Por un M¨¦xico sin corrupci¨®n
La creaci¨®n de un sistema federal de vigilancia y prevenci¨®n del delito supondr¨¢ un cambio de paradigma
Hace cuatro a?os, sociedad y Gobierno nos propusimos construir un nuevo M¨¦xico, un M¨¦xico de leyes, construido sobre instituciones s¨®lidas y transparentes, un M¨¦xico que respondiera a las necesidades y preocupaciones de los mexicanos en la modernidad. Con ese objetivo, durante los primeros a?os de mi administraci¨®n, nos dimos a la tarea de impulsar e implementar una serie de reformas que derribaran las barreras que imped¨ªan a los mexicanos alcanzar su verdadero potencial. Sin duda, para lograr este noble prop¨®sito, tambi¨¦n era necesario garantizar el Estado de derecho, la transparencia y la rendici¨®n de cuentas.
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Hacerlo era impostergable. De acuerdo con los resultados del ?ndice de Percepci¨®n de la Corrupci¨®n 2014, publicado por Transparencia Internacional, M¨¦xico obtuvo una calificaci¨®n de apenas 35, en una escala de 0 a 100; pr¨¢cticamente, el mismo resultado que ha tenido en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas. Adem¨¢s, seg¨²n el Instituto Mexicano para la Competitividad, cada a?o los actos de corrupci¨®n en el pa¨ªs nos cuestan hasta un 10% del PIB, 5% de la Inversi¨®n Extranjera Directa que recibe el pa¨ªs, y causan la p¨¦rdida de 480.000 empleos.
Gracias a las nuevas tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y a la libertad de expresi¨®n, la sociedad est¨¢ cada vez m¨¢s enterada de los actos de corrupci¨®n cometidos por servidores p¨²blicos y particulares. Hoy, los mexicanos nos sentimos lastimados y dolidos por este grave flagelo. Como presidente de la Rep¨²blica, estoy convencido de la urgencia de erradicar la corrupci¨®n, fortalecer la transparencia y consolidar la rendici¨®n de cuentas. Por esas razones, el primer compromiso que firm¨¦ como candidato, y la primera propuesta legislativa que impuls¨¦ como presidente electo, fueron en contra de la corrupci¨®n.
Los mexicanos nos sentimos lastimados y dolidos por este grave flagelo
En un ejemplo de la madurez democr¨¢tica que vamos alcanzando en nuestro pa¨ªs, m¨¢s de 600.000 personas alzaron la voz, haciendo uso por primera vez en la historia de la nueva figura legislativa de iniciativa ciudadana. Su llamado ha sido un mandato claro e ineludible: ninguna instituci¨®n ni servidor p¨²blico, sin importar el orden de gobierno, est¨¢ por encima de la ley. Todos est¨¢n sujetos a la rendici¨®n de cuentas.
En respuesta, durante los ¨²ltimos tres a?os, el Estado Mexicano en su conjunto ha sentado las bases para combatir la corrupci¨®n a fondo. Destacan como nuevos pilares institucionales la creaci¨®n del Sistema Nacional de Transparencia y, a partir de esta semana, el Sistema Nacional Anticorrupci¨®n (SNA). Este organismo convoca a todos los ¨®rganos e instituciones encargados de combatir la corrupci¨®n para trabajar de forma coordinada.
El SNA contar¨¢ con amplias atribuciones para prevenir, detectar y sancionar delitos
El continuo involucramiento de la sociedad civil ser¨¢ fundamental para el correcto funcionamiento de este sistema. En el orden federal, el SNA contar¨¢ con amplias atribuciones para prevenir, detectar y sancionar delitos por actos de corrupci¨®n, promoviendo la corresponsabilidad entre los tres poderes. Tambi¨¦n facilitar¨¢ una mayor coordinaci¨®n entre las autoridades federales y locales, para vigilar la correcta utilizaci¨®n de los recursos p¨²blicos. Adem¨¢s, las entidades federativas deber¨¢n integrar sus propios sistemas locales, a partir de lo establecido por la Ley General del Sistema Nacional Anticorrupci¨®n. Con ello, se garantiza que el SNA opere de manera estandarizada en todo el territorio nacional.
El sistema promover¨¢ la prevenci¨®n, la investigaci¨®n y, en su caso, la sanci¨®n de los casos de corrupci¨®n. Contar¨¢ con mecanismos de prevenci¨®n, como c¨®digos de ¨¦tica, protocolos de actuaci¨®n y selecci¨®n rigurosa de los integrantes de los ¨®rganos internos de control de cada dependencia federal. Asimismo, incluir¨¢ instrumentos obligatorios de rendici¨®n de cuentas para los servidores p¨²blicos, incluyendo la obligaci¨®n de presentar sus declaraciones patrimoniales, fiscales y de intereses. Ahora, lo que sigue es poner en pr¨¢ctica estos avances institucionales, fortalecer la capacitaci¨®n de los servidores y formular los reglamentos correspondientes. Tenemos que demostrar su efectividad. M¨¦xico le abri¨® las puertas plenamente a la democracia con la creaci¨®n del Instituto Federal Electoral en la ¨²ltima d¨¦cada del siglo pasado. Estoy convencido de que el impacto del SNA ser¨¢ igual de relevante y positivo. Se trata de un verdadero cambio de paradigma, porque abre el camino hacia una nueva era en el servicio p¨²blico. La sociedad mexicana nos ha mostrado lo que puede lograrse mediante el di¨¢logo franco y honesto. Es un triunfo de la sociedad y todos los mexicanos deben sentirse orgullosos.
Enrique Pe?a Nieto es presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
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