Simon Pegg, el fan que lleg¨® a ¡®Star Wars¡¯

Como aquel famoso anuncio de ¡°tacita a tacita¡±, as¨ª ha sido la carrera de Simon Pegg, un c¨®mico monologuista ingl¨¦s que ha pasado de los escenarios de un pub a la televisi¨®n y hoy forma parte de franquicias taquilleras: Star Trek, Star Wars y Misi¨®n: Imposible. Buenas decisiones, bastante fidelidad a sus amigos y mucho talento. Y al contrario que algunos famosos c¨®micos, Pegg se escribe muchos de sus chistes, y lo que no es humor: firma el guion de Star Trek: M¨¢s All¨¢, la tercera parte de esta resurrecci¨®n de la saga, que se estrenar¨¢ el 5 de agosto. Y eso de escribir no lo hacen todos, como bien podr¨ªa confirmar Adam Sandler.

Ingl¨¦s de 46 a?os, Pegg desprende en persona un encanto que, al igual que ocurre con Antonio Banderas, logra que el p¨²blico piense que es como ellos, un vecino, incluso un amigo de la pandilla que sencillamente ha tenido m¨¢s suerte en la vida. Lo que en realidad es mentira, porque detr¨¢s se esconden muchos a?os de trabajo, de ir escalando posiciones en el showbusiness, de exprimir su faceta de nerd y tambi¨¦n de pasar m¨¢s por el gimnasio. Nacido como Simon John Beckingham, el Pegg viene del apellido de su padrastro. Estudi¨® Drama en la Universidad de Bristol y a inicios de los noventa se mud¨® a Londres, donde comenz¨® a actuar en el circuito de los teatros de mon¨®logos. Muchas de sus apariciones se centraban en su lado m¨¢s nerd: furibundo fan de la cultura pop y de la ciencia-ficci¨®n y, sobre todo, de La guerra de las galaxias, asegura que en su habitaci¨®n de cr¨ªo ten¨ªa una foto de Carrie Fisher y que todas las noches la besaba antes de dormir. Bueno, tambi¨¦n era seguidor de Gillian Anderson en Expediente X, cumpliendo todos los mandamientos del hetero friki.

No tard¨® mucho en pasar de los escenarios a la televisi¨®n. Y en 1999 encontr¨® su lugar en la serie Spaced, donde conoci¨® a dos de sus mejores amigos: el tambi¨¦n c¨®mico Nick Frost, que en ese momento a¨²n no hab¨ªa actuado y que hoy es una estrella, y el director Edgar Wright. Los dos actores decidieron compartir piso y el tr¨ªo salt¨® al cine con brillantez demoledora. Pegg ya hab¨ªa aparecido en la gran pantalla en Hotel Para¨ªso (1999) y m¨¢s tarde en 24 Hour Party People, pero la fama le lleg¨® junto a Frost y Wright en Zombies Party (Una noche de¡­ muerte) en 2004, en la que Pegg encarna a un tipo decidido a recuperar el amor de su chica, una rom¨¢ntica historia que por desgracia transcurre en mitad de un apocalipsis zombie. Mientras la carrera le sonre¨ªa, Pegg, hijo de m¨²sico de jazz, segu¨ªa haciendo amigos, como Chris Martin: al actor se le puede ver en varios v¨ªdeos de Coldplay y es el padrino de Apple, la hija del cantante y Gwyneth Paltrow.

En este ascenso, Wright le abri¨® las puertas de la fama a Pegg, pero el espaldarazo definitivo se lo dio J. J. Abrams, el todopoderoso nuevo ni?o prodigio de Hollywood. El cineasta hab¨ªa alucinado con Zombies Party, y cuando Ricky Gervais se cay¨® del reparto de Misi¨®n: Imposible 3, el director llam¨® a Pegg. Fue amor profesional a primera vista: juntos pasaron a la franquicia Star Trek, en la que el actor da vida a Scotty, y all¨ª sigue, incluso escribiendo la tercera parte. Abrams tambi¨¦n le llam¨® para El despertar de la fuerza, en la que Pegg, que lleg¨® as¨ª seg¨²n ¨¦l mismo al cenit de su carrera, aparece escondido bajo el personaje de Unkar Plutt.

?l sigue, por supuesto, fiel a Wright (Arma fatal y Bienvenidos al fin del mundo), Frost (eran Hern¨¢ndez y Fern¨¢ndez en Las aventuras de Tint¨ªn) y a lo que le manden Abrams y Spielberg (ahora mismo rueda con ¨¦l Ready Player One). Adem¨¢s, dobla dibujos (a Buck en La edad de hielo) y mantiene sus personajes en pel¨ªculas peque?as (protagoniza Absolutamente todo, del Monty Python Terry Jones). A todos gusta y a ¨¦l le encanta ese gustar¡­ a veces demasiado. En la pr¨®xima entrega de Star Trek quedar¨¢ claro que Sulu es gay. Pegg describi¨® esa orientaci¨®n sexual del personaje en homenaje al actor que le encarnaba en la serie original, George Takei, uno de los primeros int¨¦rpretes en Hollywood que hizo p¨²blica su homosexualidad y que hoy mantiene su lucha por los derechos LGBT. Y contra esta opci¨®n se ha encarado¡­ el mismo Takei, que considera que Suku siempre fue heterosexual porque as¨ª lo concibi¨® su creador, Gene Roddenberry: por encima del quedar bien est¨¢ la concepci¨®n del artista. Esta vez al nerd le han perdido las ganas de agradar.