Jake Gyllenhaal, un purasangre de Hollywood
El actor prefiere los papeles intensos. ?l se ha labrado su ¨¦xito sin tirar de uno de los apellidos m¨¢s famosos de la industria
En los ¨²ltimos a?os, la carrera de Jake Gyllenhaal es una huida hacia delante en la que los papeles se suceden en un mundo de extremos. Revivi¨® una y otra vez los ¨²ltimos minutos antes de un atentado en C¨®digo fuente (2010), naveg¨® las corruptas aguas de la polic¨ªa de Los ?ngeles en Sin tregua (2012) y se meti¨® en el pellejo de un paparazi por el que es muy dif¨ªcil sentir simpat¨ªa en Nightcrawler (2014). En un mismo a?o, tambi¨¦n baj¨® al cuadril¨¢tero de Southpaw y ascendi¨® a la cumbre en Everest (2015). Una filmograf¨ªa trepidante que no cesa y a la que ahora a?ade su ¨²ltimo trabajo, Demolici¨®n, pel¨ªcula que dirige Jean-Marc Vall¨¦e y en la que interpreta a un banquero que tras la muerte de su esposa decide destrozar a martillazos la vida que le rodea en busca de sentido. ¡°Las emociones lo son todo en mi vida¡±, resume distanci¨¢ndose pero a la vez entendiendo la b¨²squeda de su personaje. ¡°Para un actor los sentimientos son la verdadera forma de conectar. La imaginaci¨®n y las emociones. ?Ya me dir¨¢s que nos queda si no tenemos sentimientos!¡±.
Gyllenhaal habla con EL PA?S mientras prepara ya su pr¨®ximo filme, otro pozo de emociones cruzadas que bajo el t¨ªtulo de Stronger se adentra en la vida de Jeff Bauman, una de las v¨ªctimas del atentado durante el marat¨®n de Boston en 2013, en el que perdi¨® las piernas. Otra elecci¨®n tan intensa como humana fuera de la t¨®nica de un Hollywood dado a las sagas o a los superh¨¦roes. Cintas demasiado duras para alguien que podr¨ªa tenerlo todo dado gracias su apellido. Su padre, Stephen Gyllenhaal, es director; su madre, Naomi Forner, guionista; su hermana, Maggie, actriz, y su cu?ado es el actor Peter Sarsgaard. Paul Newman y Jamie Lee Curtis son sus padrinos. ¡°Con todo lo que me interesa la interpretaci¨®n, para m¨ª no hay nada como la familia¡±, reconoce ante tal genealog¨ªa. ¡°Pero es cierto que crec¨ª rodeado de una cierta seguridad, pero a medida que he salido al exterior me he dado cuenta de que hay todo un mundo que quiero conocer. No hablo necesariamente de lanzarme al peligro pero s¨ª aprender de la vida de otros¡±.
Como Gyllenhaal admite, existe un antes y un despu¨¦s en su carrera. Y eso que Jacob Benjamin Gyllenhaal solo tiene 35 a?os. ¡°Son varios los factores que han cambiado mi perspectiva sobre la interpretaci¨®n y el cine¡±, se sincera. Comenz¨® en este negocio muy pronto y aunque su familia le anim¨® a cursar estudios fuera de Hollywood enseguida despunt¨® con filmes que le dieron un nombre propio como Donnie Darko (2001) para ser parte m¨¢s tarde de ese momento de cambio que fue En terreno vedado (2004), filme que supuso su primera candidatura al Oscar. ¡°Tantas cosas han cambiado desde entonces y tantas m¨¢s necesitan cambiar que solo puedo estarle agradecido a Ang [Lee] por hacerme part¨ªcipe de ese momento¡±, reflexiona ahora. La muerte de Heath Ledger, su compa?ero en esta historia de amor gay y el padre de su ahijada Matilda, adem¨¢s de su amigo, as¨ª como el posterior divorcio de sus padres fueron otras de las razones que le han hecho replantearse la vida, personal y profesionalmente. ¡°Nada me atemoriza m¨¢s que no vivir¡±, asegura categ¨®rico quien procura aprovechar el presente nunca ech¨¢ndose atr¨¢s. ¡°Al final va a ser verdad y existe esa parte de mi a la que le atraen los extremos¡±, se r¨ªe.
En su conversaci¨®n, nunca es del todo honesto aunque tampoco miente. Utiliza su encanto y su simpat¨ªa de gran conversador para cambiar de tercio y volver a sus filmes si el tema se vuelve personal. Prefiere hablar de su necesidad de cambiar f¨ªsicamente con cada papel, algo que hace llevado por el miedo. ¡°Miedo a hacer el rid¨ªculo, a no ser lo suficientemente bueno¡±, se le escapa. O de esa violencia m¨¢s o menos contenida que se esconde detr¨¢s de sus ojos. ?Suya o del personaje? ¡°Debo reconocer que en ocasiones la rabia me puede¡±, a?ade cambiando su mirada.
Hoy Gyllenhaal es diferente. Quiz¨¢ fue el batacazo que se meti¨® en el campo de las grandes producciones con Prince of Persia: Las arenas del tiempo (2010), la que iba a ser su franquicia en el mundo de las superproducciones, y la que realmente marc¨® el antes y el despu¨¦s. ¡°Digamos que prefiero seguir en mi cueva de la creatividad¡±, se r¨ªe de una frase que piensa patentar. ¡°Ese espacio en el que poder cultivar a gusto la creatividad, sin que me preocupe el tama?o de la producci¨®n o el n¨²mero de espectadores. Solo la historia. Quiero seguir creciendo, ir m¨¢s lejos de mi zona de confort. ?Acaso no es lo que todos queremos?¡±.
Etiqueta de conquistador
Si el encanto del menor de los Gyllenhaal es apreciado en la pantalla, m¨¢s a¨²n lo es en las distancias cortas. Soltero y por muchos a?os sin compromiso, su nombre es asociado una y otra vez a algunas de las estrellas m¨¢s populares del momento. Kristen Dunst, Taylor Swift, Reese Witherspoon o Rachel McAdams, entre otras, figuran entre sus conquistas m¨¢s comentadas. La ¨²ltima, Dakota Johnson. Eso s¨ª, cual caballero, ¨¦l calla en cuesti¨®n de amores. ¡°Es bastante obvio que uno conoce gente tan atractiva y encantadora en este negocio que el magnetismo es inevitable¡±, confiesa con m¨¢s picard¨ªa que sinceridad. ¡°Pero la gente deber¨ªa de enterarse bien antes de hablar porque soy culpable de muchas cosas pero no necesariamente de las que se comentan¡±, agrega misterioso. ¡°Sue?o con tener una familia, con ser padre y esposo. Lo que no tengo es tiempo¡±, se r¨ªe.
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