Los clientes pondr¨¢n nota a los taxistas portugueses

Uber va a conseguir en Portugal taxis m¨¢s modernos, taxistas m¨¢s simp¨¢ticos y tarifas m¨¢s transparentes. Todo gracias a la bestia negra del gremio, la aplicaci¨®n Uber, y, por supuesto, a la valent¨ªa de un Gobierno que aguanta la presi¨®n y las amenazas de huelga. Portugal va a ser uno de los primeros pa¨ªses de la Uni¨®n Europea que reglamenta el servicio de transporte en ¡°coches descaracterizados¡±, pero a la vez, tambi¨¦n los del taxi. Frente a la t¨®pica, y cierta, reclamaci¨®n del sector de que Uber hace competencia desleal, el Gobierno va a homogeneizar las condiciones de trabajo de todos.

Los taxis seguir¨¢n pagando la licencia ¡ªunos 400 euros¡ª, pero a cambio se les recuerda que tienen unos privilegios que no tienen los conductores de Uber, como son las paradas de taxi en la v¨ªa p¨²blica, el carril exclusivo o la reserva del servicio con antelaci¨®n. En cuanto la nueva legislaci¨®n sea aprobada, probablemente en septiembre, el conductor de Uber deber¨¢ pasar un cursillo de formaci¨®n igual al del taxista: no ser¨¢n las actuales 125 horas, sino una veintena. Pero lo m¨¢s atractivo para el cliente es que el taxista ser¨¢ evaluado como sucede actualmente con el servicio de Uber. Una aplicaci¨®n en Internet va a permitir que el cliente califique al taxista y a su veh¨ªculo, as¨ª como la presentaci¨®n de cualquier queja.

A este final feliz ¡ªfalta la r¨²brica¡ª no se llega sin que haya habido un fuerte pulso entre las diferentes partes afectadas de este transporte p¨²blico, el m¨¢s privado y personal de todos. En abril, los taxistas paralizaron Lisboa y Oporto con una marcha lenta; el Gobierno resisti¨® el envite, los ciudadanos tambi¨¦n, mientras que Uber consegu¨ªa la mayor recaudaci¨®n de su historia en Portugal. En este pa¨ªs, la aplicaci¨®n californiana ha cuajado como en ning¨²n otro europeo, en buena parte por la edad de su parque automovil¨ªstico y tambi¨¦n por la deficiente organizaci¨®n del servicio en el aeropuerto de Lisboa. Una aplicaci¨®n en el m¨®vil va a conseguir en un par de a?os lo que nadie hab¨ªa conseguido cambiar en d¨¦cadas. La globalizaci¨®n ha llegado al taxi, cosas veredes.