Psicosis de inseguridad

Existe un peligro latente de que los ¨²ltimos atentados terroristas, sobre todo el cometido en Niza el d¨ªa de la fiesta nacional francesa, alimenten la psicosis de los ciudadanos hacia los refugiados y las poblaciones inmigrantes de origen musulm¨¢n ya asentadas en suelo europeo. Otros hechos sucedidos en Alemania ¡ªun adolescente afgano que acuchilla a varios viajeros de un tren, las violaciones de A?o Nuevo en Colonia¡ª contribuyen a¨²n m¨¢s al sentimiento de inseguridad. Por eso es grave que algunos pol¨ªticos intenten aprovecharse del miedo para sus batallas partidistas. Es imposible mantener a la sociedad en calma y enfrentarse al terrorismo si las pugnas pol¨ªticas invaden el debate p¨²blico despu¨¦s de cada atentado. Y hay que recordar que el a?o pr¨®ximo habr¨¢ elecciones tanto en Francia como en Alemania.

La dignidad con que muchas personas asistieron a los actos en memoria de las v¨ªctimas de Niza contrasta con los abucheos al primer ministro, Manuel Valls. Los dos principales candidatos a dirigir la derecha francesa, Alain Jupp¨¦ y Nicolas Sarkozy, han cargado contra el Gobierno socialista por no haber tomado las suficientes medidas de seguridad. Todo ello sin olvidar el discurso permanente de la extrema derecha contra inmigrantes y refugiados.

Siempre se puede discutir sobre la eficacia de las medidas antiterroristas, pero Francia ha tomado muchas: estado de excepci¨®n, despliegue de efectivos policiales y militares, refuerzos de la legislaci¨®n, todo ello sin cejar en el ataque militar contra el Estado Isl¨¢mico. El presidente franc¨¦s, Fran?ois Hollande, anuncia ahora la movilizaci¨®n de reservistas y pide voluntarios para engrosar las filas de una nueva Guardia Nacional. Todo ello da idea de la gravedad de la situaci¨®n.

En una Europa tan expuesta al yihadismo, es in¨²til dar la falsa esperanza de que el ¨¦xito de las medidas antiterroristas est¨¢ condicionado a considerar como sospechosos a la mayor¨ªa de los musulmanes. La idea de una retaguardia completamente a salvo de las guerras de Oriente Pr¨®ximo solo es el producto de la demagogia con que l¨ªderes irresponsables tratan de sacar partido de una situaci¨®n que exige exactamente lo contrario: mantener la unidad de los dem¨®cratas, no caer en la tentaci¨®n de dar curso al odio y ser conscientes de que la sociedad europea tiene por delante una larga lucha.