Porno en catal¨¢n: la aut¨¦ntica independencia

El dirty talk en catal¨¢n, incluso para los catalanohablantes, sigue estando por normalizar. Invitar a la pareja sexual a chupar y comer zonas er¨®genas, utilizando para ello una traducci¨®n literal de f¨®rmulas en castellano, hace que ¨¦stas pierdan, por el camino, toda su furia semental. Esa pr¨¢ctica -la traducci¨®n literal de cochinadas- se realiza m¨¢s en tabernas que en lechos; la risa mata, por decirlo de alg¨²n modo, la libido.

El primer intento, en este concreto, de romper tab¨²es, fue la pel¨ªcula de Conrad Son Les Exxcursionistes Calentes, lanzada en video hace ya m¨¢s de quince a?os. Pieza de culto pr¨¢cticamente imposible de encontrar en formato f¨ªsico, es generosa en l¨ªneas de di¨¢logo como ¡°Eso son monta?as y no las de Collserola¡± o ¡°Eso es un t¨²nel y no el del Cad¨ª¡±; frases que, en su versi¨®n original, todav¨ªa perduran en el imaginario onanista de los millenials catalanes.

Aunque el paso que dio Conrad Son es meritorio, es evidente para el espectador que Les Exxcursionistes Calentes est¨¢ doblada al catal¨¢n, no rodada en catal¨¢n. Esto, sin embargo, fue suficiente para que la producci¨®n recibiese, de manos de la Generalitat de Catalu?a, una subvenci¨®n que rondaba los 15.000 euros. Por otro lado y hace ahora dos a?os, la Generalitat decidi¨® apoyar de nuevo al cine para adultos otorgando una subvenci¨®n a Porno Catal¨¤, primer portal de contenido er¨®tico rodado en catal¨¢n; con jadeos emitidos, esta vez s¨ª, en el propio set de rodaje.

El t¨ªtulo con el que la p¨¢gina abri¨® fuego se titula Jo Mai Mai (Yo nunca jam¨¢s) y era una parodia de Barcelona, noche de Verano, pel¨ªcula catalana cuyo estreno all¨¢ por 2013 se convirti¨® en el evento del verano. La factura del v¨ªdeo, para los c¨¢nones del cine porno nacional, era m¨¢s que encomiable. No en vano, tanto Dani de la Orden como Felix Colomer, director de Barcelona, noche de Verano uno e impulsor de Porno Catal¨¤ otro, cursaron los estudios de direcci¨®n cinematogr¨¢fica en la prestigiosa escuela ESCAC.

Pero, ?cuentan todos los v¨ªdeos de Porno Catal¨¤ con el mismo virtuosismo? El portal tambi¨¦n nos brinda producciones de aire low cost, como Jaume I el Conyqueridor (Jaime I el Co?quistador), donde el que fuera rey de Arag¨®n viaja en el tiempo a trav¨¦s de un hula-hoop (sic) para ir a 1458, tomar a Isabel I, y acostarse con ella en 2013. ?l lleva reloj digital y ella Iphone. Nada m¨¢s llegar a la ¨¦poca contempor¨¢nea, se encuentran con un magreb¨ª que les intenta vender cerveza en lata, antes de ser espantado por el conde de Barcelona: ¡°Pensaba que hab¨ªa acabado con todos en la conquista de Mallorca¡±. Luego, claro, se desvisten.

Tambi¨¦n jugaron con los desv¨ªos hist¨®ricos en Oh D¨¦u Meu: El qu¨¨ no explica La B¨ªblia (Oh Dios m¨ªo: lo que no explica La Biblia). En ese what if que es La ¨²ltima tentaci¨®n de Cristo -m¨¢s tarde adaptada al cine por Martin Scorsese-, Nikos Kazantzakis dibuja un paisaje en el que, entre otras cosas, Jesucristo y Mar¨ªa Magdalena establec¨ªan una relaci¨®n sentimental. Los art¨ªfices de Porno Catal¨¤ van un paso m¨¢s all¨¢ que el escritor griego y ponen a retozar a estos personajes b¨ªblicos en la orilla de una playa, justo despu¨¦s de entonar frases como ¡°?Quieres ver un milagro?¡± o ¡°Ya puedes comer del cuerpo de Cristo¡±.

Sin mantenerse neutrales a la situaci¨®n pol¨ªtica que vive Catalu?a, Porno Catal¨¤ se posicion¨® a favor del independentismo desde el primer momento: un pene antropom¨®rfico con una estelada a modo de capa es el logotipo del sitio web. Tambi¨¦n podemos observar toma de posiciones pol¨ªticas en los propios v¨ªdeos de la p¨¢gina: en su pieza K-313, una pareja mantiene sexo casual en un piso donde, adem¨¢s del escudo del Bar?a, la bandera de los nacionalistas catalanes casi consigue restar protagonismo al trabajo de los actores.

Es en la secci¨®n de relatos, sin embargo, donde encontramos el mejor ejemplo de esta conjunci¨®n entre erotismo y compromiso pol¨ªtico. En el cuento Una diada especial, situado en el contexto de un viaje en autocar -uno de los muchos que llevaban a la gente, hace ahora dos a?os, a su punto asignado en la V¨ªa Catalana-, la voz en primera persona del narrador relata, en primera instancia, el crush que tiene con la desconocida a la que le toca dar la mano en dicha convocatoria; en segunda, explica la vuelta al autocar, con todos los pasajeros dormidos, excepto ellos, que acaban practicando sexo oral.

Con una actividad este a?o pr¨¢cticamente testimonial, reducida casi por completo a actualizar sus redes sociales, quiz¨¢s el mayor acto de normalizaci¨®n de Porno Catal¨¤ haya sido dar espacio a un sector tan poco atendido -si hablamos de entretenimiento s¨®lo para adultos hecho aqu¨ª- como es el gay. Relatos como Prejudicis (Prejuicios) fueron la avanzadilla a plataformas como Gais i Lesbianes per la Independencia, una asamblea soberanista y dependiente de la ANC que cada vez est¨¢ tomando m¨¢s fuerza entre el colectivo LGTB catal¨¢n.