Intervenir
La tarea ahora es ir recogiendo los restos de nuestros fracasos y errores e intentar construir una respuesta efectiva
En Irak se intervino con tropas terrestres y fue un desastre. En Libia se intervino solo con medios a¨¦reos y tambi¨¦n fue un desastre. Y en Siria no se intervino ni con tropas ni desde el aire, prefiriendo armar a los opositores, y el desastre ha sido a¨²n mayor. Los iraqu¨ªes se libraron de un dictador, s¨ª, pero a costa de la destrucci¨®n del Estado, la violencia sectaria y fragmentaci¨®n del pa¨ªs en tres comunidades (sun¨ªes, chi¨ªes y kurdos). En Libia cay¨® otro dictador, a¨²n m¨¢s sanguinario, pero el pa¨ªs tambi¨¦n se ha desintegrado. Y en Siria, el dictador no solo no ha ca¨ªdo sino que ha perpetrado una gigantesca matanza, dejando tras de s¨ª un ¨¦xodo sin precedentes y un brutal vac¨ªo de poder.
?Pod¨ªamos no haber intervenido de ninguna manera en ninguno de los tres escenarios? No lo parece ?Pod¨ªamos haber hecho algo distinto, o mejor? Seguramente. Pero ya es demasiado tarde. En los tres casos, los vac¨ªos de poder han sido aprovechados por el terrorismo yihadista para hacerse con el control de territorios, recursos econ¨®micos y armas con los que imponer su r¨¦gimen de terror a los propios iraqu¨ªes, libios o sirios, para luego extenderlo a Europa y a otros pa¨ªses del Norte de ?frica v¨ªa la captaci¨®n, entrenamiento y devoluci¨®n de j¨®venes radicalizados.
La inmensa ola de inestabilidad generada en la regi¨®n ha confluido sobre Europa en dos formas: por un lado, como una crisis de asilo y refugio de una magnitud desconocida hasta ahora, y, por otro, como una amenaza terrorista sin precedentes. Como demuestran los ataques en Par¨ªs, diagnosticar acertadamente los errores cometidos no nos libra de tener que lidiar con sus consecuencias. Al contrario, nos se?ala la ausencia de soluciones f¨¢ciles. La tarea ahora es ir recogiendo los restos de nuestros fracasos y errores e intentar construir una respuesta efectiva: dar asilo y refugio, reforzar los medios policiales y judiciales, mejorar la captaci¨®n de inteligencia, activar la diplomacia para forzar una negociaci¨®n, hostigar al Estado Isl¨¢mico en sus bases, cortar sus finanzas y suministros y apoyar a los que luchan contra ¨¦l. No parece que haya muchas m¨¢s opciones. @jitorreblanca
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