Tanta mentira, la ruina

Tanta mentira acaba en la ruina. Lo ha comprobado el chisgarab¨ªs de Boris Johnson, quien hab¨ªa contratado el apoyo del ministro de Justicia Michael Gove ¡ªun traidor a David Cameron¡ª para ayudarle a encaramarse al poder, y Gove se postul¨® al cabo a s¨ª mismo.

?Gove? S¨ª, ese genio que defiende una alianza comercial con pa¨ªses tipo Albania como alternativa a la pertenencia a la UE del Reino (a¨²n) Unido. Graciosos, estos populistas.

Pero eso es nada comparado con la gran mentira de la campa?a. En 1979, Margarita Thatcher logr¨® un ¡°cheque brit¨¢nico¡± al grito de ¡°Devu¨¦lvanme mi dinero¡± (I want my money back). Una especie de ensayo de ¡°La UE nos roba¡±, ustedes me entienden, la cosa de los saldos netos, del d¨¦ficit fiscal, pillo menos de lo que aporto.

Lo logr¨® y no le bast¨®. Sus peores cachorros ideol¨®gicos, el Boris, el Gove, el racista Nigel Farage, machacaron al votante jurando cada d¨ªa igual mentira, ese imperativo de Goebbels: que la burrocracia de Bruselas cuesta a Londres 400 millones de libras semanales. Falso, es el saldo bruto inicial, hab¨ªa que restarle los 100 millones del cheque de Margarita, y otros 140 retornados a la isla en forma de varios subsidios europeos (pesca, agricultura, fondos estructurales). Tras la votaci¨®n, Farage reconoci¨® que su cifra era ¡°err¨®nea¡±. ?Qui¨¦n indemniza al votante?

Cameron logr¨® la permanencia de los escoceses (con ayuda de Gordon Brown) prometi¨¦ndoles influencia en Europa: cero patatero. Asegur¨® que el refer¨¦ndum era el colmo de la democracia y del inter¨¦s nacional, pero su exsocio liberal, Nick Clegg, ha certificado que era ¡°una votaci¨®n dirigida a solucionar una disputa [interna] del partido conservador¡±.

El primer ministro m¨¢s gafe de la historia del Reino culp¨® de su fracaso ¡ªtras su primera cumbre con un pie fuera¡ª a que la UE no supo resolver el problema de la inmigraci¨®n. Cuando en febrero promet¨ªa que la exenci¨®n lograda por ¨¦l en Bruselas a ciertos beneficios sociales para los inmigrados era muy satisfactoria. Y cuando su pa¨ªs recibe m¨¢s inmigrantes de terceros pa¨ªses que europeos.

Y asegur¨® a Jean-Claude Juncker que si el Brexit triunfaba, desencadenar¨ªa al instante el proceso de divorcio: lo aplaza.

Tanta mentira condena a nuestros queridos (a¨²n) conciudadanos brit¨¢nicos a la ruina. Les enga?an con alevos¨ªa.