Alemania sue?a con un Nobel para Merkel

Acostumbrada a la etiqueta de ¡°primera mujer¡± y ¡°primera oriental¡± en alcanzar la cima del poder en Alemania, Angela Merkel no va a poder repetir el r¨¦cord en esta ocasi¨®n. Si el Comit¨¦ del Nobel de Noruega le concede hoy el premio de la Paz, ser¨¢ el segundo canciller de la Alemania moderna en lograrlo. Se le adelant¨® en 1971 el socialdem¨®crata Willy Brandt, premiado por su contribuci¨®n a la reconciliaci¨®n en la Europa de la Guerra Fr¨ªa.

La prensa alemana lleva semanas especulando con el Nobel para Merkel. Poco importa que la ¨²nica fuente identificada que la sit¨²a como favorita sea Kristian Berg Harpviken, el director del Instituto de Oslo para la Paz Prio, que cada a?o lanza su quiniela de nobeleables, y que por ahora acumula un palmar¨¦s de cero aciertos.

La historia de Merkel con el Nobel de la Paz comenz¨® a principios de a?o, cuando varios diputados de la Uni¨®n Cristianodem¨®crata propusieron a su jefa. Entonces lo hicieron pensando en los esfuerzos de la canciller para pacificar el este de Ucrania. Pero la candidatura ha ganado fuerza despu¨¦s de que Merkel haya invertido todo su capital pol¨ªtico en convencer a sus conciudadanos de que merece la pena asumir el reto de acoger este a?o a 800.000, un mill¨®n o incluso 1,5 millones de refugiados. ¡°Lo vamos a lograr¡±, se ha convertido en su grito de guerra.

Lo parad¨®jico del caso es que el motivo por el que Merkel puede ganar el Nobel de la Paz es el mismo por el que su popularidad ha ca¨ªdo a su nivel m¨ªnimo en esta legislatura; y el que le ha generado los mayores ataques internos en sus 10 a?os en el poder.

Si gana, la canciller obtendr¨¢ un importante respaldo exterior a su pol¨ªtica de inmigraci¨®n que podr¨¢ mostrar a su electorado y compa?eros de partido m¨¢s cr¨ªticos. Si no, tendr¨¢ que seguir adelante de todas maneras. ¡°?Est¨¢ preparada a arriesgar el poder por los refugiados?¡±, le pregunt¨® el mi¨¦rcoles en horario de m¨¢xima audiencia la periodista Anne Will. ¡°Estoy preparada para trabajar todo lo duro que pueda. Tengo que continuar mi camino¡±, respondi¨®.