Adi¨®s, Catalu?a
Acabe como acabe esta historia, ya sabemos que en un solar com¨²n como es la pen¨ªnsula ib¨¦rica van a pasar muchos a?os para que se viva un clima de concordia generalizado
Algo m¨¢s de cien a?os nos dur¨® la despedida de Joan Maragall. Un poema corto y muy injusto, que acusaba a Espa?a de la pol¨ªtica err¨®nea de sus Gobiernos que obedec¨ªan los dictados de las compa?¨ªas catalanas con intereses en el norte de ?frica o en las f¨¢bricas textiles de Sabadell.
Y tambi¨¦n muy justo, porque los Gobiernos espa?oles de la ¨¦poca estuvieron sordos a las reivindicaciones serias que ven¨ªan de Catalu?a. Lo cierto es que nunca hasta ahora se ha tomado muy en serio lo que en Catalu?a pasaba.
Acabe como acabe esta historia, que nunca va a ser bien del todo como si esto fuera una pel¨ªcula de Hollywood en la que millones de personas se abrazaran en una gran pradera, ya sabemos que en un solar com¨²n como es la pen¨ªnsula Ib¨¦rica van a pasar muchos a?os para que se viva un clima de concordia generalizado. Sea cual sea la salida pol¨ªtica que se le d¨¦ al asunto (la idea de que no sea pol¨ªtica se la dejamos a los orates, y los tendremos bajo vigilancia) hay que buscar que d¨¦ resultados tempranos. Tenemos una experiencia como la de Portugal. Hemos tardado demasiados a?os en que hubiera una relaci¨®n razonable entre las gentes de los dos lados de la frontera. Pero si Espa?a hubiera ganado la guerra de la independencia con Portugal, la gente tambi¨¦n se habr¨ªa tratado con mucha distancia. Ahora tenemos dos pa¨ªses que se miran con un cierto cari?o, pero no parecen ser vecinos.
Yo creo que gane quien gane las votaciones que faltan, Catalu?a ya est¨¢ rota en dos comunidades casi igual de numerosas, y Espa?a ya est¨¢ rota, dividida tambi¨¦n en dos comunidades que van a tardar mucho tiempo en quererse como hermanos.
A esa tarea hay que empe?arse ya. Porque no es administrativa la soluci¨®n. Y hay vencedores y vencidos. Y sobre todo, hay legitimidades que no han desaparecido al acabar de contarse los votos. Legitimidades y sensibilidades. La opci¨®n derrotada solo lo es temporalmente. Tenemos conflicto en Catalu?a para mucho tiempo. Aqu¨ª s¨ª vale lo que se dec¨ªa haciendo un mal uso del castellano en Euskadi: ¡°El conflicto vasco¡±.
En Catalu?a s¨ª tenemos un conflicto. Que no se ha acabado. Que va para largo. Adi¨®s, Catalu?a. Adi¨®s, Espa?a. Hola, Catalu?a. Hola, Espa?a.
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