Amitabh Behar: ¡°Nos estamos moviendo desde un escenario de desigualdad a otro de oligarqu¨ªas globales¡±
El director ejecutivo de Oxfam Internacional considera que el actual sistema econ¨®mico consolida la creciente desigualdad global, en la que 3.600 millones de personas viven por debajo del umbral de la pobreza
Amitabh Behar (Raipur, India, 53 a?os) evidencia r¨¢pidamente con cifras c¨®mo crece cada d¨ªa la desigualdad en el mundo: mientras que en 2024 ¡°los multimillonarios a?adieron dos billones de d¨®lares [1,9 billones de euros] a sus arcas, 3.600 millones de personas viven por debajo del umbral de la pobreza¡±, afirma el director ejecutivo de Oxfam Internacional, durante una entrevista en Madrid. Behar, que vive en Nairobi, la capital de Kenia, a donde Oxfam ha trasladado su secretariado internacional ¡ªdesde Oxford, Reino Unido¡ª dentro del proceso de descolonizaci¨®n de esta ONG, se acaba de reunir con el presidente del Gobierno espa?ol, Pedro S¨¢nchez, a quien ha animado a ejercer un ¡°liderazgo mundial¡± en la lucha contra la desigualdad. Cree que es de especial importancia en un escenario en el que la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca augura mayores inequidades. ¡°Es un presidente multimillonario respaldado por el hombre m¨¢s rico del mundo¡±, advierte.
P. El mundo es hoy m¨¢s desigual. ?Cu¨¢l es la magnitud de esa inequidad?
R. Seg¨²n nuestro ¨²ltimo informe, el a?o pasado los multimillonarios a?adieron dos billones de d¨®lares a sus arcas. Cada semana hemos asistido al nacimiento de cuatro nuevos multimillonarios. El a?o pasado calculamos que a este ritmo de crecimiento tendr¨ªamos muy pronto un billonario, pero la riqueza ha comenzado a crecer m¨¢s r¨¢pido y hemos tenido que revisar nuestro c¨¢lculo. Parece que dentro de una d¨¦cada tendremos cinco billonarios.
En 2024 se extrajeron cada hora 29 millones de euros del Sur Global que fueron a parar esencialmente a los s¨²perricos
P. ?Y en el lado opuesto?
R. Mientras vemos la acumulaci¨®n de la riqueza por la cima, por el otro lado hay 3.600 millones de personas que siguen por debajo del umbral de la pobreza. Eso es casi el 44% de la poblaci¨®n mundial. Hay 733 millones de personas que se acuestan con hambre porque no pueden comer tres veces al d¨ªa. De ellas, 152 millones se han a?adido en los ¨²ltimos a?os.
P. Y esta desigualdad afecta desproporcionadamente a las mujeres y a las minor¨ªas.
R. Estudio tras estudio confirma que, en la crisis clim¨¢tica, las m¨¢s perjudicadas son las mujeres. Y si hablamos de la desigualdad econ¨®mica, son las mujeres las que se llevan la peor parte. Perm¨ªtanme darles otra interesante dimensi¨®n de g¨¦nero a toda la cuesti¨®n de la desigualdad. En un a?o, el trabajo no remunerado de las mujeres [relacionado con los cuidados] aportar¨ªa a la econom¨ªa mundial 10,5 billones de euros. Y ocurre lo mismo con las comunidades marginadas, que suelen quedar m¨¢s excluidas de los procesos de desarrollo.
Hay 733 millones de personas que se acuestan con hambre porque no pueden comer tres veces al d¨ªa
P. ?Cu¨¢les son las causas de esta desigualdad econ¨®mica?
R. Las causas son m¨²ltiples, pero se trata esencialmente de que hemos creado un sistema econ¨®mico en el que la mayor parte del dinero generado por el trabajo agotador de la clase trabajadora, especialmente en el Sur, va a parar a los bolsillos de los s¨²perricos. El 60% de la riqueza de los multimillonarios no es una riqueza que haya sido ganada. Seg¨²n nuestros datos, por ejemplo, el 36% de esta riqueza viene directamente de la herencia. Todos los multimillonarios menores de 30 a?os acaban de heredar su riqueza. Gran parte del resto procede de monopolios o de conexiones entre amigos.
P. ?Qu¨¦ sostiene este sistema?
R. Mucha gente cree que el colonialismo termin¨® a mediados del siglo pasado, pero el colonialismo moderno sigue existiendo. En 2024, se extrajeron cada hora 30 millones de d¨®lares [28,7 millones de euros] del Sur Global que fueron a parar al Norte, esencialmente a los s¨²perricos.
En un a?o, el trabajo no remunerado de las mujeres [relacionado con los cuidados] aportar¨ªa a la econom¨ªa mundial 10,5 billones de euros
P. ?Empeorar¨¢ la situaci¨®n con el auge del populismo y la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca?
R. Lo que hemos visto cuando Trump asumi¨® el cargo es a un presidente multimillonario respaldado por el hombre m¨¢s rico del mundo [Elon Musk]. Con los primeros anuncios que ha hecho la Administraci¨®n Trump, de recortar impuestos a las grandes corporaciones y a los s¨²perricos, est¨¢ claro que se alimentar¨¢ a¨²n m¨¢s la desigualdad en todo el mundo.
El 60% de la riqueza de los multimillonarios no es una riqueza que haya sido ganada. El 36% de esta riqueza viene directamente de la herencia
P. Tambi¨¦n ha firmado un decreto que establece una moratoria a la ayuda exterior. ?Puede el resto del mundo suplir la financiaci¨®n que Estados Unidos retire?
R. EE UU es uno de los grandes contribuyentes de la ayuda humanitaria en todo el mundo, as¨ª que esta decisi¨®n es muy preocupante y va a remodelar todo el panorama mundial de la ayuda al desarrollo. Por ejemplo, todo el sistema de la ONU depende enormemente del apoyo del gobierno estadounidense. No creo que ning¨²n otro gobierno pueda llenar el vac¨ªo que se va a producir. Pero es probable que esto impulse ahora una reflexi¨®n m¨¢s profunda sobre el sistema econ¨®mico que hemos creado. La Administraci¨®n Trump es claramente la joya de la corona de las oligarqu¨ªas globales. Nos estamos moviendo desde un escenario de desigualdad a otro de oligarqu¨ªas globales.
P. ?Qu¨¦ riesgos entra?an estas oligarqu¨ªas globales?
R. No solo hay una mayor concentraci¨®n de riqueza en unas pocas manos, sino que ahora esa concentraci¨®n de riqueza va unida a la concentraci¨®n de poder. Est¨¢n apareciendo oligarqu¨ªas globales que, obviamente, van a ser enormemente perjudiciales para la estabilidad pol¨ªtica, para la cohesi¨®n social y para las democracias de todo el mundo. En esta coyuntura de desigualdad, la gente est¨¢ perdiendo la confianza en las instituciones. Se sienten completamente excluidos y, por lo tanto, se observa el enfado de la gente, que luego se articula en su voto a actores pol¨ªticos no regulares.
P. ?Qu¨¦ se puede hacer para luchar contra las desigualdades?
R. Lo primero es que reconozcamos que los multimillonarios son un signo del fracaso de la pol¨ªtica. Tenemos que cambiar completamente nuestra mirada, porque los multimillonarios son una elecci¨®n pol¨ªtica que hacemos a trav¨¦s de nuestro sistema econ¨®mico. Y lo bueno es que hay soluciones muy claras.
Hay casi 50 pa¨ªses que pagan el 48% de sus presupuestos anuales en reembolso de la deuda
P. ?Como cu¨¢les?
R. Una soluci¨®n es gravar a los s¨²perricos. Con la presidencia del G20 en Brasil, hemos conseguido una resoluci¨®n para que los multimillonarios paguen impuestos. Tambi¨¦n se est¨¢ negociando la Convenci¨®n Fiscal de la ONU, liderada por la Uni¨®n Africana, para evitar la evasi¨®n fiscal de las multinacionales. La segunda soluci¨®n es invertir en educaci¨®n, sanidad, seguridad social y guarder¨ªas. Cuando se invierte m¨¢s en servicios p¨²blicos, las sociedades son m¨¢s igualitarias. Y, en tercer lugar, hay que garantizar salarios dignos para todos. A menudo se observa que, sobre todo en el Sur, la mayor¨ªa de las cadenas de suministro, incluso de las grandes empresas, est¨¢n en el sector informal, y que muchos de los empleados ni siquiera reciben un salario m¨ªnimo.
P. ?Y la deuda externa?
R. La trampa de la deuda es una cuesti¨®n muy cr¨ªtica. Tenemos que entender que, en este momento, hay casi 50 pa¨ªses que pagan el 48% de sus presupuestos anuales en reembolso de la deuda, lo que significa que el dinero de estos gobiernos va de nuevo a los acreedores ricos del Norte. Y en estos pa¨ªses hay menos m¨¦dicos, enfermeras o maestros de escuela. Hay que salir de este fetichismo del PIB [como indicador del crecimiento] y buscar una econom¨ªa que sea m¨¢s humana, verde y m¨¢s feminista.
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