Respeto al diferente, al velo

Los debates sobre la permisividad de la sociedad ante la vestimenta asociada a una religi¨®n suelen estar centrados en el velo isl¨¢mico; rara vez en la kip¨¢ jud¨ªa, en la cruz cristiana o en el turbante sij. En general han sido el burka y el niqab los que han desatado restricciones por razones de seguridad. Esta vez, sin embargo, es el simple velo o pa?uelo el objeto de una prohibici¨®n avalada esta semana, con algunas cautelas, por la abogada general del Tribunal de Justicia de la UE.

?No estamos ante una prenda que obstaculice la visibilidad de quien lo lleva ni que le impida su movimiento, sino ante su papel de identificaci¨®n religiosa. Argumenta la abogada que la prohibici¨®n de llevar velo se enmarca en el terreno laboral, concediendo as¨ª amplio margen a las empresas. Y es que, en puridad, la mujer no ha sido discriminada por su religi¨®n, sino por expresar esa religi¨®n en su vestimenta. Ella hab¨ªa acudido a trabajar sin velo durante tres a?os hasta que comunic¨® su intenci¨®n de llevarlo puesto. La empresa introdujo entonces en su reglamento lo que ¡ªalega¡ª hab¨ªa sido una regla no escrita: ¡°Se proh¨ªbe llevar signos visibles de sus convicciones pol¨ªticas, filos¨®ficas o religiosas¡±. Una norma tan amplia como de dif¨ªcil aplicaci¨®n (?incluir¨ªa s¨ªmbolos pacifistas o feministas?) y que parece pensada para un solo caso. Francia, B¨¦lgica y Holanda han impuesto l¨ªmites al velo integral en espacios p¨²blicos. Espa?a ha vivido debates ocasionales en colegios que se han resuelto buscando opciones con respeto al diferente. Aqu¨ª, la abogada general ha ido m¨¢s all¨¢ de lo admisible en su celo igualador; incluso admite que la medida puede ser discriminatoria, aunque justificada.

La ropa no debe ser terreno ni instrumento de represi¨®n y cualquier sospecha de ello debe ser perseguida. Europa es un lugar de libertad y tolerancia donde la coexistencia de distintas culturas y religiones y el respeto a sus signos externos debe estar garantizada para todos.