Javier Mariscal: "Cobi beb¨ªa cerveza y ten¨ªa barriguita"
El creador de la ¨²nica mascota espa?ola de los Juegos, que se declar¨® arruinado, reflexiona sobre el sentido de los siempre controvertidos mu?ecotes
El punto de inflexi¨®n probablemente fue el 15 de marzo de 1988. Ese d¨ªa, ETA atentaba contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Llodio, sin causar v¨ªctimas. En Madrid, tres mujeres resultaban heridas por un paquete bomba enviado a un sindicato de funcionarios (CSIF) y se produc¨ªan huelgas en hosteler¨ªa, ense?anza y construcci¨®n. Y all¨ª, en un recoveco de las portadas de los principales peri¨®dicos de este pa¨ªs, entre tanta convulsi¨®n, ve¨ªamos por primera vez a la que, hasta el momento, es la ¨²nica mascota ol¨ªmpica espa?ola. El 15 de marzo de 1988, entre atentados y huelgas, Cobi nac¨ªa al p¨²blico.
Le hubiese gustado el triunfo de la candidatura de Madrid, pero vaticina: ¡°Hubiera sido cutre, y los B¨¢rcenas de turno se hubieran puesto las botas¡±
Aunque ese martes, aqu¨¦l pastor catal¨¢n de dise?o cubista a¨²n no ten¨ªa nombre. Pero s¨ª m¨²ltiples vestimentas, en funci¨®n del deporte a realizar, e incluso alg¨²n amigo. Su creador, el dise?ador Javier Mariscal (Valencia, 1950), desarroll¨® variantes de la mascota, en bici, nadando, remando, levantando pesas o tir¨¢ndose de un trampol¨ªn. Hasta sentado tras la barra de un bar. ¡°Cobi representaba la alegr¨ªa de la gente com¨²n, beb¨ªa cerveza, ten¨ªa barriguita, hac¨ªa todos los deportes, pero no era el n¨²mero uno de nada. Era como t¨² y como yo¡±, asegura Mariscal, m¨¢s de 28 a?os despu¨¦s de aquella presentaci¨®n.
Sin embargo, Cobi era muy distinto en algo. Mariscal hab¨ªa roto con la est¨¦tica t¨ªpica de Disney y hab¨ªa presentado un dise?o innovador que no estuvo exento de cr¨ªtica, especialmente en los primeros meses. ¡°Es muy positivo una pol¨¦mica as¨ª, es un regalo. Es una manera de que todo el mundo hable, opine, que le hagan caso. Y quiere decir tambi¨¦n que est¨¢ simbolizando algo que es importante para much¨ªsima gente¡±, reflexiona antes de sentenciar: ¡°Adem¨¢s, cuanto m¨¢s est¨¢s rompiendo unas normas, menos va a gustar porque somos animales de costumbres¡±.
Esas costumbres se quebraron en Barcelona ¡®92. ¡°Yo le expliqu¨¦ un d¨ªa a los organizadores de la candidatura Madrid que si tuvo tanto ¨¦xito Barcelona es porque hab¨ªa detr¨¢s una filosof¨ªa de mucho riesgo, de innovar de verdad¡±, relata. Y recuerda la arriesgada apuesta de Pasqual Maragall por la Fura Dels Baus para la ceremonia inaugural. El dise?ador y el entonces alcalde de la Ciudad Condal acudieron a un espect¨¢culo de la compa?¨ªa teatral en el que ¡°vomitaban bolsas que llevaban delante del pecho con garbanzos y alubias muy cocidas para que diesen el pego de que estaban vomitando encima de ti¡±. Al concluir la obra, cuenta Mariscal, Maragall les pidi¨® que se hicieran cargo de la que a la postre fue una de las ceremonias de apertura m¨¢s emblem¨¢ticas que se recuerda.
Esa filosof¨ªa de innovaci¨®n, de ilusi¨®n com¨²n, es la que, en opini¨®n del dise?ador, falt¨® en las candidaturas madrile?as. ¡°Estaban muy mal planteadas y el equipo no ten¨ªa ni idea. Estaba formado por un grupo sin consenso y eso lo valora mucho el COI (Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional). Hab¨ªa una parte de la ciudadan¨ªa que rechazaba ese equipo de gobierno¡±. Y aunque asegura que le ¡°hubiera encantado que hubiera ganado Madrid¡±, cree que el resultado no habr¨ªa estado a la altura. ¡°Hubiera sido cutre, como ellos, y los B¨¢rcenas de turno se hubieran puesto las botas¡±, resuelve.
Seg¨²n el COI, Cobi es la mascota m¨¢s rentable hasta la fecha. Su creador, apunta:?¡°El concepto de mascota ya es una horterada¡±
Aunque s¨ª cree que Espa?a est¨¢ preparada para volver a albergar unos Juegos. ¡°Tenemos uno de los mejores pa¨ªses del mundo. Es una mezcla buen¨ªsima de muchas cosas y cualquier ciudad los podr¨ªa organizar muy bien¡±, asegura. Ser¨ªa, como ¨¦l mismo lo califica, una oportunidad ¨²nica. ¡°Es una campa?a publicitaria maravillosa para que la gente conozca esa ciudad. Puedes lanzar toda una serie de valores, identidades que crees que la representan y al mismo tiempo puedes financiar cambios importantes que en otro momento no puedes hacer. Porque adem¨¢s luego, si se plantea bien, es un buen negocio para cualquier ciudad¡±, sentencia.
Par ¨¦l tambi¨¦n lo fue. ¡°Si me conocen es porque me toc¨® la loter¨ªa con esto¡±, sostiene tajante. Y enumera una larga lista de trabajos que realiz¨® tras el encargo ol¨ªmpico: dise?o de hoteles, interiorismo, im¨¢genes gr¨¢ficas, exposiciones, libros y hasta un Goya, dos premios Gaud¨ª y una nominaci¨®n al Oscar por Chico y Rita, la pel¨ªcula de animaci¨®n que dirigi¨® con Fernando Trueba. Con el director, del que habla maravillas, -¡±yo, si fuera chica, me casaba con ¨¦l¡±, dice- espera trabajar en una nueva pel¨ªcula, cuyo proyecto tiene en mente. Tambi¨¦n una tienda online y un libro. ¡°Soy muy joven de esp¨ªritu, muchas veces me pienso que tengo 24¡±, parece excusarse.
Aunque la crisis le pas¨® factura, como a casi todos. En 2014 tuvo que cerrar su estudio en Barcelona, solicit¨® el concurso de acreedores y acab¨® arruinado. Tirando de una met¨¢fora mal entendida se calific¨® a s¨ª mismo de ¡°mantero¡± para proclamar m¨¢s tarde que estaba en proceso de reinvenci¨®n. Intent¨® no parar, seguir dibujando, poniendo en marcha proyectos y puso a la venta alguna de sus obras m¨¢s emblem¨¢ticas.
Lo que s¨ª dej¨® m¨¢s aparcado es lo de las mascotas: ¡°No quer¨ªa que me pusieran el sanbenito de ¡®mascotero¡±. Aunque Cobi no fue el ¨²ltimo dise?o que realiz¨® en este sentido, tras ¨¦l, el valenciano dio vida a Twipsy, emblema de la Expo 2000 celebrada en Hannover (Alemania) y mucho menos conocida que el pastor catal¨¢n cuyo nombre naci¨® de las siglas de Comit¨¦ Organizador Ol¨ªmpico de Barcelona ¡®92, COOB ¡®92. Cobi, una de las mascotas m¨¢s populares de los Juegos Ol¨ªmpicos y la m¨¢s rentable hasta la fecha seg¨²n el COI, se uni¨® a Naranjito (Mundial de F¨²tbol de Espa?a de 1982) y a Curro (Expo de Sevilla 1992) en el recuerdo popular de los grandes acontecimientos que se llevaron a cabo en suelo espa?ol. Aunque su progenitor confiese: ¡°El concepto de mascota ya es una horterada¡±. Mariscal es tambi¨¦n su propio personaje.
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