¡°Soy carne de escenario, quiero morirme con las botas puestas¡±
Rosario Flores tiene listo su nuevo disco. Pero antes de lanzarlo vuelve a la televisi¨®n como ¡®coach¡¯ de los m¨¢s peque?os en ¡®La Voz¡¯. En el horizonte, prepara un musical sobre su madre
Rosario Flores (Madrid, 1963) vive uno m¨¢s de sus tradicionales veranos, lleno de conciertos y de la grabaci¨®n (de nuevo) de las audiciones de La Voz Kids (Tele5). La cantante ya tiene listo su pr¨®ximo disco (¡°muy Rosario, muy sent¨ªo¡±), que no saldr¨¢ a la venta hasta noviembre y, de momento, prefiere no dar detalles. Mientras tanto no deja de ¡°girar¡±, lo mismo por Am¨¦rica que por Espa?a.
Pregunta. ?Es usted la versi¨®n moderna de Lola Flores?
Respuesta. Eso me dec¨ªa mi madre. Y s¨ª, me parezco mucho a ella pero soy un poco m¨¢s moderna. Ella ya era moderna, ?eh? Pero para comprobarlo tienen que verme en directo. Porque mis conciertos tienen much¨ªsima energ¨ªa.
P. ?Es verdad que en cada concierto pierde dos kilos?
R. S¨ª, porque bailo mucho, salto, corro; me doy mucho. Y, adem¨¢s, est¨¢ el calor de las luces¡ Pero los recupero enseguida.
P. En Jerez de la Frontera le har¨¢n un homenaje a su madre que durar¨¢ todo un a?o.
R. Me parece maravilloso, porque mi madre es para hacerle much¨ªsimos homenajes. Es un icono de Espa?a y se merece todo.
P. Pero el a?o pasado, cuando se cumplieron 20 a?os de su muerte, una fecha m¨¢s redonda, no se llev¨® a cabo ning¨²n acto.
R. Es que para hacer ese tipo de eventos tendr¨ªa que haber alguien que se encargue de ello, porque yo estoy con mi m¨²sica y mi hermana Lolita con su teatro y, bueno, no hay tiempo. ?Ah!, pero nos hemos centrado en algo: en un musical sobre mam¨¢. Va despacito, pero estamos en ello. Ser¨¢ algo muy digno de ella.
P. ?C¨®mo se aprende a vivir con las ausencias de los seres queridos?
R. Con el paso del tiempo, que va cicatrizando las heridas. Bueno, la muerte de una madre y de un hermano casi al mismo tiempo, y, despu¨¦s, la de mi padre, nunca se te olvidan. Pero hoy puedo decir que soy muy feliz: hago mi m¨²sica, mis conciertos, tengo dos hijos maravillosos. Por eso, a pesar de todo, no me puedo quejar de la vida.
P. Claro: rueda, por ejemplo, una pel¨ªcula con uno de los principales directores del cine espa?ol, que luego nominan al Oscar, y entre las satisfacciones que le dio esa experiencia encuentra a su marido.
R. ?Es lo mejor que me dio Pedro Almod¨®var! Un marido del que me enamor¨¦ haciendo Hable con ella, interpretando a una torera, y todav¨ªa lo tengo a mi lado.
P. Interpret¨® a una torera, pero a usted no le gustan los toros.
R. Cuando me llam¨® Pedro y me dijo ¡°te quiero como torera¡±, yo le contest¨¦: ¡°?Qu¨¦ dices, si yo lo que soy es roquera!¡±. Nos re¨ªmos y acab¨¦ por meterme en ese mundo, que conoc¨ªa un poco por la ¨¦poca de mis padres, pero del que no era aficionada, es verdad.
P. ?Cu¨¢ndo volver¨¢ a hacer cine?
R. Empec¨¦ mi carrera art¨ªstica como actriz, pero hac¨ªa eso esperando mi momento musical. Yo soy carne de escenario. Y quiero morirme con las botas puestas encima de uno. El cine me encanta, pero mi afici¨®n siempre ha sido la m¨²sica.
P. ?Estar en La Voz Kids le ha permitido renovar sus fans?
R. Estoy realmente sorprendida porque todos los ni?os me quieren un mont¨®n. ?Puede haber un regalo mejor en el mundo que los ni?os te quieran?
P. Su hijo menor tiene 10 a?os, ?no se pone celoso al verla rodeada de un mont¨®n de ni?os?
R. Es como yo era con mi madre: le llama la atenci¨®n todo esto, pero no va m¨¢s all¨¢. Sabe que soy feliz con esto, con mi m¨²sica y ya est¨¢.
P. Una m¨²sica que no para de fusionar.
R. Porque me ha tocado vivir eso. He vivido con el flamenco, con el soul, el funky. Como mis padres viajaban mucho a Am¨¦rica, me tra¨ªan muchos discos y por eso tengo calentitos todos los ritmos latinos.
P. ?De ah¨ª vine que se defina como gipsy funky?
R. S¨ª, porque me siento una gitana negra. Mi madre me dio el flamenco y mi padre la rumba catalana. Y, por otra parte, escuchaba mucho soul, mucha m¨²sica negra. Por eso soy una gipsy funky, porque siempre he sentido que un quej¨ªo de blues era como un quej¨ªo flamenco. Tienen el mismo sentimiento.
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