Mujeres en camino

Llega un nuevo D¨ªa Internacional de la Mujer con estad¨ªsticas elocuentes sobre lo mucho que queda para superar la brecha en el mundo laboral, la academia o la empresa. Pero este a?o, el s¨ªmbolo lacerante de la jornada son mujeres ateridas de fr¨ªo que avanzan con sus hijos por los bosques, camino del para¨ªso europeo; mujeres de todas las edades varadas en las tiendas de los campos de refugiados de L¨ªbano o Turqu¨ªa; mujeres viudas que huyen con hijos y ancianos de las ciudades sirias devastadas por la guerra; mujeres y ni?as que se protegen de los gases lacrim¨®genos lanzados por la polic¨ªa macedonia para impedirles que crucen la frontera; mujeres que esperan, solas o con su familia, en los centros de refugiados de Alemania, a que alguien decida cu¨¢l va a ser su destino...

Todas ellas sufren un doble riesgo, por su condici¨®n de fugitivas y por el hecho de ser mujeres, lo que las expone a violencia sexual y explotaci¨®n. El 27% de todos los migrantes que han solicitado asilo en la UE son mujeres, pero hay m¨¢s en camino. Muchas otras no han tenido tanta suerte y han muerto en los bombardeos o en la traves¨ªa, o se han convertido en esclavas sexuales, como las ni?as secuestradas por el grupo radical Boko Haram en ?frica, o las m¨¢s de 3.000 mujeres yazid¨ªes apresadas por combatientes del Estado Isl¨¢mico.

Las mujeres sue?an con llegar a una Europa avanzada y humanitaria que, sin embargo, duda y se resiste a mantener la acogida que hasta ahora constitu¨ªa una de sus se?as de identidad. Una Europa donde las mujeres est¨¢n infinitamente mejor que las que llegan, pero en la que a¨²n aspiran a una paridad que no acaba de llegar pese a las leyes promulgadas y la evidencia de lo mucho que pierde por no tenerla: el FMI estima que si se lograra superar la brecha de g¨¦nero en el mundo laboral y de la empresa el PIB europeo crecer¨ªa un 12% adicional en 15 a?os.