Rajoy viste fatal y Rivera es un hortera: el estilo de los pol¨ªticos, a juicio

Mi est¨¦tica, por lo menos hoy, est¨¢ muy bien. Muestra que soy una persona intelectualmente capaz; quiz¨¢s por mis gafas, que son vintage pero a la vez actuales. El jersey que llevo, adem¨¢s, es de calidad, y transmite bienestar y confianza. Todo esto no lo digo yo, lo dice Patrycia Centeno, que lleva casi diez a?os analizando las prendas de nuestros representantes tanto en su p¨¢gina Pol¨ªtica y Moda como en sus redes sociales. ¡°Cuando estaba preparando mi tesina final de master, Pol¨ªticos: De los pies a la cabeza, me puse en contacto con algunos partidos pol¨ªticos para saber qui¨¦n se encargaba del estilismo durante la campa?a, y siempre eran los mismos que llevaban la web, o los que montaban la escenograf¨ªa. La comunicaci¨®n de las formaciones ha cambiado mucho, hasta el punto de que yo en la actualidad me dedico a la asesor¨ªa de formaciones y de candidatos pol¨ªticos¡±. Por decoro profesional, Patrycia prefiere no desvelar qui¨¦n ha solicitado sus servicios como asesora de imagen, pero es de dominio p¨²blico, para cualquier usuario de Twitter, que sus an¨¢lisis llegan a algunas de las caras m¨¢s conocidas de nuestra pol¨ªtica. El popular Xavier Garc¨ªa Albiol, por ejemplo, es uno de los que no se ha cortado a la hora de responder, desde su cuenta personal, a los tweets m¨¢s divertidos e incendiarios de la periodista.

Capaz de dedicarle un post entero al pulgar de la catalana In¨¦s Arrimadas, Centeno tiene las ideas muy claras sobre qui¨¦nes son los pol¨ªticos mejor vestidos de nuestro pa¨ªs. ¡°?Conoces a Xos¨¦ Beiras? Es un pol¨ªtico gallego; corpulento; con el pelo como el dios Zeus. Para m¨ª es de los que mejor visten. De izquierdas te dir¨ªa Xose Veiras y de derechas Dur¨¢n i Lleida, que sabe adaptar muy bien las tendencias. En las CUP tambi¨¦n visten muy bien¡±. Frenazo. ?Las CUP no era ese partido independentista al que los medios tachan de lucir est¨¦tica borroka, cuando no directamente de guarros? ¡°La ropa tiene que ir en sinton¨ªa con el discurso, no atraerme a m¨ª est¨¦ticamente. Yo no me vestir¨ªa como un militante de las CUP, para empezar porque no lo soy; por no decir que me considero una consumista casi compulsiva. Pero te aseguro que pol¨ªticos como David Fern¨¢ndez saben muy bien lo que se ponen. No puedes tener un discurso como el suyo y llevar prendas que no cumplan con ciertas condiciones medioambientales; prendas con dise?os copiados de los de otros dise?adores; ropa fabricada por obreros que han sido explotados. Para que yo considere que alguien viste bien, tengo que valorar si existe una coherencia entre el mensaje verbal y el no verbal. Y eso, por el momento, la CUP lo cumple¡±. Tenga o no relaci¨®n, Centeno confiesa que, aunque ella se sit¨²a en las ant¨ªpodas del independentismo, el portavoz de la CUP Antonio Ba?os es su amor plat¨®nico-pol¨ªtico. ¡°Cuando la izquierda ha conseguido que toda la derecha se quite la corbata, llega este hombre y se pone una, adem¨¢s de un chaleco. Me parece de lo m¨¢s transgresor¡±.

No se puede nadar m¨¢s a contracorriente que la autora de Pol¨ªtica y Moda: con todos los medios alabando el porte de Albert Rivera y los pol¨ªticos de Ciudadanos, Centeno los tilda de tener ¡°una est¨¦tica ESADE, pero dejada de la mano de Dios¡±. En lucha perpetua contra las coderas, y de la misma forma que la periodista tiene claros los pol¨ªticos cuya est¨¦tica m¨¢s admira, tampoco titubea cuando se le pregunta por los peor vestidos. ¡°Por responsabilidad pol¨ªtica, te dir¨¦ que el que me parece peor es Mariano Rajoy. Un Presidente del Gobierno no puede permitirse el lujo de ir como va este hombre; deber¨ªa ser denunciable. Y eso que los hombres de derechas lo tienen f¨¢cil, porque es sota, caballo y rey, o lo que es lo mismo: traje, camisa y corbata. Porque del pelo ya ni hablamos: no se puede ser conservador y llevar esas gre?as. Es desastroso hasta un punto de darme pena. Cuando sale fuera y se pone al lado de l¨ªderes internacionales, la cosa se agrava, porque est¨¦ticamente todos le dejan en evidencia. Y lo peor de todo es que ya no s¨®lo se presenta de esa forma a s¨ª mismo, o a sus partido, sino que representa a todos sus ciudadanos¡±.

Declaraciones como ¨¦stas pueden reforzarse si consultamos el libro Espejo de Marx, publicaci¨®n con la que Patricya ya intentara desmontar el mito de que los conservadores monopolizan la elegancia. ¡°Eso es un prejuicio que ha creado la derecha y el poder, pero la izquierda jam¨¢s ha vestido mal. De hecho, ha sido la izquierda, a lo largo de la Historia, la que ha marcado las tendencias dominantes, ya desde la Revoluci¨®n Francesa con los sans culottes, marcando un estilo que m¨¢s tarde adaptar¨ªa la derecha, y que ha prevalecido hasta nuestros d¨ªas. Lo realmente dram¨¢tico no es que los conservadores hicieran suyo el traje, la camisa y la corbata, sino que, en favor de un centralismo pol¨ªtico, la izquierda recuperase ese uniforme en los a?os ochenta. Por eso todos los pol¨ªticos nos parec¨ªan el mismo, hasta que lleg¨® el 15 M y su no-nos-representan, consigna que tambi¨¦n puede leerse en clave est¨¦tica. Ahora ese estilismo hegem¨®nico est¨¢ retrocediendo, hasta el punto de que un partido como el PP lleg¨® a pedir en las ¨²ltimas elecciones que todos sus candidatos fueran con vaqueros; deportivas; m¨¢s casual, en definitiva¡±.

Pol¨ªtica y Moda, activo de 2007, fue una avanzadilla al car¨¢cter l¨²dico que terminar¨ªa tomando la pol¨ªtica nacional. ¡°S¨ª es verdad que ahora mismo el panorama pol¨ªtico parece S¨¢lvame, pero no ser¨ªa as¨ª si ellos no se prestaran a todos los juegos que les proponen. Sobre el baile de Miguel Iceta, yo creo que incluso le ayud¨® electoralmente. Los que luego quisieron imitarlo, tambi¨¦n te digo, parece que piensan que el electorado es gilipollas¡±. Utilizando los meneos de ombligo socialistas, aprovecho para preguntarle por los que nos regal¨® Obama. ¡°Cuando Obama se pone a bailar, todo su equipo lo sabe. Y, si no lo sabe, por lo menos saben que va a hacerlo bien. Adem¨¢s, Obama tiene una inteligencia emocional y una sensibilidad con la que seducir a sus ciudadanos. Creo que es uno de los m¨¢ximos exponentes de la feminizaci¨®n que est¨¢ experimentando la pol¨ªtica. En mujeres, evidentemente, tambi¨¦n podemos encontrar ejemplos claros de esto. Pienso en S¨¦gol¨¨ne Royal en las presidenciales francesas de 2007, por ejemplo¡±.

Aunque Pol¨ªtica y Moda se centre a d¨ªa de hoy ¨²nicamente en agentes actuales, Centeno tambi¨¦n tiene sus propias debilidades en lo que a personajes hist¨®ricos se refiere. ¡°Me encanta Salvador Allende, que dec¨ªa que la revoluci¨®n no necesitaba hombres mal vestidos, sino hombres conscientes. ?l era de familia bienestante y defendi¨® una est¨¦tica cl¨¢sica, pero a la vez desclasada. Winston Churchill tambi¨¦n estaba a a?os luz del resto, y Stalin, en su contexto, vest¨ªa s¨²per bien. Incluso Hitler, cuyo modo de vestir ha servido de inspiraci¨®n a un mont¨®n de dise?adores. Los grandes l¨ªderes que pasan a la historia, para bien o para mal, tienen una est¨¦tica muy particular. Los otros no¡±.