Berl¨ªn, de ¡°pobre pero sexy¡± a rica e inalcanzable

Berl¨ªn ya no es esa ciudad a la que los j¨®venes de media Europa acud¨ªan atra¨ªdos en parte por su intensa vida cultural, pero sobre todo por los precios casi irrisorios de la vivienda. Los 15 a?os transcurridos desde la mudanza de la capital y la bonanza econ¨®mica han fomentado algo que antes aqu¨ª estaba casi proscrito: el lujo. Una buena muestra es el proyecto del arquitecto estrella Daniel Libeskind en el centro. El estadounidense, autor del cercano Museo Jud¨ªo, ha dise?ado un edificio en forma de zafiro con 74 viviendas, pensado por y para yuppies,donde el metro cuadrado llega a los 9.000 euros.

Cuando el pr¨®ximo a?o est¨¦ terminado, el zafiro de Libeskind estar¨¢ entre lo m¨¢s deseado por los inversores ¡ªsobre todo extranjeros¡ª que revolotean la ciudad. Pero no es ni mucho menos una excepci¨®n. Seg¨²n un reciente estudio, una de cada 30 viviendas vendidas en los dos ¨²ltimos a?os cost¨® m¨¢s de 750.000 euros. Los agentes inmobiliarios hablan de ¡°un boom del lujo¡± con el que seguir llen¨¢ndose los bolsillos los pr¨®ximos a?os. Lejos quedan los tiempos en los que el anterior alcalde, Klaus Wowereit, lanz¨® el eslogan que acompa?¨® durante a?os a la ciudad: ¡°pobre, pero sexy¡±.

Los comentarios sobre c¨®mo se han encarecido las casas son ya un t¨®pico del que reh¨²yen algunos berlineses por ser demasiado evidentes. No es de extra?ar que la ciudad-Estado fuera el pasado junio la pionera en aplicar la ley con la que el Gobierno central trata de frenar el precio de los alquileres. El hartazgo es evidente. M¨¢s del 75% de los lectores consultados por el Berliner Zeitung aseguraban que la ciudad no necesita m¨¢s viviendas de lujo, sino pisos para familias con presupuestos m¨¢s ajustados.

El zafiro est¨¢ a pocos metros de la pr¨®xima sede del BND, el servicio de espionaje alem¨¢n, que hace medio a?o sufri¨® un rid¨ªculo nacional: unos saboteadores inundaron el edificio, causando da?os de un mill¨®n de euros. Los esp¨ªas tampoco se han librado de la fiebre por el lujo. El traslado de su sede, que concluir¨¢ en 2017, costar¨¢ m¨¢s de 1.300 millones de euros.