M¨¢s educaci¨®n, menos conflictos
PorSara Garc¨ªa de Blas y Valeria M¨¦ndez de Vigo(@vmendezdevigo), de @Entreculturas. En estos d¨ªas est¨¢ teniendo lugar en Estambul la Cumbre Mundial Humanitaria.
Estudiantes sirias refugiadas en L¨ªbano. Foto: Entreculturas.
¡°En Alepo estaban cerradas todas las escuelas. Estaba feliz y emocionada por salir del pa¨ªs¡±, cuenta Israa Cheikh Karrouch, de 15 a?os, estudiante en uno de los programas educativos que gestionamosen L¨ªbano. Israa es una de los44 millones de ni?os y ni?as en pa¨ªses asolados por conflictos armados que no est¨¢n escolarizados. Una de cada cuatro personas solicitantes de asilo en Europa tiene menos de 18 a?os. Hay ni?os y ni?as que no pisan el colegio desde que comenz¨® el conflicto armado en Siria, hace ya cinco a?os.
La Uni¨®n Europea firm¨® el 18 de marzo un acuerdo con Turqu¨ªa en el que se acord¨®, entre otras medidas, devolver a este pa¨ªs a las personas inmigrantes y refugiadas que lleguen a Grecia. Pero Turqu¨ªa est¨¢ sobrecargada ¨Cacoge a casi tres millones de personas sirias que han huido de la barbarie- y no tiene capacidad para garantizar el derecho a la educaci¨®n de todos los ni?os y ni?as refugiados. De hecho, en el curso actual, unos 400.000 mil ni?os y ni?as sirios se han quedado sin educaci¨®n en Turqu¨ªa. Algunos padres no saben si sus hijos pueden matricularse en la escuela o no saben c¨®mo hacerlo. Los ni?os y ni?as afrontan m¨²ltiples dificultades al no hablar la lengua y muchos se ven obligados a trabajar para poder subsistir.
En muchos otros lugares del mundo, los conflictos suponen un enorme obst¨¢culo para la educaci¨®n. De media, la tasa de finalizaci¨®n de la educaci¨®n primaria en pa¨ªses no afectados por conflictos es del 75%, mientras que en pa¨ªses en conflicto es del 58%. Adem¨¢s, en estos ¨²ltimos, las j¨®venes tienen casi un 90% m¨¢s de posibilidades de no estar matriculadas en educaci¨®n secundaria.
La educaci¨®n es un derecho y promueve la dignidad humana, pero es que, adem¨¢s, como se?ala el JRS en su informe, es ¡°una intervenci¨®n que salva vidas¡±. Protege a los ni?os y ni?as frente a la explotaci¨®n y el reclutamiento por parte de grupos armados, les ayuda a hacer frente al da?o psicosocial y a la separaci¨®n familiar y les aporta estabilidad. Por encima de todo, la educaci¨®n restaura su esperanza y les ayuda a construir un futuro digno. ¡°Me gusta aprender porque aprendiendo avanzamos y nos ayuda a cumplir nuestros sue?os¡±, dice Sahed Habbab, de 10 a?os, que participa en un programa educativo del JRS y Entreculturas en L¨ªbano. Ali Mostafa tiene 14 a?os y, junto a su familia, dej¨® Siria hace tres a?os para refugiarse en L¨ªbano, donde tambi¨¦n estudia en un colegio del JRS, ¡°Me gusta mucho ir al colegio y no quiero dejarlo porque mi ¨²nica esperanza en el futuro es saber leer y escribir¡±.
Adem¨¢s, se ha demostrado la influencia directa que tiene la educaci¨®n sobre los conflictos armados, porque cuanto mayor es el nivel educativo en un pa¨ªs, menores son las posibilidades de que se den conflictos armados. De hecho, tal y como se?ala la UNESCO, un aumento en la tasa de escolarizaci¨®n en la educaci¨®n primaria del 67% al 100% habr¨ªa reducido un 35% la probabilidad de guerra civil entre los a?os 1980 y 1999 a nivel mundial. Asimismo, incrementar el gasto en educaci¨®n del 2,2% al 6,3% del PIB puede suponer un descenso del 54% en la probabilidad de que estalle una guerra civil. Naturalmente, una buena educaci¨®n, inclusiva y equitativa, puede jugar un papel fundamental en promover una cultura de paz y de resoluci¨®n pac¨ªfica de conflictos.
Para promover la educaci¨®n en situaci¨®n de conflicto es imprescindible tomar medidas para que las escuelas sean lugares accesibles, libres de violencia y espacios de aprendizaje con calidad y equidad, que ense?en tolerancia y convivencia. Tambi¨¦n es fundamental aumentar la financiaci¨®n en educaci¨®n en emergencias y conflictos. Los conflictos, los ataques contra escuelas o el enorme aumento de ni?os y ni?as refugiados en el mundo en estos ¨²ltimos a?os hacen que sea m¨¢s relevante que nunca. Y sin embargo, la educaci¨®n en situaci¨®n de conflictos y emergencias tiene todav¨ªa un papel secundario en la agenda de los donantes, est¨¢ en una especie de limbo entre el desarrollo y la ayuda humanitaria, sin que ni en una u otra opci¨®n se tome un partido decidido por ella. De hecho, s¨®lo un irrisorio 2% de la ayuda humanitaria se destina a educaci¨®n.
La Cumbre Mundial Humanitaria que se celebra los d¨ªas 23 y 24 de mayo persigue que los l¨ªderes de los gobiernos, organizaciones no gubernamentales, sector privado, academia y comunidades se comprometan a trabajar juntos para tomar medidas que prevengan y reduzcan las consecuencias de futuras crisis. De cara a la Cumbre, Ban Ki-Moon ha elaborado la Agenda para la Humanidad, que recoge cinco responsabilidades para lograr este objetivo. Una de estas responsabilidades es no dejar a nadie atr¨¢s y, para conseguirlo, es imprescindible garantizar el acceso seguro a una educaci¨®n primaria y secundaria de calidad e inclusiva para todos los ni?os y ni?as durante y despu¨¦s de un conflicto o emergencia y en situaci¨®n de desplazamiento.
En esta primera Cumbre se lanzar¨¢ un fondo espec¨ªfico para educaci¨®n en situaciones de emergencia, llamado La educaci¨®n no puede esperar, que dar¨¢ prioridad a la educaci¨®n de los ni?os y ni?as desplazados internos y refugiados. Los Estados deben comprometerse a invertir en educaci¨®n, para que ¨¦sta se convierta en la herramienta m¨¢s poderosa para luchar contra los conflictos. Tal y como se?ala Pau Vidal, SJ, director del Servicio Jesuita a Refugiadosen Mab¨¢n, Sud¨¢n del Sur, ¡°La educaci¨®n es la construcci¨®n de un futuro mejor y un futuro en paz¡±. Protegiendo el derecho a la educaci¨®n luchamos por la construcci¨®n de la paz. La educaci¨®n aporta opciones de futuro a aquellos que se enfrentan a una situaci¨®n adversa en la que parece que no queda espacio para la esperanza.
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