Dada¨ªsmo
Desde que la cultura anglosajona manda, el ¨²nico idioma respetable es el ingl¨¦s, incluso en Espa?a, donde la mitad de la poblaci¨®n no lo hablamos
Se escandaliza mi paisano y colega Jos¨¦ Mar¨ªa Merino, como acad¨¦mico de la Lengua Espa?ola que es, de que la canci¨®n que nos representar¨¢ este a?o en el Festival de Eurovisi¨®n est¨¦ escrita en ingl¨¦s. ¡°Por m¨ª, no llevar¨ªa una sola palabra en espa?ol¡±, le replic¨® su int¨¦rprete, una tal Barei, cuando le preguntaron su opini¨®n sobre la declaraci¨®n del acad¨¦mico, que hab¨ªa calificado el hecho de ¡°sorprendente estupidez¡±, aludiendo a que los coros ser¨¢n cantados en nuestro idioma.
A eso se llama estar segura de una. Es m¨¢s, la respuesta de la cantante eurovisiva deber¨ªa ser estudiada en nuestros colegios como ejemplo de esa seguridad intelectual que nuestro pa¨ªs demuestra a la hora de considerar el castellano inferior al ingl¨¦s en una demostraci¨®n de complejo de inferioridad hist¨®rico que se disfraza de cosmopolitismo. Solamente hablando el idioma de los que mandan uno se equiparar¨¢ con ellos, como ¨²nicamente adoptando las formas y las costumbres de las clases altas las bajas pueden so?ar que tambi¨¦n lo son.
Desde que tengo uso de raz¨®n, sobre todo en la m¨²sica el ingl¨¦s es el idioma dominante contradiciendo aquella antigua creencia de que el franc¨¦s era la lengua del amor, el italiano la de la ¨®pera, el ingl¨¦s la de los negocios y el alem¨¢n la de la guerra. Desde que la cultura anglosajona manda, tanto para el amor como para la guerra, y no digamos ya para los negocios, el ¨²nico idioma respetable es el ingl¨¦s, incluso en pa¨ªses como Espa?a, donde la mitad de la poblaci¨®n no lo hablamos. No digo que sea el caso de Barei, que, por lo que he le¨ªdo, es de muy buena familia y habr¨¢ estudiado el idioma de Shakespeare en colegios internacionales, lo que le garantiza una pronunciaci¨®n exquisita, pero s¨ª de la mayor¨ªa de las personas que votaron por ella y por su canci¨®n en el concurso televisivo de selecci¨®n del candidato a representarnos en Eurovisi¨®n; lo cual nos lleva a pensar que lo que m¨¢s les gust¨® de la canci¨®n es que, al estar en ingl¨¦s, no entendieron la letra, lo cual se valora mucho en este pa¨ªs. La prueba fue el La, la, la, nuestro primer gran ¨¦xito eurovisivo, cuyo t¨ªtulo lo dice ya todo, y ya fuera del Festival de Eurovisi¨®n, con esa otra cumbre del dada¨ªsmo espa?ol titulada, qui¨¦n sabe por qu¨¦ genio de las letras, Aserej¨¦.
Que el espa?ol sea el cuarto idioma m¨¢s hablado en el planeta o que este a?o se celebre el 400? aniversario de la muerte de Cervantes son solo an¨¦cdotas sin importancia ante esos hitos culturales que a los directivos de Televisi¨®n Espa?ola les traen al pairo, naturalmente.
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