Los sioux se levantan contra un oleoducto
Seguramente la obra sea necesaria para mucha gente, pero no puede hacerse sin tener en cuenta la letra peque?a de la historia, la de los perdedores
Los sioux de la tribu Standing Rock de Dakota del Norte llevan cinco meses protestando contra la construcci¨®n del oleoducto que cruza el norte de Estados Unidos. Va a pasar por unas tierras donde los sioux viv¨ªan, donde cazaban y pescaban, donde mor¨ªan. Las arrasar¨¢ y puede destruir tambi¨¦n zonas de las que obtienen el agua de la que viven. Hace tiempo que esos lugares legalmente no les pertenecen, ya que los arrinconaron en reservas, y ah¨ª los tienen. Esta vez, y a falta de caballos, se han subido en unas excavadoras y las han llenado de pancartas.
Tras el alboroto montado por los sioux, el juez ha ordenado parar la construcci¨®n del tramo que pretend¨ªa conectar a finales de a?o Dakota del Norte, epicentro del fracking, con Illinois. Los sioux sostienen que el proyecto vulnera leyes federales de protecci¨®n hist¨®rica. La empresa, Energy Transfer Partners, con sede en Texas, sostiene que est¨¢n tomando precauciones para no da?ar los lugares ancestrales de aquellas tribus que un d¨ªa gobernaron esos parajes imponentes.
Un episodio m¨¢s de un antiguo conflicto. El ¨¢ngel de la historia est¨¢ empujando para que un reciente logro t¨¦cnico que ha dado extraordinarios resultados, el fracking, pueda avanzar impert¨¦rrito hasta imponerse y jugar sus bazas: m¨¢s trabajo, m¨¢s energ¨ªa, m¨¢s bienestar para todos. Y, de pronto, en mitad del camino aparecen un pu?ado de indios que reclaman respeto por sus lugares sagrados y que anuncian que luchar¨¢n por el agua que les da la vida.
¡°No vamos a dejar que unos pocos indios ladrones y andrajosos frenen y detengan el progreso¡±, escribi¨® en el siglo XIX el general Grant. ¡°Tenemos que actuar con ¨¢nimo serio y vengativo contra los sioux, incluso hasta lograr su exterminio: hombres, mujeres y ni?os¡±. Lo ten¨ªa claro, y as¨ª termin¨® sucediendo (o casi: sobrevivieron unos cuantos). ?Qui¨¦n iba a ponerle el menor freno al progreso entonces, qui¨¦n iba a chistar ante un futuro que se preve¨ªa radiante?
Ahora sabemos que hay un problema: el medio ambiente. Obama ha sido sensible a sus exigencias y en noviembre no permiti¨® que se construyera, por razones ambientales, el megaoleoducto KeystoneXL, que iba a ir desde Canad¨¢ hasta el Golfo de M¨¦xico, pasando por... Dakota del Norte.
Los sioux han conseguido parar el otro oleoducto. Como ocurre en cada conflicto habr¨¢ razones leg¨ªtimas de la empresa, y tambi¨¦n tendr¨¢n su parte de raz¨®n esos legendarios indios cuya vida giraba en torno al b¨²falo y que cre¨ªan que en unas colinas de esas zonas del norte de Estados Unidos se encontraba El Coraz¨®n de Todo lo Existente. Lo que toca ahora es poner en una mesa a quienes andan sac¨¢ndole partido al fracking con El Coraz¨®n de Todo lo Existente. Es important¨ªsimo que se pongan de acuerdo. Seguramente, ese oleoducto es necesario para mucha gente, pero no puede hacerse sin tener en cuenta la letra peque?a de la historia, la de los perdedores. Y los sioux perdieron, pero ah¨ª est¨¢n.
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