?Di¨¦sel o gasolina? Mucho m¨¢s que un problema de emisiones

Los veh¨ªculos di¨¦sel ocupan una parte importante del mercado europeo porque se venden como veh¨ªculos m¨¢s eficientes y con menos emisiones de CO2 que los de gasolina. Pero tambi¨¦n emiten m¨¢s contaminantes da?inos para la salud. El caso Volkswagen ha tra¨ªdo a la luz estos temas, pero la contaminaci¨®n del aire es solo una peque?a parte del problema que producen los coches en nuestras ciudades.

Adem¨¢s de contaminaci¨®n, los coches tambi¨¦n emiten ruido y ocupan una parte importante del espacio p¨²blico ¡ªtanto en el aparcamiento como en tr¨¢nsito¡ª, que podr¨ªa dedicarse a usos m¨¢s beneficiosos para la salud, como los espacios verdes. Si a esto le a?adimos que nuestra poblaci¨®n, por desgracia, tiene altos ¨ªndices de sedentarismo, relacionados con el constante uso del coche y con la falta de parques y ¨¢reas para hacer ejercicio, nos encontramos con que las implicaciones negativas para la salud van mucho m¨¢s all¨¢ de la simple emisi¨®n de contaminantes.

Mejorar la calidad del aire en las ciudades es una prioridad de salud p¨²blica que podr¨ªa alcanzarse con una transici¨®n tecnol¨®gica hacia veh¨ªculos m¨¢s limpios, h¨ªbridos o el¨¦ctricos. Pero esta transici¨®n tecnol¨®gica solo solventar¨ªa una parte del problema. El tr¨¢fico en las ciudades continuar¨ªa, los accidentes de tr¨¢fico tambi¨¦n, as¨ª como la ocupaci¨®n del espacio p¨²blico y el sedentarismo. Entonces, ?por qu¨¦ no buscar un cambio m¨¢s saludable? ?por qu¨¦ no en lugar de invertir en coches el¨¦ctricos invertimos en transporte p¨²blico, en dar prioridad a los peatones y en transportes m¨¢s ecol¨®gicos, como las bicicletas?

Una ciudad a una velocidad m¨¢s humana podr¨¢ ser m¨¢s amigable y saludable para ni?os y adultos y ofrecer una mejor calidad de vida

En Espa?a el 40% de la poblaci¨®n adulta es sedentaria, algo que podr¨ªa disminuir significativamente si camin¨¢ramos m¨¢s o us¨¢ramos m¨¢s la bicicleta, ya que, por ahora, el 57% de los viajes urbanos se hacen en coche. Solo en Barcelona, por ejemplo, se podr¨ªan evitar al menos 170 muertes cada a?o si se substituyeran el 40% de los viajes en coche por transporte p¨²blico y bicicleta. Y esas muertes evitadas no solo estar¨ªan relacionadas con la reducci¨®n de la contaminaci¨®n, sino principalmente con el aumento de la actividad f¨ªsica en la poblaci¨®n.

Si logramos reducir el n¨²mero de coches (ya sean di¨¦sel, de gasolina o el¨¦ctricos) tendremos m¨¢s espacio para nosotros, m¨¢s convivencia entre ciudadanos, m¨¢s ¨¢reas verdes, menos accidentes de tr¨¢fico, menos ruido y mejor calidad del aire. Una ciudad a una velocidad m¨¢s humana (de peatones, ciclistas y transporte p¨²blico) podr¨¢ convertirse en una urbe m¨¢s amigable y saludable para ni?os y adultos y ofrecer una mejor calidad de vida.

Es hora de que los urbanistas y las autoridades de transporte, salud y medioambiente colaboren y dediquen m¨¢s esfuerzos para crear modelos de ciudad y movilidad m¨¢s saludables.

David Rojas-Rueda y Mark Nieuwenhuijsen son investigadores del Centro de Investigaci¨®n en Epidemiolog¨ªa Ambiental (CREAL), centro aliado del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). Ambos participar¨¢n en la IV Conferencia Internacional City Health, que tendr¨¢ lugar en CosmoCaixa Barcelona los d¨ªas 5 y 6 de noviembre.