'Sneakerheads': devotos de las zapas de edici¨®n limitada

Si eres una de esas personas cuya demencia por las zapatillas alcanza una devoci¨®n tan desorbitada como adorable, tienes una cita este fin de semana en Dashape. La cuarta edici¨®n de esta feria ¨Cque el pasado a?o cont¨® con 5.000 asistentes¨C? sobre cultura sneaker se celebrar¨¢ en la Estaci¨®n de Chamart¨ªn los d¨ªas 6 y 7, y promete ser el punto de reuni¨®n entre los sneakerheads ¨Co lo que es lo mismo: cazadores de zapatillas¨C que buscan conseguir a toda costa novedades, modelos cl¨¢sicos y ejemplares absolutamente ¨²nicos.

Entre los expositores de este a?o est¨¢n Jomita, de Barcelona; Jace y Alberto Khorde, de Madrid y Nonkski, deAmsterdam. Adem¨¢s, intenvendr¨¢n artistas como Suso 33, Rebeca Khamlichi o Selector Marx, entre otros, y habr¨¢ sesiones de dj. Pero no todo iba a ser consumismo desmedido en Dashape. Este a?o, habr¨¢ una campa?a solidaria de recogida de zapatillas que se realizar¨¢ en favor de la ONG Dianova. La organizaci¨®n, que opera en 11 pa¨ªses de Europa y Am¨¦rica, destinar¨¢ el calzado recogido a proyectos de atenci¨®n humanitaria tanto de asilo como de asistencia.

Este idilio de los seres humanos con las zapatillas se remonta a la cultura del grafiti y el hip hop que comenz¨® a despegar en Nueva York a mediados de la d¨¦cada de los 70. Las zapatillas eran c¨®modas para salir por ah¨ª a pintar vagones de metro pero tambi¨¦n lo eran para bailar y, por supuesto, para jugar al baloncesto. Uno de esos primeros modelos que despert¨® la locura de los sneakerheads fueron las Adidas Superstars y las Puma Suede Classic. Modelos que aparecen en el documental Locos por las zapas (2005) demostrando que las zapatillas no solo eran una herramienta est¨¦tica sino que se erig¨ªan como elemento semi¨®tico que otorgaba estatus a los miembros de las diferentes tribus urbanas.