La revancha digital de los mayores

M¨¢s all¨¢ de las cifras y los porcentajes, que casi siempre lo detallan todo, a veces una simple frase de 29 palabras puede resultar mucho m¨¢s explicativa: ¡°Internet se configura como un medio esencial en la realizaci¨®n de todo tipo de actividades y su uso ya empieza a estar interiorizado en todos los segmentos de edad¡±. Esa es una de las principales conclusiones que arroja el estudio La sociedad de la informaci¨®n en Espa?a 2015, la ¨²ltima entrega ¡ªya van 16 ediciones¡ª del mejor an¨¢lisis que se publica sobre el uso de las tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n en el pa¨ªs, de la mano de la Fundaci¨®n Telef¨®nica. De esta forma resume c¨®mo se est¨¢ cerrando la brecha de edad en la utilizaci¨®n de los servicios de Internet, la m¨¢s importante que desde el principio ha tenido que afrontar, como el texto recuerda.

En la franja de edad de los 55 a los 64 a?os los usuarios de la Red se elevaron el a?o pasado al 61,4%. Quedan lejos de los muchachos de los 16 a los 24, que se acercan al 100%, pero es que hace seis a?os ¡ªanteayer, vamos¡ª eran solo el 34,6%, y los chicos, el 63,5%. As¨ª que son ¡ªsomos¡ª los baby boomers, bimillenials o cualquier otra mejorable expresi¨®n inglesa que usted quiera utilizar los que, curiosamente, en mayor medida se est¨¢n convirtiendo a la nueva ¨²nica religi¨®n verdadera.

La imagen de una persona de edad ¡ªpor cierto, trampas del lenguaje, una joven de 17 a?os, por ejemplo, tambi¨¦n es una persona de edad: 17 a?os, en su caso¡ª empleando su m¨®vil para consultar una web, reservar un billete de autob¨²s o cerrar una cita m¨¦dica ha dejado de ser una originalidad fotogr¨¢fica para convertirse en una realidad cotidiana a medida que el uso de las nuevas tecnolog¨ªas en relaci¨®n con la vejez ha ido pasando de la figura de una pir¨¢mide a la del cubo. Ese cambio ha venido en buena medida de la mano de una Administraci¨®n o unas empresas (bancos, grandes almacenes, agencias de viajes, compras y servicios sin fin¡­) que cada vez han ofrecido mayores facilidades, en ocasiones exigencias, para realizar cualquier operaci¨®n v¨ªa digital. As¨ª que la clave del desarrollo era la transferencia bancaria y no la foto del cachorrito de tu prima o el culo de alguna Kardashian¡­

Como el informe precisa, en ese segmento 55-64 la brecha generacional casi se ha cerrado el a?o pasado en lo relativo a las actividades relacionadas con la productividad. E incluso en cuestiones como operar con las Administraciones su nivel de acceso est¨¢ por encima de la media general (el 46,7% de los internautas de este segmento, dos d¨¦cimas por encima del conjunto de la poblaci¨®n). Con estos datos sobre la mesa y si la apuesta es cerrar ese salto en todos los aspectos, esos Gobiernos tan aficionados a lucirse como 2.0, 3.0 (y sigue la cuenta) quiz¨¢ deber¨ªan esforzarse en minucias como mejores capacidades tecnol¨®gicas a disposici¨®n del ciudadano, extensi¨®n del wifi... Ni el mayor tecn¨®fobo cuestionar¨¢ que Internet es ya un producto de primera necesidad y su IVA deber¨ªa responder a ello. Claro que la luz tambi¨¦n es de primera necesidad y se clava al 16%...