta. Dice llevar dentro el feminismo. ¡°Sin querer, hackeas los roles conocidos y los conviertes en algo que para ti es totalmente natural. Y la gente dice: ¡®Mira, ha cogido los arquetipos y les ha dado la vuelta¡±. Su historieta arranca con un hombre que se presenta como un pr¨ªncipe azul, pero se desmadra r¨¢pidamente porque, celoso, encierra a su esposa, que busca la muerte para escapar. El segundo volumen comienza a publicarse por entregas en EE UU este septiembre y Astiberri lo editar¨¢ completo el pr¨®ximo a?o en castellano. Si bien Emma R¨ªos no es la ¨²nica espa?ola en saltar al otro lado del charco.

Marvel ha fichado a la ilustradora Natacha Bustos para Moon Girl and Devil Dinosaur, el remake de un cl¨¢sico de Jack Kirby que llegar¨¢ a las librer¨ªas estadounidenses en noviembre. Y entre los siete autores espa?oles nominados a los Eisner este a?o est¨¢ la catalana Meritxell Bosch, por el c¨®mic infantil BirdCatDog, con guion de Lee Nordling. Bosch tiene 33 a?os y es madre de un ni?o de 4. Vive en Sabadell. Este a?o publicar¨¢ en La C¨²pula una autobiograf¨ªa, Yo gorda. ¡°La novela empieza cuando la protagonista es peque?a y recibe malos tratos y vejaciones. Despu¨¦s sufre de falta de autoestima y bulimia¡­ Trata de todo lo que conllevan los trastornos alimentarios que te llevan a cambiar tu comportamiento¡±. A pesar del argumento, la risue?a Bosch se muestra infatigablemente positiva durante la conversaci¨®n: ¡°Empieza mal, pero acaba bien¡±. Su padre, venezolano, muri¨® de sobrepeso hace cuatro a?os. Para ella fue un momento de inflexi¨®n. Ahora prepara un segundo trabajo inspirado en la dura infancia de ¨¦l, su adolescencia como boxeador callejero y la cultura del vud¨² en su entorno.

Lo normal es tener uno o dos empleos aparte de este. Y dentro del mundillo sufrimos una falta de referentes y apoyo entre nosotras¡±

Fernando Taranc¨®n es uno de los fundadores de la editorial especializada Astiberri, que desde sus inicios en 2001 apost¨® por nuevas firmas como Raquel Alzate. ¡°Cada vez hay m¨¢s chicas que nos presentan trabajos interesantes, cuyas primeras lecturas fueron noveladas¡±, explica Taranc¨®n. ¡°Se corresponden a una nueva generaci¨®n de autores en general que se ha criado leyendo novela gr¨¢fica¡±. J¨®venes para quienes Internet ha supuesto una plataforma donde desarrollarse y darse a conocer. Publican desde obra de autor ¨Ccomo el inquietante y conmovedor Sangre de mi sangre, de Lola Lorente, autor revelaci¨®n del Sal¨®n de Barcelona en 2012¨C hasta vi?eta cotidiana ¨CLet¡¯s Pacheco!, de Carmen y Laura Pacheco; Moderna de pueblo, de Raquel C¨®rcoles, o las tiras de Agustina Guerrero, Sara Oncina y Sara Herranz¨C. Para recuperar la memoria hist¨®rica de las que les abrieron camino, el a?o pasado un pu?ado de ellas decidieron montar la Asociaci¨®n de Autoras de C¨®mic.

La plataforma, que hoy cuenta con 92 asociados ¨Cest¨¢ abierta a hombres¨C, otorg¨® un premio honor¨ªfico a una de las grandes olvidadas: N¨²ria Vilaplana Buixons, nacida en Barcelona en 1931 y conocida por su seud¨®nimo N¨²ria Pompeia. Hoy se mantiene lejos de los focos, pero fue pionera del c¨®mic de narrativa experimental a finales de los sesenta, en un pa¨ªs en el que la historieta estaba, en su pr¨¢ctica totalidad, dirigida a un p¨²blico infantil y segregado.

Durante el franquismo, las artistas espa?olas dibujaban tebeos rom¨¢nticos para ni?as, como Azucena, Florita o, ya en los setenta, Esther, protagonista c¨¦lebre para toda una generaci¨®n y recuperada por su ilustradora Pura Campos en Esther cumple cuarenta (2014), con texto de Carlos Portela. En esa ¨¦poca eran los varones quienes creaban las historietas de humor o aventuras para chicos que hoy se consideran los cl¨¢sicos patrios: Mortadelo y Filem¨®n, Zipi y Zape, Anacleto, agente secreto o El Capit¨¢n Trueno. N¨²ria Pompeia rompi¨® el molde. ¡°Porque pudo¡±, aclara Josune Mu?oz, experta en cr¨ªtica literaria con perspectiva de g¨¦nero. ¡°Su marido era el due?o de la editorial Kair¨®s¡±. Mu?oz atesora en su biblioteca de Bilbao m¨¢s de 6.000 vol¨²menes, con t¨ªtulos ¨²nicos que arrojan luz sobre el pasado de las creadoras espa?olas. Uno de ellos, escrito por la veterana catalana, es Maternasis, en el que una mujer embarazada de ojos tristes aparece, p¨¢gina tras p¨¢gina, con la boca tapada por su propia mano. Durante el parto, entonces tab¨² absoluto, las p¨¢ginas se vuelven completamente negras. La obra retrata los miedos y dolores del embarazo. Pero, sobre todo, muestra el silencio que aislaba a las mujeres de la ¨¦poca.

Publicado en 1967, Maternasis fue un volumen transgresor en est¨¦tica y contenido. Se anticip¨® a La Mamen que, de la tinta de Mariel Soria en El Jueves, reclamaba vivir su sexualidad como le diera la gana, o a Amparo Torrego, una liberada mujer de la II Rep¨²blica dibujada por la autora Marika Vila en 1978. ¡°Siempre ha habido mujeres en el c¨®mic espa?ol¡±, sostiene Vila, que est¨¢ escribiendo una tesis doctoral sobre ellas y cree que fueron invisibilizadas. Enumera a algunas que continuaron publicando en los a?os noventa: ¡°Marta Guerrero, Mar¨ªa Colino, Ana Juan, Ana Miralles, Asun Balzola, Raquel Alzate, Clara-Tanit Arqu¨¦¡­¡±. Josune Mu?oz explica que, en paralelo, publicaciones como la revista El V¨ªbora (1979-2005) estaban plagadas de chicas ¡°hipersexualizadas¡±.

Hoy el panorama ha cambiado, aunque una dificultad es que en Espa?a apenas hay apoyo institucional; la ¨²nica beca de c¨®mic que exist¨ªa, de la Alh¨®ndiga de Bilbao, desapareci¨® en 2012. ¡°Aqu¨ª es muy dif¨ªcil publicar porque las editoriales no te pagan el adelanto, y un c¨®mic normalito de cien p¨¢ginas lleva un a?o de trabajo¡±, asegura Susanna Mart¨ªn, de la Asociaci¨®n de Autoras de C¨®mic. ¡°Lo normal es tener uno o dos empleos aparte. A nivel social, las mujeres tenemos un mont¨®n de dificultades. Y dentro del mundillo sufrimos una falta de referentes y de apoyo entre nosotras¡±. En los ¨²ltimos cinco a?os, sin embargo, las grandes superficies han notado el empuje de las nuevas autoras, asegura Mercedes Hern¨¢ndez, jefa de producto de c¨®mic de Fnac Espa?a. Se multiplican las antolog¨ªas de corte feminista como Enjambre (Norma, 2014), Caniculadas (Astiberri, 2014), la adaptaci¨®n de los cuentos de Hern¨¢n Migoya Todas putas (Dibbuks, 2014) o el fanzine Folloneras. Y este a?o la asociaci¨®n ha puesto una mesa propia en el Sal¨®n de Barcelona, donde fueron, por primera vez, tres las nominadas a mejor obra extranjera.

¡°La novela gr¨¢fica ha abierto el c¨®mic a otro tipo de p¨²blico¡±, explica Taranc¨®n, de Astiberri. Mercedes Hern¨¢ndez, de Fnac Espa?a, sostiene que la mayor¨ªa de clientes siguen siendo hombres, pero que ellas consumen cada vez m¨¢s. Y el nuevo p¨²blico es omn¨ªvoro. De los 42 millones de usuarios que el pasado agosto hab¨ªan pulsado ¡°me gusta¡± en la p¨¢gina C¨®mic en Facebook, las mujeres supon¨ªan el 40,43%, seg¨²n la web especializada Graphic Policy. Cuando Marvel anunci¨® en 2013 que Thor se reencarnar¨ªa en una mujer, despert¨® la oposici¨®n enfervorizada de parte de los fans. En la quinta entrega del c¨®mic, el villano Hombre Absorbente se hizo eco: ¡°?Est¨¢s de broma? ?Te tengo que llamar Thor? Las malditas feministas lo est¨¢n arruinando todo¡±. Como respuesta, ella le rompi¨® la mand¨ªbula: una reacci¨®n algo dr¨¢stica. Pero la serie supera en un 30% las ventas de su predecesor masculino. Quiz¨¢ esa sea suficiente venganza.

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