El nuevo emblema de Par¨ªs contra el terrorismo
Ciudadanos y turistas visitan la Plaza de la Rep¨²blica para recordar a las v¨ªctimas
La plaza de la Rep¨²blica de Par¨ªs es un tradicional punto de encuentro de la izquierda y de movimientos como el street art. Situada en una zona a¨²n c¨¦ntrica pero popular fue el elegido por el Gobierno socialista de Fran?ois Hollande para organizar el 11 de enero de 2015 la manifestaci¨®n de repulsa al terrorismo a la que acudieron decenas de mandatarios y centenares de miles de ciudadanos. Hollande quiso inaugurar un nuevo movimiento de unidad pol¨ªtica, bautizado como El esp¨ªritu del 11 de enero, resiliente broche a los atentados de Charlie Hebdo y el Hypercacherde comida jud¨ªa, pero su iniciativa fue muy contestada. Demasiado oficialista como para generar un nuevo s¨ªmbolo.
Los atentados de noviembre, en los que murieron 130 personas, cambiaron las cosas. De manera espont¨¢nea, miles de ciudadanos han convertido esa plaza en el epicentro ciudadano del rechazo al terror y, de paso, de ensalzamiento de los valores de la Rep¨²blica. Varios son los elementos que juegan a su favor. El centro de la plaza lo ocupa una escultura de Marianne, alegor¨ªa republicana de Francia. La tr¨¢gica noche del 13 de noviembre los ecos de las balas y los cinturones explosivos tronaron cerca. En la plaza nace el bulevar Voltaire, donde se sit¨²a la atacada sala de fiestas Bataclan. No lejos se hallan las terrazas ametralladas. Cerca est¨¢ tambi¨¦n la antigua sede de Charlie Hebdo.
El 14 de noviembre la plaza inici¨® su nueva andadura como lugar espont¨¢neo de encuentro y homenaje. Velas, fotos, poemas y flores rodearon a Marianne. Lo que no logr¨® Hollande lo hizo la gente corriente. Los medios destacan la transformaci¨®n del lugar, escenario de ofrendas a las v¨ªctimas como la de Johnny Hollyday el domingo pasado. Y los turistas se desv¨ªan de las sendas oficiales para ver las huellas del terror. Se hacen selfies frente al Bataclan e inspeccionan la zona con impudor, lo que escandaliza a los parisinos. Temen que la ciudad museo se convierta en una ciudad mausoleo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Opini¨®n
- Atentado Charlie Hebdo
- Charlie Hebdo
- Libertad prensa
- Atentado Par¨ªs 13-N
- Par¨ªs
- Humor gr¨¢fico
- Sala Bataclan
- Estado Isl¨¢mico
- Atentados mortales
- Atentados terroristas
- Francia
- Terrorismo islamista
- Conflicto Sun¨ªes y Chi¨ªes
- Yihadismo
- Europa occidental
- Prensa
- Islam
- Grupos terroristas
- Sucesos
- Medios comunicaci¨®n
- Europa
- Terrorismo
- Religi¨®n
- Comunicaci¨®n