Incombustible Versace
Como en una buena ¨®pera, la firma italiana ha tenido que superar crisis econ¨®micas y personales antes de volver a alcanzar el ¨¦xito. En plena expansi¨®n, la marca inaugura tienda en Madrid
La apertura de una boutique de Versace en Madrid sugiere glamur y ostentaci¨®n. Sobre todo si se trata de un espacio de 420 metros cuadrados en la exclusiva calle Serrano. Pero, a veces, el bling bling tambi¨¦n tiene un reverso tenebroso. La noche previa al estreno, unos aluniceros empotraron su coche en el escaparate y se llevaron 65 bolsas llenas de ropa. El equipo venido desde Italia para organizar la tienda y su fiesta de inauguraci¨®n estaba at¨®nito. Al parecer, esta modalidad de robo no se estila en Mil¨¢n. Por eso, durante su visita al barrio de Salamanca, todos se hac¨ªan la misma pregunta: ?Por qu¨¦ los locales tienen unas persianas de metal opaco que no dejan ver la mercanc¨ªa? Ahora ya conocen la respuesta.
Tampoco dedicaron demasiado tiempo a lamentarse. No dispon¨ªan de ¨¦l. A las ocho de la tarde hab¨ªa un nuevo cristal, todos los maniqu¨ªes estaban vestidos y los camareros esperaban sonrientes con bandejas llenas de copas de champagne. Al fin y al cabo, si algo saben hacer en Versace adem¨¢s de ropa sexy es sobreponerse a la adversidad. Lo hicieron cuando su fundador, Gianni Versace, fue asesinado en 1997; y cuando estuvieron a punto de quebrar en 2004. Su directora creativa, Donatella Versace, no solo super¨® la tr¨¢gica muerte de su hermano, sino tambi¨¦n el hecho de que, en su herencia, legase la compa?¨ªa a su hija, Allegra, que en la actualidad tiene 29 a?os. Donatella pasar¨ªa a ocupar tambi¨¦n el puesto de vicepresidenta y su hermano Santo, el de gerente.
Hoy, Versace vuelve a ser una marca s¨®lida. En 2014 sus ingresos crecieron un 17% hasta alcanzar los 550 millones de euros. Se trata del ¨²ltimo logro de un cambio de modelo empresarial que les ha permitido ¡°duplicar el tama?o de la firma¡±, seg¨²n asegura su consejero delegado Gian Giacomo Ferraris.
El directivo llega a la fiesta directamente del aeropuerto y busca refugio al final del ¨²ltimo piso de la tienda. All¨ª se encuentra la sala del calzado: un espacio barroco ocupado por stilletos que desaf¨ªan las leyes de la gravedad y al que se llega a trav¨¦s de un pasillo plagado de prendas multicolor e invitados vestidos de luto. Con su perfecto traje gris y aspecto austero, Ferraris parece la ant¨ªtesis del esp¨ªritu Versace ¡ªaudaz, ostentoso, sensual¡ª y de la propia Donatella. Y eso, precisamente, es justo lo que creadora y marca necesitaban.
En 2005, ocho a?os despu¨¦s de la muerte de su creador, la compa?¨ªa acumulaba una deuda de 118 millones de euros y se vio obligada a cerrar varias boutiques, entre ellas, las que pose¨ªa en Madrid y Barcelona. Todo podr¨ªa haberse desvanecido. Gianni era ¡°un genio de la moda¡±, el hombre que defini¨® la est¨¦tica poderosa y lujuriosa de los noventa, pero tambi¨¦n un maestro del marketing, como recordaba en la CNN tras el fallecimiento del dise?ador Anna Wintour, la todopoderosa editora de Vogue. El creador fue ¡°el primero en sentar a celebrities en la primera fila¡± de sus desfiles. Invent¨® a las tops models y su car¨¢cter emprendedor le llev¨® a abrir una tienda en China en 1986, cuando el resto de la industria del lujo ni siquiera contemplaba el potencial del mercado asi¨¢tico.
¡°La moda tiene que ver con ir siempre hacia delante, con evolucionar sin parar" Donatella Versace
Suceder a semejante visionario intimidar¨ªa a cualquiera. Pero Donatella, adem¨¢s de la mejor relaciones p¨²blicas de la firma, era responsable de las provocadoras campa?as publicitarias que, fotografiadas por Richard Avedon o Bruce Webber, hicieron a la marca mundialmente famosa. Tambi¨¦n una suerte de ave f¨¦nix. ¡°Me encanta c¨®mo los retos me hacen reinventarme, cambiar totalmente la forma en la que trabajo¡±, cuenta v¨ªa email.
En 2009 decidi¨® fichar a Gian Giacomo Ferraris, antiguo consejero delegado de la firma Jil Sander y responsable de la divisi¨®n de pr¨ºt-¨¤-porter del grupo Gucci. Bajo su direcci¨®n, la firma fundada en 1978 por Gianni Versace afront¨® uno de los cambios m¨¢s importantes de su historia: dejar de ser una empresa familiar. El a?o pasado admit¨ªa la entrada del grupo inversor inmobiliario Blackstone como socio capitalista. ¡°Poseen el 20% de la compa?¨ªa, lo que supone un desembolso por su parte de un bill¨®n de euros. Somos reconocidos a nivel global y poseemos una capacidad creativa incre¨ªble, pero esta asociaci¨®n nos va a permitir llegar al siguiente nivel¡±, argumenta Ferraris.
El consejero delegado reconoce que toda esta estrategia empresarial no dar¨ªa fruto alguno sino estuviese respaldada por ¡°la pasi¨®n¡± de Donatella. ¡°Tiene la habilidad de proyectarse en el futuro, interactuar con las nuevas generaciones y anticiparse a las tendencias. Estas habilidades nos dan una ventaja competitiva incre¨ªble¡±, argumenta.
Los cierto es que lejos de aferrarse a su trono de directora creativa, Versace ha invitado a dise?adores como Christopher Kane y J. W. Anderson, actual responsable de Loewe, a realizar colecciones c¨¢psula para Versus, su segunda l¨ªnea. ¡°La moda tiene que ver con ir siempre hacia adelante, con evolucionar sin parar. Me encanta la inmediatez del mundo actual, c¨®mo las nuevas generaciones comparten sus pasiones con amigos de todo el mundo. Me encanta c¨®mo las puerta de la moda se est¨¢n abriendo de tal forma que todo el mundo puede sentirse parte de esta tribu global¡±, argumenta Versace.
Seg¨²n Ferraris, es esta capacidad de adaptaci¨®n lo que ha permitido a los Versace firma sobrevivir a la crisis econ¨®mica, la ¨²ltima de una larga lista de obst¨¢culos a los que se han enfrentado. ¡°Durante los pasados cinco a?os hemos demostrado ser una marca resistente, creciendo m¨¢s de un 10% en cada ejercicio¡±, remata.
Esta cualidad ¡ªla flexibilidad¡ª qued¨® de sobra probada en la fiesta de inauguraci¨®n de la tienda de Madrid. El logo de la marca, que acaba de cumplir 37 a?os, y su archiplagiado icono de la medusa atrajeron a un marem¨¢gnum de blogueros, actores, clientes y periodistas que, en su mayor parte, no hab¨ªan nacido cuando la casa italiana lo hizo. La marca que firmaba el impresionante vestido azul el¨¦ctrico con el que lady Di apareci¨® en p¨²blico dos meses despu¨¦s de su divorcio es la misma que hoy, casi 20 a?os despu¨¦s, elije a Lady Gaga para caminar por la alfombra de los premios Emmy. Y eso es la mejor prueba de su ¨¦xito.
Una d¨¦cada fuera de espa?a
Para Donatella Versace, las boutiques ¡°sugieren un ininterrumpido di¨¢logo entre nuestro pasado y nuestro futuro¡±. En Espa?a esa conversaci¨®n habla del deshielo de la firma pero tambi¨¦n del pa¨ªs. Despu¨¦s del cierre en 2005 de sus tiendas en Barcelona y Madrid, la marca abri¨® en diciembre de 2014 un local de 720 metros cuadrados en el paseo de Gracia. Barcelona fue la ciudad elegida para su vuelta a Espa?a porque all¨ª result¨® m¨¢s sencillo encontrar un emplazamiento adecuado a sus necesidades, seg¨²n explica Gian Giacomo Ferraris, consejero delegado de la marca. ¡°En Madrid estuvimos haciendo cola durante a?os para conseguir una buena localizaci¨®n¡±, sentencia ahora que la han conseguido.
Por un lado, la pol¨ªtica de expansi¨®n de la firma, y por otro, el cambio de comportamiento del mercado europeo, llevaron a la marca a regresar a Espa?a el pasado a?o. ¡°2013 fue el a?o que peor funcion¨® Europa, por detr¨¢s de Asia y EE UU; mientras que 2014 fue el mercado que mejor lo hizo, entre otras razones, porque la ca¨ªda del euro aument¨® el n¨²mero de turistas en Francia, Italia y tambi¨¦n en Espa?a¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.