Un error innecesario

Si se confirma que el Ayuntamiento de Madrid no renueva el contrato con las agencias de calificaci¨®n de deuda (Standard&Poor¡¯s y Fitch) podr¨ªa decirse con claridad que Manuela Carmena y su equipo cometen un error. Una ciudad como Madrid, con un volumen de deuda que supera los 5.000 millones, no puede quedarse sin referencia alguna sobre la calidad de su endeudamiento. Es como desconectar la financiaci¨®n de la ciudad de un recurso en el cual quiz¨¢ tenga que buscar dinero que no le ser¨¢ tan f¨¢cil encontrar en la fiscalidad o en la aportaci¨®n del Estado.

El argumento utilizado para anunciar ¡°que se estudia¡± rescindir el contrato es una muestra de buena voluntad, pero pueril: ¡°Madrid no se endeudar¨¢ m¨¢s¡±. Pues bien, as¨ª sea; pero, incluso aunque se descarten necesidades imprevistas y perentorias, queda una deuda cuantiosa sujeta a los azares de la refinanciaci¨®n.

Carmena y su equipo deber¨ªan reconsiderar su posici¨®n. Si el malestar con las agencias se debe a la falta de sinton¨ªa del nuevo equipo municipal, hay m¨¢s firmas a las que se puede y se debe recurrir; si el argumento fuera el coste elevado de los servicios, int¨¦ntese una renegociaci¨®n de las minutas. Pero no es buena pol¨ªtica aislarse de la l¨ªnea habitual de financiaci¨®n.

Otra cosa, por supuesto, es el comportamiento poco profesional de las agencias seg¨²n las conversaciones conocidas por los medios de comunicaci¨®n. La tensi¨®n con el equipo municipal es evidente. Si se entend¨ªan mejor con el equipo de Ana Botella, no deber¨ªan demostrarlo; adem¨¢s, no son aceptables las reticencias esquinadas que muestran ante las auditor¨ªas que reclama el Ayuntamiento. Una agencia de calificaci¨®n deber¨ªa felicitarse de que se conozcan las cuentas de una instituci¨®n; facilita su tarea. Salvo que el resultado de las auditor¨ªas demuestre que la calificaci¨®n de Madrid est¨¢ sobrevalorada. En cuyo caso el Ayuntamiento y los madrile?os tendr¨ªan un problema... y las agencias tambi¨¦n.