Cambiar el mundo
Si a cualquiera de nosotros nos preguntasen si nos gusta el mundo en que vivimos, seguramente contestar¨ªamos que no. El problema es que si a continuaci¨®n nos preguntasen si estamos haciendo algo para mejorarlo, probablemente responder¨ªamos tambi¨¦n que no. Pobreza, contaminaci¨®n, guerras¡ son tambi¨¦n la causa de nuestra desidia y desinter¨¦s. El mundo puede arder a nuestro alrededor, que nosotros seguiremos votando a los que le prenden fuego. A todos esos l¨ªderes civilizados para quienes el crecimiento econ¨®mico est¨¢ por encima de los millones de vidas humanas que cada a?o se ahogan entre el hambre y las alambradas. L¨ªderes amables y cercanos, razonables y eficaces. Educados. Ellos son los primeros responsables de este mundo salvaje y ego¨ªsta, violento e irracional. Consecuencia directa de un capitalismo al que, seg¨²n parece, nadie se atreve a toser.¡ª Pablo Gonz¨¢lez Caballero
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