Soy bajo para mi peso

Cualquiera que contemple mi silueta abotijada caer¨¢ en la cuenta de lo evidente: tengo un problema de altura, es decir, soy bajo para mi peso. Si quiero conseguir una apariencia m¨¢s esbelta, tambi¨¦n es evidente lo que tengo que hacer: crecer. Con a?adir 20 o 30 cent¨ªmetros a mi estatura ser¨ªa suficiente para lucir palmito. Evidente.

Este tipo de razonamiento puede parecer peculiar, pero se utiliza con frecuencia en los ¨¢mbitos m¨¢s diversos. Sin ir m¨¢s lejos, en un editorial reciente de este peri¨®dico titulado Debate sobre las pensiones, ya. A este debate quiero contribuir yo hoy. Tras constatar que la Seguridad Social tiene un desequilibrio entre ingresos y gastos ¡ªque yo cuantifico en unos 21.000 millones de euros anuales¡ª, el editorialista afirma que ¡°es evidente que a corto, medio y largo plazo el problema [de las pensiones] es de ingresos¡±. Evidente, evidente, evidente. ?Evidente??No ser¨¢ que el presupuesto de la Seguridad Social tambi¨¦n es bajo para su peso?

La demograf¨ªa incide tanto sobre los ingresos como sobre los gastos del sistema de pensiones. El empinamiento de las pir¨¢mides de poblaci¨®n causa que un n¨²mero decreciente de trabajadores activos tenga que financiar con sus cotizaciones las pensiones de un n¨²mero creciente de pasivos. Estos ¨²ltimos, adem¨¢s, tienen esperanzas de vida cada vez m¨¢s largas: en Espa?a, la esperanza de vida a los 65 a?os crece a un ritmo de tres horas diarias. Este es el problema de las pensiones: decrecen los ingresos y aumentan los gastos. Hace m¨¢s de 30 a?os que se sabe que esto iba a ocurrir, porque la demograf¨ªa es una ciencia bastante precisa, pero los sindicatos y determinados grupos de izquierda se han negado siempre a reconocer estas tendencias cada vez m¨¢s obvias, quiz¨¢ porque no las encuentran evidentes. Abordar la reforma de las pensiones con tres d¨¦cadas de retraso va a tener un coste social muy grande. Se ha dejado crecer el problema hasta hacerlo gigantesco.

?Podemos subir los ingresos del sistema para hacer frente a la tendencia creciente de los gastos? ?Subimos, quiz¨¢, las cotizaciones sociales? Sobre el papel, que lo aguanta todo, podr¨ªa hacerse, subiendo el actual tipo sobre salario bruto del 33% al 50% o al 70%, pero eso encarecer¨ªa mucho el factor trabajo, provocar¨ªa un gran aumento del desempleo y de la participaci¨®n laboral. No es una buena idea. ?Miramos entonces de orde?ar otras tetillas de la vaca subiendo los impuestos generales ¡ªIVA, IRPF, Patrimonio, etc¨¦tera¡ª para financiar algunos gastos del sistema contributivo como, por ejemplo, las pensiones de viudedad? Genial idea, pero hay un peque?o detalle: la vaca tendr¨¢ varias tetillas, ?pero hay una sola vaca! Y no puede dar mucha m¨¢s leche que la que da.

Sin excluir medidas puntuales que puedan incrementar los ingresos de la Seguridad Social, es ilusorio pensar que solo con medidas por el lado del ingreso se arreglar¨¢ el problema de las pensiones. Hay que actuar sobre el gasto, y esto es lo que, con diversa contundencia, han hecho los Gobiernos de Zapatero y de Rajoy. En el ¨²ltimo caso, el procedimiento ha sido ejemplar: el punto de partida fue un informe de una comisi¨®n de expertos de distintas sensibilidades pol¨ªticas que fue aprobado con un ¨²nico voto en contra de entre los 12 miembros que la formaban. El Gobierno transform¨® el informe en ley con muy pocas modificaciones. Este es el camino a seguir para futuras reformas estructurales en Espa?a.

De manera similar a lo que est¨¢ ocurriendo con la otra gran reforma de la legislatura reci¨¦n terminada, la reforma laboral, que est¨¢ siendo torpedeada por los jueces vinculados a los sindicatos, tambi¨¦n la reforma de las pensiones est¨¢ siendo sometida a ataques para vaciarla de contenido. Concretamente, circulan propuestas para que las pensiones de viudedad, que son contributivas, se financien con cargo al presupuesto del Estado, como si fueran no contributivas. Si eso se hiciera, el presupuesto de la parte contributiva mostrar¨ªa un super¨¢vit, situaci¨®n que podr¨ªa ser aprovechada por los sindicatos para reclamar incrementos de las pensiones contributivas. Es todo un artilugio contable porque, como ya he dicho, hay una sola vaca y un solo sistema tributario. Ese super¨¢vit ser¨ªa pura ficci¨®n. Es m¨¢s, esta operaci¨®n acelerar¨ªa la crisis del sistema y agravar¨ªa la injusticia intergeneracional exigiendo a los m¨¢s j¨®venes mayor aportaci¨®n a un sistema insostenible.

C¨¦sar Molinas, matem¨¢tico y economista, est¨¢ escribiendo un libro sobre el futuro del empleo en Espa?a, patrocinado por la Fundaci¨®n de Estudios Financieros.